ALEXANDER BIANCHI
— ¡Muggle levántate!
Gimo hundiendo más mi rostro en la almohada. Mientras unas delicadas y pequeñas manos me sacuden los hombros.
—Te dije que no se quería levantar —ese es Dylan.
—Italiani lo prometiste —se desespera Hermione.
—Ya voy —dije estirándome.
Aún no abro mis ojos, pero siento los dedos helados de Hermione en mis párpados obligándome abrirlos.
— ¿Ya estas despierto?
Asiento sacudiendo mi rostro para que me deje en paz. Hermione en los pocos días que llevo conociéndola es una chica increíble, además ser muy simpática y sociable, hoy prometí llevarla a la universidad, ya que ella aún es menor de edad –diecisiete años– y quiere conocerte el mundo universitario.
—Entonces con Dylan iremos a tomar desayunos mientras tú te alistas —me sonríe caminando hacia la salida —Y no es por presionarte, pero apúrate, muggle.
Ella sale cerrando la puerta, suspiré preguntándome ¿Por qué me hice amigo de ella en dos putos días? Puede ser porque me ayudó cuando estaba vomitando y Luke follando con una desconocida. O también porque me da un poco de sentimentalismo, ya que por lo que me comentó su hermano y familia nunca la toman en cuenta.
Ayer recién conoció a los chicos y a Abigail que estaba de paso. Con el que mejor se lleva es con Dylan, ambos tienen esa vibras positivas y humorísticas que nadie se las quita.
Me levanté y me dirigí al baño a hacer lo mismo de todos los días. Al estar listo bajé a la cocina, ayer le había prometido a Hermione que la llevaría a la universidad porque ella nunca ha ido a una y quiere saber dónde estudiar, ya que está en su último año.
—Vamos —dice cuando me ve.
—Déjame comer algo —pido sentándome al lado de Dylan.
—Estoy ansiosa.
—Mi mamá decía que cuando estaba muy eufórico podía sentarme para calmarme —cuenta Dylan y Hermione se sienta rápidamente.
— ¿Y funcionaba?
Dylan niega, reímos. Luego de mi desayuno nos vamos en mi auto directo a la universidad, es primera vez que iré después de lo que ha sucedido y muy probablemente la veré –a Hannah–, ya que sé que se nos topan algunos horarios y eso me tiene algo tenso.
Vamos dos horas adelantados antes de mis clases, pero la idea es mostrarle la universidad a Hermione.
— ¡Ah! —Chilla Hermione en la parte trasera cuando estamos por llegar, Dylan voltea y yo la miro por el espejo retrovisor —Perdón, me he emocionado.
Estaciono y ella es la primera en bajar.
—Esa chica tiene demasiada energía —murmura Dylan bajando.
Suspiro e intento relajarme antes de bajar del auto, no me quiero encontrar Hannah, sé que debo verla el sábado –por la fiesta de Luke– por lo que ya estoy convencido de que la veré el sábado y no hoy.
Así que preparado no estoy,
Bajo del auto y Hermione me sonríe de labios apretados entrelaza su brazo con el mío y con el de Dylan, seguramente no vemos ridículos, pero dejamos que nos guíe a su antojo.
Empezamos el recorrido por el campus y jardines, ya que a ella le gustaría vivir en la misma universidad, luego por los centros, las bibliotecas, los campos de deporte y algunos salones.
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Por Nosotros© ✓
Romance(TERMINADA) A ella su pasado la atormenta, pero a pesar de eso siempre demuestra una sonrisa. Él frío, seductor y seguro. Ambos quieren tener el control. A Hannah Hudson le gusta jugar. Y a Alexander Bianchi le gusta ganar. Un trato excitante sobra...