La chica peliblanca que lee libros y tiene hermanos chidos.

Capítulo 108

#Preparense #Shokeada xd

Los brillantes ojos dorados y los grises que perseguían su luz dorada se enfrentaron claramente.

Lestia miró fijamente el oro transparente ubicado bajo sus oscuras cejas. Estaba frente a ella, siendo tan noble, hermoso, cálido y peligroso, la persona que nunca creyó poder tener.

De repente, estaba convencida de que siempre lo había codiciado desde la primera vez que lo conoció. Por eso abandonó la cabaña en donde vivía con su tío, y ahora estaba frente a Lysian de esta manera.

—.......

Los ojos de Lysian temblaron ligeramente al no escuchar una respuesta de Lestia.

—¿Por qué no me respondes? Me está dando miedo.

Ante su insistencia, Lestia finalmente abrió la boca.

—Lysian. Yo... nunca he pensado en querer tener algo. Aunque mis hermanos me dieran regalos caros y dinero de bolsillo, me sentía incómoda.

Como un viejo recuerdo, las comisuras de la boca de Lysian se curvaron.

—Sí, siempre lo has hecho.

—Sí, pero ahora que lo veo, lo único que he querido siempre ha sido Lysian.

—¿Qué?

—He estado rondando a tu alrededor porque quería quedarme a tu lado. Siempre he tenido miedo de que Lysian se fuera. Así que..., si el matrimonio es la forma perfecta en la que pueda estar contigo, me encantaría.

Fue una respuesta tímida, pero con determinación.

¿Sabía la influencia que ejercía sobre el hombre que tenía delante?

—Lestia.

Temiendo que las palabras de Lestia terminaran, Lysian tomó a Lestia por la cintura y la atrajo hacia sus brazos como si no pudiera soportarlo más.

Lestia se vio obligada a enterrar su rostro en el duro pecho de Lysian.

—¡Ly, Lysian!

De repente, pensó que la camisa blanca que llevaba Lysian sobre su cuerpo era demasiado fina.

Estaba transmitiendo la cálida temperatura corporal de Lysian, y los latidos del corazón de Lestia se filtraban.

Ante la brusca conmoción, Lestia se sorprendió y se puso de pie. Sn embargo, Lysian no la soltó.

—Yo...necesito un poco de aire.

Lestia consiguió sacar la cabeza y mirarlo.

Lysian cerró los ojos y enterró su rostro en el cuello de Lestia.

—¿De verdad, de verdad te vas a casar conmigo? ¿Es eso cierto?

Sus manos temblaron ligeramente, abrazando a Lestia con fuerza. Era desgarrador, así que Lestia volvió a responder.

—Sí, me voy a casar. Nosotros...

Sin embargo, Lysian volvió a preguntar con tristeza, una y otra vez, como si no pudiera creerlo.

—¿De verdad? ¿incluso si tu familia no lo permite? ¿Vas a hacer eso?

—¿Eh?

—...Maldita sea. Siento haberte preguntado eso. Tengo miedo porque no puedo creerlo... porque eres buena y quieres a tu familia... Temo que seguiré las palabras de los hermanos de Berchester. —su voz se hizo cada vez más pequeña.

Era la mirada más débil que había visto en Lysian.

—Lysian...—Lestia estiró los brazos y abrazó con fuerza los hombro de Lysian.