First golden trio.[1] 《H.P ÉPOCA MERODEADORA 》

01. Golden Trio. (Cuarto Año)

Editado:27/12/2020.

1974.

Narrado por Alexandra:

Cuatro años. Ese es el tiempo que pasó desde mi llegada a Hogwarts y la primera vez que hablé con dos niños, que hoy en día eran mis mejores amigos. Zack y Beth, eran las personas más honestas y justas que había conocido, por el castillo nos solían llamar "El Trío de Oro".

Casi siempre, aunque a nuestra jefa de casa le enorgullecía el motivo pero no le gustaba la idea, estábamos castigados. Pues siempre fuimos los defensores de los que creíamos que eran débiles o no estaban en condiciones de defenderse, siendo así, nosotros tres salíamos como los héroes que pensábamos que somos, y los defendimos a puño y espada. Más aún a los de primer año, quienes lamentablemente eran el punto de ataques de las serpientes, más si eran como yo, nacidos de Muggles. Llamándolos "Sangre sucia". Eso me hacía ponerme en modo leona y comenzar un duelo con cualquiera.

Una vez, a un chico llamado "Evan Rosier", le estaba lanzando un hechizo a un niño de Ravenclaw mientras le gritaba "Sangre sucia inmunda", y eso hizo que yo, no solamente le quitara la varita con un "Expeliarmus", sino que también le quebre la nariz de un puñetazo. Estuve horas limpiando sin magia los baños de niñas, pero no me arrepentía de nada.

En fin, en estos años algunas cosas cambiaron y otras no, con mi familia están las cosas complicadas... Ethan y Gabriel se fueron de casa, y Steven está metido en cosas malas Muggles. Por suerte, Thomas está de novio con un chico de su salón, sí, un chico. Al principio me sorprendió, pero todos lo aceptaron muy bien.

—Te estoy diciendo que no, me da vergüenza hablarle en clases, imagínate lo que me dará si lo invito a estudiar a la biblioteca.—Dijo Beth, por quinta vez.

Zack y yo, planeabamos y tratábamos de convencer a Beth que le pida al chico que le gusta desde segundo, ir a estudiar con ella a la biblioteca, y cuando digo "Estudiar", realmente me refiero eso. Beth es una chica muy tranquila y no hace más que estudiar, o de querernos hacer entrar en razón cuando con Zack planeamos Desaparecer a alguien de la faz de la tierra.

—Oh vamos Betty, debes invitarlo alguna vez, sino alguien se adelantará y lo perderás para siempre.—Dramatizo Zack.

—Torombolo Tiene razón.—Agregué yo.—Si quieres, puedo ir por ti a preguntarle si le gustaría estar en la biblioteca contigo estudiando por largas horas.—Dije mirando a mi sonrojada amiga.

—¿Qué-Qué? No, no, definitivamente no. Creerá que soy una cobarde.—Murmuró la pelinegra.

—¿Y si te acompaño?.—Pregunté.— Te espero a unos centímetros de ti. Y tú vas, y le dices.

Beth pareció pensarlo, y luego asintió con la cabeza.

—Bien, vamos a buscar a tu compañero de estudios que en un futuro será el padre de tus hijos.—Canturreo Zack, mientras daba saltitos. Yo reía a carcajadas. Seguro que me oyeron hasta Hogsmade.

Por suerte somos muy normales.

[•••]

Y ahí me encontraba yo, a unos centímetros detrás de Beth, mientras ella hablaba con Remus Lupin. Quien a su vez, estaba acompañado de sus tres amigos, que para mí criterio, todos son unos idiotas y él se salva por muy poco de ser como ellos.

—Entonces vamos a la Biblioteca.—Oí a Lupin decirle a mi amiga. Beth por dentro debe de estar saltando, y por fuera debe estar roja.

Mi mejor amiga asintió con la cabeza, Remus se despidió de sus amigos, y comenzaron a caminar juntos a su lugar sagrado, la biblioteca.

Iba a comenzar mi rumbo de buscar a Zack para ir al lago negro, ya que hoy es domingo y no tenemos nada mejor que hacer, pero una voz me detuvo.

—Hey tú, Pelirroja.—Dijo la Reconocible voz del famoso mata corazones de Sirius Black. Me giré sobre mis talones, para mirarlo.—¿Qué dices si vamos al lago negro? Solos.—Dice en una forma coqueta mientras caminaba hacia a mí con una sonrisa arrogante.

Lo mire con una ceja levantada y largue una carcajada, el chico frunció el ceño y pude ver que sus amigos reían por lo bajo.

—¿Qué te sucede?.—Preguntó Black un poco Irritado.

—Perdón. Pero no eres mi tipo, Black.—Dije para darme la vuelta y salir caminando en dirección de Zack, quien se encontraba riendo a unos metros observando la escena. Pude oír la risa burlona de su amigo James, y la tímida risita del gordito.

Zack y yo chocamos los cinco, mientras caminábamos al lago negro.

—Eres increíble cuando se trata de chicos, Querida Alex.—Halago mi amigo.—Si no fuera Gay, estaría tan loco por ti como acabaste de dejar loco a Black.—Reí ante ese comentario. La homosexualidad de mi buen amigo Zack no era ningún secreto en Hogwarts, pues en aquel colegio nada podía mantenerse entre dos personas.

[•••]

—Entonces, ¿Estuviste roja todo el tiempo, y él te sonreía?—Preguntó Zack, mientras se servía algo de sopa. Recién en la cena volvimos a ver a nuestra amiga, la cual estaba roja como tomate desde que llego.

—Sí, y luego me dijo si quería ir a Hogsmade el sábado.—Comentó sonrojada. Es muy tierna.

—¡Oh Por Dios!.—Dice Zack con los ojos abiertos.—¿Oíste lo mismo que yo, Zanahorias?.

—Fuerte y claro mi querido Torombolo.—Contesté, sabía que iba a hacer una súper escena.

—¡Nuestra niña tendrá una cita!.—Aplaudiendo.—Crecen tan rápido.—Dijo simulando que se secaba las lágrimas.

—Lo sé, Estoy orgullosa de nuestra bebé, solo espero que no sea tonta y tenga un bebé.—Dije imitando a mi amigo.

—¿Te imaginas? Una bebé cargando a otra bebé. Sería extraño.—Dijo Zack, con los ojos abiertos.

—Callense.—Susurra Beth, con vergüenza.

—Le damos Vergüenza, querida.—Murmuró Zack.

—Lo sé cariño, lo sé.—Conteste de la misma manera.

Solíamos actuar como si fuéramos un matrimonio con una hija adolescente, la cual avergonzabamos siempre. Si no eran por las muestras de cariño, eran por las típicas escenas dramáticas que armabamos en donde sea, y con quien sea.