°•Mateo•°
-Mateo, ¿qué haces acá?- Pregunto ella confundida.
Pero no respondí nada.
Con una sonrisa me acerqué a ella y la agarré por la cintura.
-Estas hermosa wacha. ¿Me extrañaste?- Hable con una sonrisa.
Ella me la devolvió y uni nuestros labios en un chape lento.
Baje mis manos a su orto y lo apreté pegándola mas a mi.
-Mateo.- Me retó encima de mis labios.
Le di un piquito.
-Tenía ganas de hacer eso desde que te vi entrar con ese vestidito-sonrei- A ver, una vueltita.
La agarré de la mano y la hice girar.
-Naaa, mira lo que es eso.- Me tape la cara. Ella soltó una carcajada.
La volvi a acercar a mi y empecé a besarla desesperadamente.
Volví a poner mis manos en su culo.
-Cuidado con esas manos. Estamos en el baño de mi mejor amigo.- Advirtió.
-Otro desafío.- Le guiñe un ojo y la volvi a chapar.
Lentamente empecé a levantarle el vestido desde atras. Acariciando todo su orto.
Una vez que estaba libre al completo le metí una leve nalgada.
Ella pego un saltito y después se empezó a reír encima de mis labios.
Su risa me daba risa a mi asi que también me reí.
La empecé a besar mientras la alsaba, y lentamente la apoyaba en el lavamanos.
-Vamos a romper esto.- Soltó una risita hablando del lavamos.
-En este momento es lo que menos me importa.
Me metí entre medio de sus dos piernas y la empecé a chapar con lujuria.
Con una de mis manos desprendi mi pantalón y lo baje hasta la mitad, lo mismo con el boxer.
Mi amiguito ya estaba más que despierto.
-No tenemos forro.- Susurro ella.
De mi bolsillo delantero saque un forro.
-Siempre preparado.- Ella negó con la cabeza riéndose y yo abri el forro.
Me lo puse y volví a atacar sus labios.
Sin dejar de besarla, corri un poco su tanga y fui entrando en ella lentamente.
Empecé a embestirla.
Ella enrosco sus piernas en mi cintura y su manos en mi espalda.
Yo con mis besos ahogaba sus gemidos ya que sería bastante incómodo si nos escuchan.
Esto tenía que ser rápido asique empecé a embestirla más fuerte y más rápido. Adentró y afuera.
En unos minutos soltó un gemido un poco más fuerte que los anteriores cuando llegó a su orgasmo.
Unos segundos después igualmente yo.
Me quedé en esa posición poniendo en orden mi respiración.
La mire, estaba colorada, tenía los labios un poco hinchados y rojos, además de toda la pintura corrida, y las pupilas dilatadas.
Deje un suave beso en sus labios, mientras salía de adentro de ella.
-No puedo creer que lo hice en el baño de Valen.- Habló en susurro, los dos reimos.
La alse nuevamente y la baje del lavamanos.
Mientras ella se acomodaba el vestido yo me seque el forro y lo tire en el tachito de basura que estaba al costado del inodoro.
Me subí el boxer, después el pantalón y me lo prendí.
-Nuuu, mira como tengo la geta.- Habló mirándose al espejo.
Tenía toda la pintura corrida.
Me paré atrás de ella mirándome en el espejo tambien.
-Nuuu, mira la tuya.- Habló riendo.
-Eso es una prueba de que no chapamos, nos comemos la boca.
-Corta la bocha.- Río mientras se acomodaba el pelo.
-Eh que me copias gila.
-Me lo pegaste.- Reímos.
Abrió el pico y empezó a lavarse la boca, sacándose toda la pintura que tenía corrida.
Una vez que se sacó todo, se secó con la toalla.
Agarró una pintura que había al costado del lavamos, supongo que era suya.
-Para, no te pintes todavía. Dame un beso antes.- Pedí.
Ella se dio vuelta, puso su manos en mi cuello y unió nuestros labios en un tierno chape.
Después de unos minutos lo terminamos con un piquito al final y ella se dio vuelta de nuevo.
Se volvió a lavar, esta vez yo la manche a ella.
Y esta vez si, empezo a pintarse. Yo la miraba atentamente por el espejo.
-No entiendo como hacen las mujeres para pintarse tan piola.
-Yo me pinto como el culo igual.- Río.
-Según vos. Mira, rre prolijito te pintas.
Me dedico una sonrisa a boca cerrada a través del espejo.
Se metió la pintura en las tetas y se dio vuelta mirándome.
-Quien pudiera ser esa pintura.- Acote y ella se empezo a reír a carcajadas contagiandome a mí.
-Basta de chamuyarme que me tengo que ir, van a decir que estuve tres hora pintandome la boca.
-No importa.- La agarré por la cintura.
-Basta, portate bien-me sacó las manos- Bajo yo primera, después vos.
Hice truchita para que me diera un beso, suspiro y me dio un leve piquito para no mancharse.
-¿Estoy bien?-pregunto acomodandose bien el vestido y el pelo- ¿No se nota que acabo de coger en el baño?- Río.
-Y yo te veo bastante bien.- La mire de arriba abajo mientras me mordia el labio.
Ella rio.
-Cortala de chamuyarme, me voy-camino hacia la puerta- Lavate la boca que pareces un payaso. Nos vemos abajo.- Sonrió y salió del baño.
Yo me quedé mirando la puerta, sonriendo cómo un pelotudo.
Después me mire al espejo. Algo estaba mal.
Me estaba encariñando con ella más de lo normal. De por sí estaba siendo más amoroso de lo normal.
Con ninguna de las muchas pibas con las que tuve un garche fijo fue así, nunca.
Hace más de una semana que no estoy con otra piba que no sea ella.
No me pienso enganchar, y por suerte en breve iban a venir un montón de pibas para sacarme esas ideas de la cabeza.
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Okei agárrense de la silla que acá empieza el quilombo😶
