La chica peliblanca que lee libros y tiene hermanos chidos.

Capítulo 109

—¿Estás despierta?

En cuanto Lestia abrió los ojos, se enfrentó a un hombre que la miraba fijamente con una expresión que goteaba miel.

—Lysian...— Nim, estuvo a punto de llamarlo con honoríficos de nuevo, pero rápidamente cerró los labios. Lestia no sabía durante cuánto tiempo Lysian la acosó durante la noche para que olvidase esa palabra con la cual siempre lo había llamado de manera natural.

Lysian sonrió cuando se dio cuenta de que Lestia cerraba la boca. Luego, levantó un mechón del cabello de Lestia y los llevó a sus labios.

Un dulce aroma.

El suave cabello que había sentido durante toda la noche era demasiado dulce, como la primera vez. No quería dar un paso fuera de la cama.

—Puedes dormir un poco más.

Dejó salir esas palabras de tentación, pero Lestia levantó la parte superior de su cuerpo con una postura recta.

—No, creo que he dormido demasiado.

—¿Eh? El título con el cual me llamas ha cambiado, pero los honoríficos no han cambiado.

—......Por favor, esto aun es incómodo.

—Está bien, vamos a practicarlo por separado.

Además, ya la había acosado lo suficiente, así que Lysian levantó las comisuras de su boca.

El rostro de Lestia se puso inmediatamente rojo. Entonces le preguntó a Lysian como si se hubiera dado cuenta de algo que había olvidado.

—¿Cómo está tu cuerpo?

Originalmente, el propósito de permanecer en su habitación era para comprobar si la piedra neutralizadora de mana respondía bien hacia Lysian, pero ni siquiera le dio la oportunidad de comprobarlo en toda la noche.

Era sospechosamente grande la resistencia que demostró, que incluso dudó sobre el hecho de que se había desmayado por exceso de trabajo.

Así que Lestia miró a Lysian con una mirada sospechosa, pero él dejó caer sus labios sobre los hombros redondos de Lestia para ver si cambiaba su expresión.

—Gracias a ti, estoy muy bien. ¿cómo te sientes? estás cansada, ¿verdad? siento haberte molestado tanto.

Ya lo sabía. Sin embargo, no tenía nada que decir cuando él se disculpó primero con una expresión tan triste.

Lestia contestó mientras apretaba las sábanas entre sus brazos.

—Estoy bien.

En realidad, no estaba tan bien. Se sentía somnolienta y adormecida porque su cuerpo estaba relajado. Sin embargo, no era lo suficientemente doloroso o enfermizo como para hacerlo evidente.

Esto se debió a que Lysian fue muy considerado con Lestia anoche. Fue una noche tremendamente feliz en la que ambos se amaron por completo.

—Bueno, ¿comemos primero? creo que tendrás hambre—sugirió Lysian, pasando el cabello de Lestia, que parecía una nube, por detrás de su oreja.

—Oh, primero quiero lavarme.

—Bien, lo prepararé de inmediato.

Lysian inmediatamente ordenó que prepararan agua para el baño. Y en un susurro le propuso a Lestia que se bañaran juntos, pero la oferta no fue aceptada porque ella se negó rotundamente.

Lysian parecía estar decepcionado.

—Bueno, tomémoslo con calma—respondió Lestia, como si estuviera haciendo una promesa para el futuro.