ALEXER. CORRIGIENDO

XLIX

Martes 25 de septiembre, 2018

Las noticias. Primera vez que veo las noticias, no me gusta verlas porque solo lograban estresarme. Pero esta vez...

—Se encontraron dos muertos en el callejón de la manzana HR. Ambos con heridas de bala, un cuerpo fue encontrado con aproximadamente 8 balas en diferentes partes de su cuerpo a diferencia del otro cuerpo.

¿Escuché bien? Dos muertos, yo solo le disparé a uno.

¡¿Que rayos!?

—Se cree que fue un ajuste de cuentas, puesto a que estos criminales eran integrantes de la banda JGC. Una de las muchas bandas criminales que dejaban sus marcas en sus víctimas; homicidios y violaciones a menores de edad.

—¡No! —tiro el control contra la pantalla del televisor, este se tambalea en su lugar, me levanto y corro hacia él para evitar que tenga contacto con el suelo. —¡Ugh!

Salgo del departamento refunfuñando por no haberlos matado yo misma. Aunque me alegra que ya los hayan matado, se lo merecen por toda la mierda que hicieron.

Me encamino a la salida una vez salgo del ascensor, empiezo a caminar en dirección opuesta al campus, aquí en Ottawa hay tiendas maravillosas y lujosas.

Mi madre solo me permitió un dinero para rentar un vestido, no para comprarlo. Se niega ante las cosas para la graduación, seguro espera a que desista y no lo haré.

Aunque tenga que ponerme un vestido rentado iré de todas formas. Me detengo frente a una tienda de vestidos para muchas ocasiones; bodas, graduación entre otros.

Veo el nombre en letras grandes.

Fly Boutique.

Entro y le pido a la chica de recepción para que me aconseje con un vestido de graduación. Aparte de irme con el, quiero al menos estar hermosa ante todo, quiero disfrutar de esa noche hasta que amanezca y estamos lejos.

Me dejó un par de opciones en el cambiador, salgo con el vestido azul. El primero y único que me gustó entre todos.

—Uff, no sabes cuántas chicas han venido preguntando por los vestidos más elegantes de la tienda. —menciona la castaña con tono de diversión una vez que salgo vestida. Observa el vestido que tengo puesto.

Uno de color azul ceñido a la cintura y suelto en tablones, con pequeños diamantes decorando.

—Sin duda este te hace ver perfecta. —chilla emocionada, se ve de mi edad.

—No quiere lucir perfecta, quiere lucir cómoda. —habla una voz femenina detrás de mí y reconozco de inmediato de quien se trata. La joven y yo nos giramos al instante y vemos en la entrada a Nathalie Hanner.

Mi sonrisa se desvanece al instante. Me bajo del mostrador sin ayuda, me apresuro al cambiador para irme y no tener que escucharla.

—¿No prefieres un vestido de teibolera y unas zapatillas? —me grita a la espalda. —Quedaría bien contigo.

Bufo divertida. —Y aún así Darwin me daría más prioridad que a ti.

Me encamino a los vestidores, me quito el vestido. Me visto con rapidez. Dejo mi cabello suelto de lado y salgo con mis cosas, lista para marcharme.

—Gracias. —me encamino a la salida y siento que me sigue, por el sonido de sus tacones apresurados.

—Ayer no pudiste ver a Alex, adivina por qué. ¡Si! Estuvo conmigo. —empieza a reírse como una loca.