Relaciones de adolescentes

[15] Una culpa en silencio

Honrarás a tu padre y a tu madre, para que tu vida se alargue en la tierra que yo, el Señor tu Dios, te doy.

-Éxodo 20:12-

Capítulo 15: Una culpa en silencio.

Micaela caminaba por los pasillos del colegio siendo observada por las miradas de todas las personas a su alrededor. Ella siempre había llamado la atención de todos en el colegio, lo cual le agradaba, pero ahora no quiere ser el centro de atención después de todo lo que se ha estado diciendo de ella y de Tanner.

Algunas chicas se le acercaban para preguntarle si Tanner pronto estaría soltero, pero Micaela no le prestaba atención a sus palabras y seguía su camino evadiendo todo a su alrededor. Los chicos también se le acercaban para regalarle sus números de teléfono para que los llamará. Ella simplemente hacía pedazos los pequeños papeles donde estaban escritos dichos números y luego seguía caminando como si nada estuviera pasando.

En el colegio ya se había divulgado la supuesta separación de Micaela y Tanner, logrando que tanto chicos como chicas empezaran a ilucionarse con ideas y cosas en sus mentes apresuradas.

Micaela pudo llegar al patio trasero del colegio para así lograr sentarse en una de las bancas y respirar profundo. Procedió a cerrar sus ojos y calmarse después de todo lo que estaba ocurriendo. Lo único que pedía era paz y nada de problemas. Sus oídos claramente escuchaban a las chicas que pasaban por frente de ella y susurraban cosas como: ¿Qué habrá pasado para que ellos pronto se separen?.

Micaela estaba perdiendo la poca calma que sentía. Trataba de no prestarle atención a nada de lo que estaba ocurriendo, pero aunque quisiera no podía aún sacarse las miles de palabras que muchas personas pronunciaban. Y lo menos que podía olvidar eran las palabras con las cuales Tanner se refería a ella.

—Soy una dramática que perdió la calma —decía ella para sí misma mientras aún mantenía los ojos cerrados.

—Hey, te estaba buscando por todo el colegio —le informó Junior al llegar a donde ella estaba para después sentarse a su lado. Micaela pudo abrir sus ojos nuevamente para poder mirar a su amigo, y al hacerlo contuvo las lágrimas que amenazaban por salir —. Mejor no pregunto cómo estás porque es evidente.

—Detesto los chismes, Junior, pero esto que se está divulgado me tiene pensando.

—A mí tampoco me gusta el chisme, pero no debes permitir que esto te destruya. Tanto Tanner como tú deben de estar seguros de su relación. Nadie puede venir simplemente a contar algo que no sabe para arruinar lo que hay en ustedes.

—No me he sentido bien después de que todos estos problemas empezaron.

—Toda relación pasa por altas y bajas, es normal que vengan problemas para fortalecer el amor que se supone que tienen las parejas.

—Amor... —dijo ella con la mirada perdida hacia el frente —Ojalá eso pueda volver a florecer.

—Verás que así será. Esto simplemente es un pequeño problema del cual tú y Tanner saldrán.

—Micaela, necesitamos hablar —informó Tanner al llegar de sorpresa donde estaba su novia y Junior sentados —. Esto ya se está saliendo de control. Todos en el colegio piensan que yo voy a terminar contigo. En el salón no dejaban de hablar sobre eso.

—Yo mejor me voy para que puedan hablar mejor —comentó Junior al levantarse mientras miraba a Micaela —. Sabes que cuentas conmigo para lo que sea.

—¿Acaso me perdí de algo? —preguntó Tanner frunciendo su ceño al posar su mirada en Junior y luego en Micaela —¿Desde cuándo volvieron a hablarse? Pensé que ambos dejaron bien en claro su distancia desde hace años. ¿Volvieron a ser los mejores amigos?.