First golden trio.[1] 《H.P ÉPOCA MERODEADORA 》

22. Lily "La Sangre Sucia".

Narrador omnisciente:

Los famosos T.I.M.O.S fueron la semana más pesada para los alumnos de quinto año, algunos fueron enviados a la enfermería por pociones calmantes.

Mientras otros, disfrutaban de una tarde libre con sus amigos junto al lago negro. El Trío de Oro se encontraban cerca del bosque prohibido, Elizabeth se quitaba el estrés que llevaba acumulando por días, lanzando flechas al montón de paja que había ahí. Mientras Zack estaba tirado en el suelo durmiendo una pequeña siesta y Alexandra leía el libro que su hermano le regaló.

Y por el otro lado estaban los Merodeadores, que se dirigían a un tranquilo y callado Snape, que estaba apoyado en un árbol leyendo un libro. Sirius iba susurrandole a James que debía ser valiente, mientras Peter solo iba riendo y Remus solo fue por si las cosas se complicaban o pasaban a ser graves.

-¡Quejicus! ¿Qué estás haciendo? ¿Leyendo artes oscuras o  investigando el como unirte a los mortifagos?.-Pregunta James sarcástico. Lanza un hechizo y hace que el libro del joven de cabello grasoso volara a Merlín-Sabe-Donde. Severus se levanta del suelo y saca su varita, pero segundos después también voló lejos de el.

-¡Tu puedes James!.-Alienta Sirius. Peter reía descostillado, y Remus solo negaba con la cabeza. James sonrió y con un "Levicorpus" hizo que el Slytherin quedara flotando en los aires. Todos reían y victoriaban al joven Potter.

Una cabellera roja se hizo presente, y furiosa como dragón se acercó al tumulto de personas.

-¡POTTER! ¡BAJALO AHORA MISMO!-Grita muy enfadada.

-Lo bajaré si aceptas salir conmigo a Hogsmeade.-Dice con su típica sonrisa arrogante.

-¡Prefiero salir con el Calamar gigante, antes que contigo! Bajalo ¡Ya!.-Insistió, aún con su pose de leona en ataque.

-Soy mejor que ese calamar, y mejor que él.-Dice mirando al Slytherin que aún seguía flotando.

-¡TU ERES UN IDIOTA, BRAVUCÓN Y ARROGANTE! ¡POR ESO NO SALDRÍA NUNCA CONTIGO! ¡YO TE ODIO POTTER!.-Grita con todas sus fuerzas.

El Trío de Oro se hizo presente, pues los gritos llegaban hasta donde ellos se encontraban.

-Tienes Suerte de que Lily esté aquí Quejicus.-Dice con una sonrisa burlona, bajando al chico.

Una vez en el suelo, el joven Severus se sentía tan humillado que palabras salieron de su boca sin pensar.

-¡No necesito la ayuda de una Sangre Sucia!.-Bramo. Todo el mundo dejó de respirar por unos segundos.