Suspiraste, jugueteando con las cuerdas de tu guitarra emitiendo sonidos aleatorios. Tu teléfono y portátil descansaban sobre la clara colcha de la cama, ambos encendidos. Volviste a dejar la guitarra para probar una vez más a llamar a tu novio, Matt, por Skype. Él te había dicho que estaría disponible la tarde del viernes sobre las siete de la tarde y actualmente eran las diez de la noche. No querías dar por hecho que él te ignoraba a propósito, pero las lágrimas que resbalaban por tus mejillas pensaban lo contrario.
Te limpiaste los mocos, mirando al teclado de la computadora y a su pantalla, las cuáles tenías memorizadas al haberlas estando mirando toda la noche.
¿Por qué no cogía la llamada? Siempre la descolgaba al primer timbre. Un par de mechones de tu flequillo cayeron sobre tu cara, cubriendo las bolsas oscurecidas bajo tus ojos. De repente, tiraste tu guitarra al suelo y golpeaste el ordenador, deslizándolo al final de la cama. Te doblaste sobre ti misma, rompiendo en un intenso llanto mientras tapabas tu cara con las manos.
Lloraste seguidamente durante más o menos un cuarto de hora, hasta que la puerta de tu habitación comenzó a chirriar, ligeramente abriéndose. Gritaste para quién fuera que fuese que se marchara, pero no se escucharon pasos marchándose ni la puerta cerrándose.
Te encogiste de hombros y enterraste tu cara con más ganas en la funda de la almohada blanca. Dw repente alguien alto y pesado se tumbó en tu espalda, envolviendo sus brazos sobre ti. Gritaste al escuchar su voz la cuál se quejaba de lo dura que eras. Intentaste escapar de sus brazos hasta que lo lograste, retirando los pelos de tu rostro, y dejando a la vista tu rubio preferido. Matthew.
-¡Matthew! -Gritaste una vez más lanzándote a su pecho.
-Shh. Hola amor. -Rió mientras te mandaba callar puesto que alguien en casa estaría dormido.
-¡Te he estado llamando durante las últimas tres horas y media, gilipollas! -Chillaste susurrando, empujando su pecho lejos de ti. Aunque fue más rápido que tú, y sus manos envolvieron tus muñecas y volvió a tirar de tu cuerpo al suyo. Te susurró cosas reconfortantes al oído, y renunciaste a la lucha de tu agarre.
-Lo siento, no sabría que te importaría tanto. Quería darte una sorpresa. -Se disculpó Matt. Él había estado dos semanas fuera por Magcon y le habías extrañado demasiado.
-¡Por supuesto que me importa, Matt! Te amo y te he echado muchísimo de menos. Pensé que podrías estar con otra...
-Nunca te cambiaría por nadie, y lo sabes.
-Todos decían lo mismo hasta que lo hicieron. -Contaste por experiencias pasadas.
-De diez, al menos tres serán fieles, no como los demás imbéciles.
-También tienes razón. -Reflexionaste, sintiéndote mal al haber dudado de él.
-Yo también te amo. -Fue todo lo que dijo durante un tiempo.
Te tumbó en la cama acurrucada junto a él, mientras algunas lágrimas más recorrían tus mejillas. Él te abrazaba y besaba tu frente mientras peinaba con una mano tus cabellos. Calmaba diciendo que no tenías que llorar puesto que ya estaba contigo.
Después de unos minutos, buscó tus ojos con los suyos grandes y marrones. Te sonrió y le devolviste la sonrisa sonrojándote.
-Está bien, tenerte aquí es mejor de todos modos. -Dijiste sinceramente.
Y para el resto de la noche, Matt te mimó, con besos, caricias y abrazos. Todo muy dulce. Te encantaba estar así con él. Y por supuesto, a él le encantaba estar así contigo.
(Para: @MattIsLiffe)
P: ¿Qué tipo de música escucháis?
R: Yo de todo un poco, no tengo escrúpulos en el mundo de la música aunque realmente mi estilo preferido es el Indie ^^.
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MAGCON Imaginas
RandomEl fin de estos pequeños Imaginas es hacer que durante un pequeño periodo de tiempo, os olvidéis de todo lo demás y sólo penséis en unos de vuestros chicos preferidos y en las variadas situaciones que se podrían dar con ellos. Quizá alguna se haga r...