[51] Nada me puede separar de Jesús

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Por lo cual estoy seguro que ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni los principados, ni las potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor que Dios nos ha mostrado en Cristo Jesús nuestro Señor.

–Romanos 8:38,39–

Capítulo 51: Nada me puede separar de Jesús.

Un sentimiento agridulce sentía Carla dentro de si. La chica realmente no comprendía a Tanner. En la mañana había actuado muy extraño, y su aspecto demostraba el mismo pensamiento.

Aquellos insultos que Tanner pudo hacerle a Carla hizo que la rubia se llenara de más rabia hacia él, incrementando de esa forma su manera de venganza, pero aquellos ojos azules la embobaron a tal manera que se le olvidó por completo de los insultos que el chico le había soltado.

Decir que estaba enamorada era el término perfecto para lo que ella sentía. Carla estaba dispuesta a hacer cualquier cosa por Tanner, ya que sabía que de esa forma podía llamar más la atención del chico.

Mandarle muchos mensajes a Tanner no funcionaba para poder entablar una conversación con el chico, así que Carla se llenaba de ideas para poder hablar con él sin ningún problema.

—¿Qué estarás haciendo, Tanner? —se preguntó Carla con muchas inquietudes en su mente mientras buscaba la forma de hacer que Tanner le contestara los mensajes.

Carla Alvarado: ¿Por qué aún no me respondes los mensajes, bebé? Necesito hablar contigo sobre la página, todo está saliendo como quisiste.

Después de haber publicado aquella información de Antonieta que le había mandado aquella persona Carla recordó la foto que le había tomado a Uziel y a Antonieta cuando salían del pasillo abandonado del colegio, así que decidió publicarla de igual manera para que de esa forma incrementara aún más el auge que estaba teniendo la situación de la chica. Todo había salido tal y como Tanner lo quería, pero ahora Carla se encuentra en un desespero por saber cómo está Tanner.

Carla Alvarado: Respóndeme, Tanner. ¿Cómo es posible que quieras evadirme después de lo que hicimos en la página?

Minutos después Tanner pudo responderle a la chica, pero para mala suerte de Carla no fue un buen comentario de parte del chico.

Tanner Herrera: ¿No te cansas de molestar? Estoy ocupado. Me importa un rábano lo que quieras decirme.

Carla Alvarado: Ya deja de hablarme así. Te he dicho que no me gusta. Simplemente quiero hablar contigo. Se supone que somos amigos, o más que eso.

Tanner Herrera: No confundas las cosas. Lo último que quiero en este momento es tener a una loca más en mi vida.

La rabia se estaba apoderando poco a poco en Carla. Ciertamente le molestaba la actitud que Tanner estaba teniendo hacia ella, así que después de pensar en un mensaje para enviarle decidió hacer algo mejor para llamar la atención del chico.

En un movimiento rápido y sigiloso Carla pudo cerrar la puerta de su cuarto para luego subirse su camisa un poco hasta por debajo de sus senos, pudiendo así tomarse una foto de su abdomen para luego mandársela a Tanner, logrando una aceptación de parte del chico.

Tanner Herrera: Así que quieres jugar... me gusta eso. Pero no seas mala, muestra más. Quítate la camisa.

Carla no dudó en sonreír, pero los nervios empezaron a llenarla de inseguridad. Quitarse la camisa ya era más arriesgado.

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