Flowers Boy ❀ Kookmin

❀ Capítulo 24

Un bostezo de Seokjin alertó a todos los presentes que seguían entretenidos en mirar algo en los teléfonos móviles. Jimin miró a sus invitados y su mirada se posó en el nuevo chico.

— Planeábamos quedarnos todos aquí en mi casa a dormir, ¿te apuntas?

Soobin no tardó más de dos segundos en asentir. Jungkook miró hacia otro lado y Taehyung le miró.

— Yo lamento arrepentirme a última hora. —Se disculpó Kim—. Pero no me siento cómodo aquí con un chico que no conozco de nada, sin quitar a Jimin que le conozco de hace poco tiempo.

Jungkook asintió y se levantó junto a él ante la mirada confusa del Omega rubio.

— Yo también me voy a ir. —Carraspeó—. Taehyung y yo aún podemos celebrar la fiesta de pijamas que él había planeado.

— ¿Lo dices enserio? —El Alfa asintió, Taehyung brincó emocionado—. ¡Podemos ver películas toda la noche!

— Claro, todo lo que quieras.

El Omega no pudo evitar abrazar a su mejor amigo y éste reír ante lo impulsivo que podía llegar a ser.

— ¿De verdad tú también te vas a ir? —Preguntó el rubio con una expresión de extrañez en su rostro—. Taehyung puede irse y luego comunicarse contigo para saber si ha llegado bien.

— No voy a dejar a mi mejor amigo solo. —Suspiró.

— Pero... íbamos a dormir juntos. —Susurró eso último.

— No sería la primera vez, y creo que dormiría con Taehyung esta vez. —Miró a su amigo—. Creo que siente que algo va mal. No me pidas abandonarlo ahora.

Jimin asintió comprensivo y le abrazó a ambos en forma de despedida.

— Cuídense y abríguense que hace frío ahora mismo en la calle. —Habló Seokjin.

El rubio se mordió los labios y se acercó de nuevo a Jungkook.

— ¿Volverás?

Cuando ese Alfa deje de mirarte como si te quisiera comer, quiso decir, pero se abstuvo a tiempo.

— Tal vez, no sé qué tan importantes son los proyectos de esta semana en la universidad. —Miró a Taehyung—. ¿Vamos?

No esperó contestación del Omega cuando Kim asintió y ambos se dirigieron a la puerta.

Más tarde, ambos amigos estaban mirando una aburrida película para apagar por un rato sus pensamientos. Jungkook pensaba sobre quién demonios era ese chico y de donde había salido. Taehyung... Taehyung estaba perdido en la sensación de los labios de Seokjin y en como su lobo parecía querer salir de su pecho.

— Jungkookie... —Murmuró llamando la atención del Alfa—. Aunque siempre te esté molestando eres mi mejor amigo y te quiero.

— Yo también te quiero, Taehyung.

El mayor se abrazó al torso de su amigo y rió en su hombro.

— Jungkookie me dijo que me quiere.

— ¡Oh, vamos, Taehyung! —Bufó molesto—. No empieces de nuevo o será la última vez que te lo diga.

— Aburrido. —Gruñó, la expresión en el rostro de Jungkook reflejaba enojo—. ¿No quieres hablarlo?

Jungkook negó.

— ¿Seguro?

Tardó algunos segundos en responder, pero cuando lo hizo, explotó.

— ¿Él es mejor que yo, verdad? Él llegó antes a la vida de Jimin y es su prioridad ahora. —Bufó como niño pequeño—. Me dejó de lado toda la noche desde que llegó...

Taehyung suspiró y le abrazó más fuerte.

— Ese Soobin me puede chupar un- —La expresión del Jungkook lo atravesó—. Vale, vale, puede chuparme lo que quiera, pero ¿acaso lo viste? ¡Por favor, tú eres más alto, fuerte, guapo y de seguro más inteligente! ¡Ni siquiera pudo formular él mismo su reto hacia mí, piénsalo! Solo recuerda cómo iba vestido; ropa cara de marca y porte elegante, ¡es muy pijo para una ciudad como esta, en menos de lo que canta un gallo está saliendo corriendo de aquí!

— No me preocupa cuanto tiempo se quede, Taehyung. —su voz sonó dolida—. Me duele que... después de que le pidiera a Jimin ser mi novio bajo nuestra primera nevada juntos, él olvidara de que existiera... incluso no sé cómo me presentó como su novio, llegué a pensar que diría amigo.

— Ahí tienes un punto a favor. —Elevó sus cejas—. O quizás no. Hay dos partes; una en la que Jimin está tan orgulloso de que ahora seas su novio que quiere que todo el mundo sepa, y otra en la que el rubio ha intentado poner celoso a Soobin.

Taehyung se encogió de hombros.

— Pero no pienses en la segunda, centrémonos en la primera y en que ahora mismo puede que Jimin le esté contando miles de maravillas sobre ti a ese chico que ha venido a quitarte lo tuyo. —Chasqueó los dedos—. Me dio hambre, ¿tienes helado?

— En el refrigerador de la cocina. —Taehyung salió prácticamente volando a por él y volvió en pocos segundos con un tarro de vainilla y dos cucharas, ofreciéndole una al Alfa—. ¿De verdad piensas que Jimin estaría orgulloso de mí?

— Ajá. —Relamió sus labios manchados—. Y si él no está ocupado hablando de ti como si fueras el amor de su vida, Seokjin lo hará, confía en él. De seguro nunca le cayó bien Soobin por como habló de él. Tal vez y le mienta un poco sobre lo magnífico que eres y así que te tenga miedo. Es una posibilidad.

Algo se le pasó por la mente en ese momento a Jungkook. Algo que había visto varias veces con sus propios ojos y no lo iba a dejar escapar. Se enderezó en el sofá y apartó el tarro de helado a un lado.

— Hablando de Seokjin... —Taehyung enseguida cambió la expresión de su rostro y se levantó para desaparecer por el pasillo—. ¡Hey, cobarde, vuelve aquí!

— ¡No puedo, hay alienígenas en la ventana esperando por mí!