"Mi chica del Fútbol" CANCELADA TEMPORALMENTE |H.S|

C.9 [Parte II]

Capítulo 9. [Parte II]

-¿No-novia? –pregunte.

-Sí, novia. –respondió.

-¿Por qué? –pregunté.

-Porque te amo, _____________. Tengo días demostrándotelo, días diciéndotelo, ¿acaso no lo recordabas? –dijo, agarrándome de las manos.

-Cosas como estas no se olvidan. –dije, sin pensarlo dos veces.

-He sido yo quien ha enviado todas esas cartas a las 12 de la noche, he sido yo quien te ha enviado tantas rosas, solo hoy me he atrevido a darte un ramo personalmente, porque las otras veces no he sabido cómo irías a reaccionar. –dijo, ahora rió y bajó el rostro.- Puede que me creas un demente enamorado, pero si crees que lo soy entonces llámame así todos los días, por que ese sustantivo y adjetivo jamás serán cambiados. Estoy locamente enamorado de ti, quiero estar contigo, quiero ser parte de tu vida, quiero pertenecer a tu futuro. __________, ¿quieres ser mi novia, por favor?

Me quedé en total silencio, no sabía a qué responder. Si me levantaba del asiento, tal vez no lo volvería a ver jamás. Porque Harry era capas de muchas cosas, pero no de ir tras una mujer. Tal vez no volver a verlo era la mejor opción de todas, tal vez. Pero a la misma vez podría ser una de las más grandes locuras a la que cualquier mujer se podría enfrentar.

Sin dudas me levanté y salí corriendo, salí del restaurante, sin percatarme que una lluvia de agosto empezaba a caer. Mientras caminaba por la vereda escuché unos pasos que me seguían, hasta que una mano se colocó sobre mi cintura, haciéndome girar sobre mis talones y quedar en frente a esa persona.

 -¿Por qué sales corriendo a lo primero que te digo? ¿Por qué me haces sentir como un completo idiota? ¿Es que no entiendes que te amo? ¡Joder, ___________, te amo más que a nada en este maldito mundo!

 -Harry, yo…

 -No, no digas nada…solo escúchame. He hecho cosas que jamás he hecho por nadie más. Solía ser un idiota apartado de la sociedad, porque temía lastimarla o que ella me lastimara a mí. ¡Eso es lo que no quiero hacerte! ¡No quiero lastimarte! Pero tampoco quiero que me lastimes tú a mí. Y con todo este tiempo que llevo conociéndote me he dado cuenta de que yo a ti jamás te lastimaría, no sería tan idiota como para si quiera tocarte un pelo. ______________, ¿por qué no entiendes que lo que siento por ti es algo que jamás he sentido por nadie más? ¡Coño! ¿Qué debo hacer para que lo entiendas? ¿Debo tirarme de un puente? Lo haré. ¿Debo tatuarme el corazón? Lo haré. ¿Debo cortarme el pene? ¡Lo haré! Aún siendo la más grande locura y estupidez lo haré, ¡lo haré!

 -Yo…

 -Solo escúchame. –dijo, agarrándome la cara.- No estoy mojándome de agua de lluvia porque me lo han pedido, lo estoy haciendo porque te amo. ¡Quiero que lo entiendas! Quiero que me digas que me amas, porque me siento un completo idiota al ser el único en decirlo. –acercó su rostro más al mío- Solo te estoy pidiendo una oportunidad a que me permitas ser quién te despierte por las mañanas, ser quién te haga sonreír después de horas de llanto. Solo eso te pido, _________...ayúdame a quitarme este mal sabor a odio hacia mí mismo, ayúdame a sentirme amado…ámame, ¿sí? Ámame tal y como yo te he amado durante todos estos meses que hemos pasado juntos. Es eso lo único que te pido, ¿entiendes? Quiero que me ames tal como te amo yo a ti.

Me quedé en silencio, no podía moverme, no. Si me movía podría hacer un movimiento equivocado y me arrepentiría toda mi vida. Pero si no me movía, si me quedaba allí, quieta, paralizada, podría perder lo que más quería en este mundo, miento, lo que más amo en este mundo. Podría perder a Harry.

Pero, no me sentía lista para llevar una relación, ¡sé que soy una idiota, pero no me siento lista! Nunca en mi vida he tenido novio, no sé cómo hacerlo feliz, simplemente no lo sé.

 -Quiero…quiero que…-miré mis pies, no podía mirarlo a la cara- quiero que estés con otra chica, dame tiempo. –dije, aún con la mirada baja.

-¿Qué has dicho? –preguntó, sorprendido.

-Quiero que te acuestes con otras chicas, que beses a otras chicas, lo que estás diciéndome es por un momento de confusión Harry, lo sé.

-No sabes lo que estás diciendo ___________, no lo sabes. –dijo, ahora separándose de mí.

Quería volver a su calor, quería abrazarlo y pedirle disculpas por lo que había dicho. Pero todo estaba dicho. Ninguna de mis palabras fueron dichas con el corazón, todas fueron dichas con el cerebro. Dije lo que pensé sería mejor.

-No estás segura de lo que dices, ___________. –dijo, alejándose lo suficiente como para hacerme derramar lágrimas de dolor- Lo he hecho todo por ti, he dejado todo por ti. ¿Así es como me pagas?

-Tú no me entiendes, Harry. –dije.

-¿Que no te entiendo? ¡Me confundes! ¿Por qué me dijiste que me amabas si no estabas lista para llevar la relación a cabo? ¡¿Por qué has mentido todo este maldito tiempo?!

-¡No he mentido en nada! –exclamé.

-Lo has hecho, ¿pero sabes qué es lo peor? Que ahora me estás echando, me estás dando permisos a buscarme otra mujer y hacerla mía, eso es lo que estás haciendo. ¡Es lo más loco que en mi vida me han dicho y enserio necesito saber por qué! –se acercó a mí- ¿Por qué _______?

-Es lo mejor. –dije.

-Lo mejor para mí sería vivir mi vida contigo, estar contigo siempre. Pero es obvio que no es lo que tu quieres. –dijo, ahora se alejó- Fue un gusto haberte conocido, ___________ Windhouse, un gusto.

 Caminó hasta su motocicleta y se subió en ella. No se puso su casco, quería que lo mirara a los ojos y me diera cuenta de que lo que acababa de hacer fue lo más estúpido que he hecho en toda mi vida.