VII. ROSTROS DEL PASADO.
Su mano se movía de forma meditada y circular sobre la dura mesa de cristal. Cualquiera pensaría que se encontraba atento a la junta que se estaba desarrollando, pero su mente seguía moviendo engranajes sobre su compromiso.
Después de llegar a un acuerdo, y aceptar con bolígrafo en mano todos los acuerdos que ambas partes habían acordado.
Por qué si bien, el señor Ahmed Sabbagh sabía las reacciones de su nieto, además de las actitudes estúpidas que tomaría.Así que, como si supiera que ninguno tardaría en aceptar, dejo sus propias reglas, que dejaban a la rubia protegida para cualquiera de sus estupideces.
Malik se sorprendió cuando su difunto abuelo le dejo una nota, diciéndole que si fallaba o cometía un error y Samantha deseaba liberarse, el estaba obligado a realizar el divorcio express.El talaq.
No se imaginó haciéndolo, pero si el se volvía mano dura y desistía, ella pondria los documentos en manos de su abogados y la cosa siempre saldría a favor de ella.
Y peor para él.
Puesto que si se realizaba la segundo, ella se llevaría el 50% de sus bienes, los aceptará o no, serían de su propiedad.La sonrisa de su abuela era de entera satisfacción, puesto que ella se esperaba un poco más de debate en torno a sus dudas.
Aunque algunos se lo tomaron bien, otros solamente asintieron sin dar un comentario, y los últimos y no menos importantes, se enfadaron e hicieron un escándalo.Cuando Samantha se había retirado.
Malik no volvió a verla desde entonces, pero aunque se mantiene en la distancia, sabe que ella se a concentrado de lleno en la empresa tal como en los últimos 5 años, y sus pensamientos lo desvían a que ella solo hace esto por lastima, que en la primer oportunidad hará que el realice el divorcio instantáneo.
—¿Señor Sabbagh?. —una voz femenina lo trae de vuelta a su realidad.
—Si, señorita Lang. —le responde cortésmente a su asesora.
—Consultaba si desea que se hagan de nuevo los estudios sobre la inversión. —su tono es bajo, queriendo ser coqueta y sensual a la vez.
—Si, inicia de inmediato. —respondio obligando a su mente a centrarse en la reunión.
Al terminar la reunión, se quedó postrado en su silla justo al frente de todos, como un amo y señor.
Era un gobernante, pero más que eso, tenía negocios que atender personalmente, ambos cargos limitaban su tiempo.Leylak que se había quedado espectante, se levantó hasta llegar a Malik. El hiyab de color morado resaltaba sobre su piel, haciendo combinación con el vestido negro que usaba.
—No estaré en la empresa el resto de la tarde, pasaré por Ramsey y luego iré a mis prácticas. —informo.
Malik asintió. —Esta bien Leylak, no te preocupes.
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Una esposa para Malik #2 |TERMINADA|
RomancePara Samantha Müller ser la CEO de un imperio rodeado de hombres, no le a traído más que una montaña rusa de luchas y sacrificios, que la han vuelto un ser impenetrable, donde cada segundo de su vida está planificado de manera minuciosa. Una llamada...