-Descansa un ratito, corazón, seguro Clint se irá como hilo de media cuándo empiece a relatar toda su cita. -Nat besó levemente sus labios y dió un brinco sobre el colchón justo al costado de Steve cuando su hermano pegó un gritote desde el living para que se apurara.
-Suena a que está muy emocionado. -Steve sonrió divertido y la abrazó con cariño nuevamente por la cintura para estrecharla a su cuerpo y dejar un besito casto en su mejilla.
La cena había estado deliciosa y sólo deseaba acurrucarse con ella en la cama y llenarla de besos para sentirse más tranquilo, pero entendía que debía compartirla y dejarla ir con el enfadoso de su futuro cuñado y darle todo su apoyo.
-Te traeré a Sami para que te haga compañía, ¿está bien, amor?. -Ella dejó varios besos fugaces sobre la punta de sus labios.
-Sip, está bien. -Dejó que lo mimara para después verla ponerse de pie de la cama para arreglarse un poco el cabello y la pijama que se había puesto de dos piezas, shorts y camiseta de algodón con estampados de patitos.
-¡Te amo, nena!
Steve la vió embobado salir con una adorable sonrisa enmarcada en sus labios rosados para a los pocos segundos verla regresar con Sami en sus brazos. La rubia dejó al minino en su regazo, besó su mentón y huyó de ahí antes de que Clint fuera por ella y se pusiera de enfadoso.
-No volvemos a ver pequeño monstruo.
Steve acarició el lomo de Sami y el gato ronroneó y se se revolcó encantado sobre su regazo, estirando sus patas blancas sobre su estómago desnudo como si el cuerpo de su humano favorito fuese un gran y acolchado cojín. Evans rodó los ojos y luego los cerró para descansar un poco mientras acariciaba el pelaje esponjoso del felino, sintiendo como poco a poco sus pensamientos comenzaron a pesar y cortarse.
-¡Dios, Natasha, debiste verla, era una bonita aparición! Con su cabello castaño y esos enormes ojos color marrón, su sonrisa era la de una niña enamorada. Fue la cita perfecta, el ambiente en el restaurante fue agradable, la música, la caminata en el parque, los besos bajo el árbol. -Clint suspiró y se dejó caer rendido sobre el sofá de su hermana mientras ella reía y lo miraba divertida al otro extremo del mismo sillón.
-¿La besaste? Dime quién eres y dónde está mi bobo hermano... -Nat se burló de él, pero estaba demasiado feliz como atacar.
-Si, si la bese, la besé tantas veces que ya le ardían los labios... -Clint festejo como un niño.
-¡Yuck! No me cuentes esos detalles sucios y te dije que era la chica perfecta para ti, pero eres un terco. -Ella negó con la cabeza, ambos tomaron el chocolate caliente que Clint preparó, subieron sus pies al mueble y recargaron sus espaldas contra el brazo del sofá de su lado para quedar frente a frente y poder prepararse para una noche de chismes.
-Pues tenías toda la razón, hermanita, es la mujer mas bonita, simpática y cariñosa que he conocido, es un dulce de miel. -Clint se llevó la mano al pecho y se dejó ir hacía atrás con un toque dramático que hizo a la rubia soltar una carcajada contagiosa.
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💞𝙎𝙊𝙐𝙇𝙈𝘼𝙏𝙀𝙎 💞
Romance¿Crees en las almas gemelas? Su trabajo consistía en emparejar al atractivo, descarado, engreído y libertino Steve Evans de 35 años con una linda chica a la que pudiese desposar para poder dirigir junto a sus hermanos la empresa familiar de su padre...