R. O. T. B. A. S. |6|

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Como Gu Ning también estaba involucrada en el negocio del jade, también había escuchado sobre Ma Jingshan, algunas personas habían hablado sobre el presidente Ma ayer, pero no había escuchado su nombre completo, por lo que no sabía que el presidente Ma era Ma Jingshan. 

Ma Jingshan no solo era el vicepresidente de la Asociación de Jade en la provincia de Yun, también era miembro de la famosa familia Ma en el condado de Yin, provincia de Yun.

La familia Ma era el proveedor de jade número uno en el condado de Yin, y era tan influyente y rica como los tres proveedores de jade de la Ciudad Teng.

Obviamente, Gu Ning estaba feliz de hacerse amigo de una figura tan importante.

-De hecho, eres una chica muy inteligente —dijo Ma Jingshan con una sonrisa. 

La actitud cortés de Gu Ning le dejó una buena impresión.

Después de eso, Ma Jingshan sacó su tarjeta de identificación y se la entregó a Gu Ning. 

-Esta es mi tarjeta de presentación. Señorita Gu, siempre que visite el condado de Yin, puede llamarme y será mi distinguida invitada allí.

La institución pública para la que trabajaba Ma Jingshan estaba en la ciudad de Yun, que era la capital de la provincia de Yun, pero Ma Jingshan en realidad pasó más tiempo en el condado de Yin porque ya era mayor y estaba a punto de jubilarse.

-Muchas gracias, Sr. Ma —dijo Gu Ning y tomó la tarjeta de identificación de Ma Jingshan. 

También le entregó cortésmente a Ma Jingshan su propia tarjeta de presentación. 

-Me instalaré en la capital dentro de un mes. Sr. Ma, si visita la capital algún día, no dude en llamarme.

-Gracias. —Ma Jingshan tomó la tarjeta de identificación de Gu Ning.

Aunque todavía no se conocían, sabían que podían ser buenos amigos.

Además, las empresas de jade de Gu Ning estaban en la provincia de Yun, por lo que podría necesitar la ayuda de Ma Jingshan en el futuro, de todos modos, no fue malo para ella mejorar sus conexiones.

-Señorita Gu, ¿su familia también tiene una empresa de joyería ya que compró tantas materias primas de jade? —preguntó Ma Jingshan.

No creía que Gu Ning comprara esas materias primas de jade para ella, aunque Gu Ning se comportaba como una mujer de negocios madura, todavía era demasiado joven.

Ma Jingshan no sabía la edad exacta de Gu Ning, pero pensó que debía tener alrededor de 20 años este año y aún debería ser una estudiante.

Gu Ning sonrió y dijo: 

-No realmente, yo misma estoy involucrado en el negocio del jade.

-¿Qué? —Ma Jingshan se sorprendió. 

Pronto se dio cuenta de que probablemente Gu Ning comenzó una empresa por su cuenta.

-Señor Ma, ¿has escuchado la noticia de que la familia Wang en Ciudad Teng fue reemplazada por una nueva compañía de jade no hace mucho tiempo? —preguntó Gu Ning.

-Sí, y escuché que fue una mujer quien lo hizo —dijo Ma Jingshan, y de repente se detuvo— De ninguna manera, ¿la mujer eres tú?

No podía creerlo, pero era muy posible.

-Sí, soy yo —dijo Gu Ning. 

No estaba presumiendo, pero pensó que debería ser honesta con su amigo; estaban haciendo negocios en la misma industria, por lo que podría ayudarlos a evitar una competencia innecesaria e injusta si ella le dijera la verdad.

No solo Ma Jingshan, sino también otros a su lado también estaban asombrados, para su asombro, esta joven frente a ellos pudo reemplazar a la familia Wang.

No estaban seguros de si Gu Ning era la razón por la que la familia Wang perdió su influencia y posición de la noche a la mañana, pero aún así no fue fácil reemplazarla.

En ese caso, Gu Ning debía tener conexiones poderosas o apoyo a sus espaldas, además, no era un secreto que Colorful Jade Provider tenía mucho éxito en la industria.

Incluso si Gu Ning no administraba la empresa ella misma, ella era la dueña, era una mujer de negocios inteligente y sabía cómo encontrar un gerente capaz para administrar la empresa por ella.

Si quería construir su imperio empresarial, tenía que aprender a confiar en muchas personas capacitadas para que la ayudaran a hacerlo.

-Señorita Gu, ¿puedo saber su edad? —preguntó Ma Jingshan.

-Diecinueve —dijo Gu Ning.

Al escuchar eso, Ma Jingshan se sorprendió enormemente.

-¡Eres mucho mejor que tus compañeros! —Ma Jingshan dijo.

-Gracias por su cumplido, Sr. Ma —dijo Gu Ning— Estamos haciendo negocios en la misma industria y la competencia es inevitable, pero espero que podamos competir entre nosotros de acuerdo con las reglas en lugar de usar trucos sucios.

La competencia siempre fue feroz en los negocios.

-Claro —dijo Ma Jingshan y estuvo de acuerdo.

Los compañeros no eran enemigos, podían llevarse bien entre ellos siempre que nadie hiciera trucos sucios.

Después, fueron juntos al restaurante cercano para tomar algo y comer antes de regresar a sus asientos media hora más tarde.

***

Durante la segunda mitad, Gu Ning ganó dos materias primas de jade parcialmente cortadas y cuatro materias primas de jade completas.