Se decidió la partida de Lestia al noroeste.
Fue una decisión arbitraria de Gerard, pero nadie se opuso. Por ahora, sería mucho más seguro quedarse en la provincia que en la capital, donde estaba el príncipe heredero, el principal sospechoso de todos estos males.
Lestia miraba nerviosa a los sirvientes y conductores que estaban ocupados mientras preparaban sus maletas desde temprano en la mañana.
Desde que había nacido, Lestia nunca había dejado la capital.
No hace mucho, todo el mundo que conocía eran las chozas y los callejones de los barrios bajos...
Lestia tenía miedo de que su pequeño mundo se expandiera más rápido y más grande de lo que pensaba.
—Litty, Litty. No pasa nada. Esta vez estaré a tu lado—dijo Mathius con una sonrisa y sostuvo los hombros de Lestia con fuerza, aparentemente consciente de su nerviosismo.
Mathius tenía una mirada emocionada y su cabello color limón claro frente al deslumbrante sol de la mañana, se veía más vibrante hoy.
—Lysian y yo iremos contigo. Joel también irá porque está de vacaciones ahora, así que no te preocupes demasiado.
Lestia pensó un poco y luego preguntó.
—Bueno... entonces... el duque...
—¿Eh? ¿el hermano? Bueno...—Mathius se encogió de hombros como si no lo supiera y cerró los labios en una línea recta.
Lestia pudo notar fácilmente que Mathius no era muy cercano a Gerard.
—Gerard también viene—Lysian, que estaba sentado en la parte de atrás, respondió brevemente.
Después de guardar su espada, Lysian se había saltado el entrenamiento matutino y estuvo visitado a Lestia.
—Sí, Lestia. Si no te sientes de buen humor, ¿por qué no damos un paseo matutino? Hay un pequeño estanque detrás de la villa—Joel se acercó, sonrió suavemente, y acarició el pelo de Lestia de forma amigable.
Mathius, Joel y Lysian cuidaban a Lestia como un pequeño pajarito delicado. Como resultado, Lestia tuvo que estar rodeada por sus tres hermanos desde temprano en la mañana.
—Oh, claro. Había un estanque, ¿verdad? Vamos, vamos. Creo que sería perfecto para dar un paseo corto y desayunar.
Al final, Lestia fue sacada de la habitación por las manos de Mathius y Joel junto Lysian los siguieron.
Sin embargo, tan pronto como Lestia bajó las escaleras, tuvo que hacer contacto visual con unos fríos ojos azules.
—Uh... Duque.
Era Gerard.
A pesar de que era temprano en la mañana, estaba perfectamente vestido sin ningún disturbio. Después de prepararse para Salir, parecía listo para dejar la villa.
Lestia rompió su silencio y lo saludó primero porque no sabía qué hacer.
—Hola, Duque, buenos días.
—......
Sin embargo, Gérard esta vez tampoco aceptó sus saludos, solo miró a Lestia por un momento y volvió su fría mirada hacia el mayordomo Hailock que estaba a su lado y ordenó en voz baja.
—Hailock, encuentra un maestro que le enseñe modales a mi hermana.
—Sí.
Los labios de Lestia parecían secarse ante la instrucción. Pensó que la habían reconocido como una Berchester, pero estaba claro que a los ojos de Gérard, Lestia aún carecía.
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La chica peliblanca que lee libros y tiene hermanos chidos.
Fantasy"Los hermanos peligrosos de la princesa" Lestia, quién creció en un barrio pobre y un tío borracho, apenas tenía para comer al vender sus flores. Una noche, cuando su tío fue chantajeado por unos matones a causa de una deuda, él trató de vender a Le...