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12 | Ex.

HANNAH HUDSON

—Buon compleanno, Stellina —me susurra en el oído Alex.

Levanto mi rostro para mirarlo con una sonrisa, es la primera vez que me habla en italiano, bueno no tan primera vez, ya que hace algunos días en medio de un momento placentero me decía Stellina, pero nunca pensé que me lo diría aquí, en mi cumpleaños.

Me siento como niña pequeña que va a recibir su regalo, pero en realidad desde que estuvimos juntos y Alex me dio un momento sexual que no he podido sacarlo de mi cabeza, parece un puto pájaro dando vueltas, es que para mí fue algo maravilloso todo.

Mucho más de lo que pensaba.

—Gracias —le digo alejándome de sus brazos, ya que estábamos abrazados.

—Mmm... —se pasa una mano por su pelo —No sabía que regalarte —estira su mano con una caja de chocolate —No sabía tus gustos y bueno.

Los recibí con una sonrisa.

—Tranquilo. Pareces nervioso —le digo.

Él me sonríe mientras nos quedamos viendo a los ojos, su mirada sigue fría. Es imposible no pensar que todo cambió desde ese día, intenté sonar molesta no quería que me volviera a decir algo feo, ya sería demasiado humillante, pero todo lo contrario él se disculpó y eso me hizo casi tener una taquicardia.

—Bueno, bueno, feliz cumpleaños a Lola bunny —dice Dylan interrumpiéndonos.

Esperen. Me llamo como la coneja de los looney tunes ¿Qué mierda?

— ¿Por qué me dices como la coneja de los looney tunes? —le pregunto a Dylan.

Observo de reojo como Alex negó con su cabeza ocultando su sonrisa bajo su mano.

—Bueno este chico de aquí es Bugs Bunny —dice golpeando el hombro de Alex mientras los observo con el ceño fruncido —Le decimos así por qué le gusta follar y a los conejos le gusta follar ¿Me entiendes?

Dylan está loco.

—Sí, pero aún no entiendo en qué parte entro a esta historia yo.

Alex ríe; su risa es roca pero sin perder un tono suave.

—Ustedes dos, el otro día se fueron juntos de la fiesta y no me digan que no follaron, porque esa no me la creo.

Solté una pequeña risita.

— ¿Y?

No lo negué, no follamos solo fueron dedos, pero por mí que todo el mundo sepa que Alexander estuvo en mi cama con sus dedos dentro de mí.

—Son pareja sexual ahora.

Definitivamente Dylan está loco.

—No Dylan, no somos parejas ni vamos a hacerlo bueno, solo somos... —mire a Alex, pero este no me miraba a mí —Amigos, así que no me digas Lola Bunny —le pido.

—Bueno, pero no me muerdas es tu cumpleaños y tienes que disfrutar —bromea Dylan que luego mira a Alex e imita un micrófono con su mano — ¿Y a ti te comieron la lengua los ratones, Alexander Bianchi como se siente quedar en la friendzone?

Me río alejándome de ellos y sigo disfrutando de la fiesta hasta que alguien me interrumpe.

—Hola —dice una voz que reconozco perfectamente.

Oliver. Mi ex. Volteo a verlo. Solo sé amable.

—Hola —dije mirando sus ojos color miel.

—Feliz cumpleaños —dice nervioso.