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08 | Provocando.

HANNAH HUDSON

No he podido parar de pensar en el trato que hice con Alex hoy en la tarde, siento un deseo inexplicable por él. E incluso nunca pensé que en un par de horas lo estaría besando.

Porque sí, les digo: señoras y señores que en este preciso momento estoy besando a Alexander Bianchi.

Mi cuerpo –literalmente– exploto en fragmentos de goce en el momento que Alex unió nuestros labios en un beso caliente, necesitado. Escuché sonidos de sorpresa de parte de las chicas. Me concentré en su lengua adentrándose sin darme mucho tiempo para procesar, sin embargo rápidamente envolví mis brazos alrededor de su cuello juntando más nuestros cuerpos.

Sé que Alex me la está poniendo difícil –nivel dios– pero le daré una semana, en una semana estará entre mis piernas, debe estarlo.

Siento su erección ya formada, de una manera descarada me acerco más a él para sentirlo moviéndome un poco, él gruñe un poco deteniéndose.

Me separo de él sin querer abrir mis ojos y sin perder mi sonrisa, cuando abro los ojos él se sienta poniéndose un cojín en las piernas mientras yo me siento a su lado. Después de nuestro beso, le tocó a Luke y ahora a mí.

— ¿Reto? —me pregunta Liv.

—No, verdad —contradije.

— ¿Te gustó el beso con Alex? —me pregunta Liv con picardía.

Volteo a verlo.

—Estuvo bueno —él sonríe —Pero... He tenido mejores —mentí.

Esas palabras hacen que a Alex se le desaparezca la sonrisa –justo en ego y orgullo–. Pienso que me devolverá con alguna frase sarcástica, pero todo lo contrario sin decir nada más, se levantan de una manera brusca yéndose dejándonos a todos sorprendidos.

— ¿Hannah, qué te pasa? —cuestiona Jack, mi hermano.

Lo miro con indiferencia —Nada.

Jack siempre me va a tener rencor por un error que cometí en el pasado, en vez de ser mi hermano y haberme apoyado, se fue, se mudó y no volví a ver al menos para las vacaciones o eventos. Y como es de esperar Jack, me culpara a mí.

Como siempre.

—Primero lo besas y después le dices que has tenido mejores —se molesta e imita un poco mi voz.

—Jack es mi puta vida, es diversión, la diversión es totalmente gratis —respondí echándome hacia atrás.

—Decías exactamente lo mismo antes —suspira —Viste como sucedieron las cosas, después no me vengas a llorar a mí.

Ahora suspire.

—No te preocupes, hace tiempo que me di cuenta que no solamente eres mi hermano... —lo miré con determinación.

Me importaba una reverenda mierda que este Luke y Dylan mirándonos con curiosidad, pero no me detendré a que vayamos a un lugar privado a ofendernos, hace tiempo que perdí el pánico escénico.

—Hannah, no —Naomi quiere detenerme.

—También eres unas de las personas que me odia, una de las personas que solo me dio la puta espalda cuando más lo necesitaba, un puto egoísta —solté.

Jack negó con pesar, un pesar bastante falso.

—No te odio y lo sabes. No hagas tus berrinches.

Se levanta yéndose hacia la segunda planta, ignoro todo el sentimiento que siente mi cuerpo, ambos nos dañamos.

Con los chicos seguimos hablando como si nada hubiese sucedido, quiero subir para seguir molestando a Alex.