❀ Capítulo final

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Jungkook salió de su ensoñación mirando angustiado y agitado a su alrededor. Taehyung se posicionaba a su lado echándole aire con su mano y Yoongi llevaba consigo un vaso donde seguramente hubiera estado el agua que ahora se encontraba por su rostro y ropa. Tocó su cabeza adolorido y se fijó que estaba sentado en una de las sillas de la cafetería donde solía ir usualmente.

– ¡Te dije que no le empujaras tan fuerte, imbécil! –Vociferó Taehyung mirando a Yoongi, éste solo se encogió de hombros con expresión neutra y se dio la vuelta para sentarse y seguir tomando de su batido.

– Ha sido un buen golpe, incluso caíste desmayado. –Se añadió Namjoon a la conversación.

– ¿Qué demonios ha pasado? –Preguntó esta vez el Alfa desorientado.

Taehyung suspiró y formó una mueca ladeada con sus labios.

– Yoongi te empujó cuando pasábamos por su local. –Explicó–. Te juro que yo no quería que lo hiciese, pero ya sabes lo cabezón que es. Podríamos haber inventado algún plan mejor que estrellarte contra su estantería de flores, porque ya ves como terminaste al golpearte la cabeza con uno de los soportes.

Jeon suspiró tratando de contener la calma y sujetó el puente de su nariz.

– ¿Por qué siempre me hacéis quedar ridículamente ante él? ¿Es que os gusta joderme porque soy el menor o qué?

– Solo queremos lo mejor para ti, mocoso. –Ese fue Yoongi–. Si yo no te hubiera empujado, nunca hubieras llamado su atención.

– ¡Normal, idiota! Si me estrello contra su local y sus flores, ¿¡cómo crees que se quede!? –Vociferó–. ¡No os vuelvo a decir más sobre él, siempre la acabáis fastidiando! ¡Déjenme!

Hizo el intento de levantarse y salir de ahí, pero un nuevo mareo lo azotó y cayó sentado en su asiento. Taehyung se aguantó una carcajada.

– Siempre... siempre hacéis cosas que no quiero solo porque soy tímido y tengo miedo a ser rechazado... -Murmuró con la voz cansada–. Sois mayores que yo y debo respetaros, pero estoy cansado de que no me dejéis hacer lo que quiera y al tiempo que quiera. Siempre le llamáis para que se acerque, le decís algún dato vergonzoso de mí y acabo perdiendo yo. Otro día alguno de vosotros le coquetea frente a mis narices teniendo Omega y además le compráis flores y demás diciendo que son para mis citas inexistentes. ¡No ayudáis! ¡Cualquier día me pegará un puñetazo y me dejará en el sitio, joder!

Taehyung asentía divertido a la vez que miraba tras él. Jungkook se fijó en sus ojos y quiso pensar lo peor. No iba a girarse, no podía, no ahora. Pero entonces, una mano en su hombro y un delicioso aroma a tierra mojada y chocolate amargo entremezclado con flores le hicieron mirar.

– Hola. –Saludó amablemente el rubio-. ¿Te encuentras bien?

¿Cómo se hablaba?

– Yo... ehm... supongo.

– ¿Supones? –Rió–. No todos los días alguien se lleva por delante todas las estanterías de mis flores.

– Disculpa por eso. –Se metió el otro Alfa–. Yoongi las pagará.

El nombrado les miró confundido y con el ceño fruncido. Taehyung siseó y le hizo un gesto de que se mantuviera callado y asintiera. Y eso mismo hizo.

– Está hablando con su Omega ahora, está dulce. –Se encogió de hombros–. Lo convenceré de que te pague los daños antes de que deje de hablar con él.

– No os preocupéis, eran flores ya casi secas, prácticamente iba a tirarlas ya. –Le restó importancia, Taehyung asintió sonriendo–. Uhm... ¿de verdad estás bien? No pude venir al instante porque tenía clientes, lo lamento.

– Lo lamento yo, iba despistado cuando Yoongi me empujó.

– No importa, Jungkook, puedes dejar de hablar de eso. Lo principal es saber si tendrás alguna cicatriz o algo, los recipientes son de cerámica dura. –Pero Jungkook se quedó en la primera frase sin ser capaz de procesar lo siguiente.

– ¿Sabes mi nombre? –Preguntó con miedo. El rubio asintió.

– Taehyung pasa muchas más horas de las que crees conmigo en la floristería. Además, yo fui quien le preguntó el nombre del chico tímido que es el único que nunca me saluda. –Sonrió, tomando su mentón y acariciándolo delicadamente–. Creo que lo sabes, pero me llamo Park Jimin.

– Ehm... sí. E-encantado. –Balbuceó ante la caricia.

– Genial. –Sus ojos se desviaron hasta la puerta de su local y frunció sus labios al ver como un par de personas entraban en él–. Me temo que debo ir a atender a los clientes. Nos vemos otro día chicos, a ti igual, Jungkookie.

Alzó su mano en forma de saludo y se despidió de ellos dejando a Jungkook aún peor de lo que estaba. Juraba que en cualquier momento se volvería a desmayar. Entonces cayó en la realidad y puso una mueca triste.

– Oye, basta, deja de pensar en eso. –Le animó Taehyung.

– Es imposible. –Murmuró.

– No es imposible, nada es imposible en el amor. –Añadió Namjoon.

– Y tenemos el mejor ejemplo con Yoongi enamorado.

– ¿Podrías dejar de mencionarme cada dos segundos? –Habló éste dejando el teléfono a un lado-. Llegas a ser irritante.

– Pero... pero nunca podré llegar a nada con él, ni siquiera soy capaz de llamar su atención por sí mismo–. Habló de nuevo el Alfa menor.

– Yo digo que algo le debes de llamar la atención, te ha acariciado íntimamente hace unos minutos.

– Taehyung. –Le llamó–. Es Alfa, soy Alfa. No hay más que pensar.

– ¿Y yo acaso soy Omega, Jungkook? –Preguntó algo enfurecido Namjoon–. ¿Y Seokjin? ¿También es Omega? ¡Ambos somos Alfas y nos la suda lo que diga la sociedad! ¡Pierde el miedo de una vez y pídele a una cita, joder!

Jungkook se sintió sofocado de un momento a otro. Miró hacia el local y vio al rubio despidiendo a los últimos clientes. Inspiró sonoramente y se armó de valor para llegar hasta el Alfa. Jimin le miraba confundido, con el ceño fruncido.

– Hey, chico de las flores. –Le llamó sin titubear–. Ten una cita conmigo.


FIN



Aclaración: en ningún momento ocurre todo lo que ha pasado en la historia, ni siquiera el prólogo. Yoongi empuja a Jungkook como Taehyung cuenta en capítulos anteriores y éste se cae y un recipiente de cerámica de las flores se le cae en la cabeza provocándole un desmayo. A partir de ahí, Jungkook imagina una ensoñación de cómo sería si Jimin fuera Omega y estuvieran juntos, ya que ambos son Alfas y ve eso como un amor imposible. El complejo de que Jimin no pudiera o tuviera poca fertilidad viene de que ambos Alfas no pueden tener hijos y él mismo lo recrea en su mente. Namjoon en ningún momento deja a Seokjin, Taehyung nunca fue Omega y Yoongi y Hoseok seguían saliendo.

Esperen el prólogo y a ver si Jimin acepta la cita.

Aquí van los insultos hacia mi persona :)

Flowers Boy ❀ KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora