tres México?

51

El cielo se tronaban cada vez más, parecía el anuncio de una poderosa tormenta o el inicio de un diluvio.

Tenían que buscar salida al ejército de Seth para poder ayudar a Austria.
Pero también algo le decía que no era una excelente idea pararse cerca de esos dos.

Reich estaba preocupado por Alemania qué recién había dejado de gritar.

La energía de alrededor de esos dos era cada vez más sofocante.

Argentina se acercó a Alemania.
- déjame ver - le pidió.
Alemánia levantó el cacho de tela que le cubría el ojo.
- boludo me dejas... - le pregunto a Chile quien asintió demacíado serio.

- dass?! (qué?!) - fue lo único que pudo pronunciar Alemania pues argentina le había besado.

Pero no un beso cualquiera, un beso invasivo en más de un sentido. Le sujeto de la cara poniendo sus dedos muy al filo de la herida en su ojo.
Le besaba desesperado asta que de su boca se podía ver un destello bastante fuerte de luz.

Sin romper el besó, tomo a Alemania aún más fuerte y le mordió el labio haciendo le sangrar.
Con su lengua brillante y envuelta en la sangre de el mismo. Le pasó su lengua por todo lo que se veía contaminando.
Su saliva brillaba como la luz del sol y al combinar la sangre de Alemania parecía que se había pintado un hermoso rayó del atardecer en el ojo.

Terminado esto argentina soltó a Alemania y se fue con su hermano Chile. Quién lo veía triste.

- ya estará mejor boludo - le dió una palmada en su hombro.

- sí - dijo en un susurró el chileno.
- gracias po - le agradeció a su hermano.

A Reich siempre le sorprendieron los latinos. Y cada vez más sus cualidades ante una adversidad es increíble verlos.

Chile se mantenía realmente apartado de Alemania y Reich.
Con la cabeza en alto pero con cierto dolor en su mirada, argentina le acompañaba y cuidaba de su espalda como gran confidente que llegaban a ser pero aún así él parecía ido.

Reinó Unido busco escabullirse para estar espalda a espalda del argentino.
- what was that supposed to be?
(que se supone que fue eso ?) - pregunto desconcertado aún

- un beso? - respondió de mala forma el argentino

- and do you usually shine when you kiss?
(y sueles brillar cuando besas?) - realmente esa duda le carcome pensar que solo con Alemania pudiera pasar eso.

- suelo brillar cuando estoy curando! Vejete de mierda - soltó irritado el argentino.

Chile por fin soltó una pequeña carcajada, se le había olvidado por un momento ese detalle, cuántas veces le curó a él, y aún así su mente le jugaba una mala trastada pensando en algún tipo de romance entre el alemán y el argentino.

^^^ Arge sería de todo menos un cachudo ^^^ pensó con medía sonrisa, ^^^ aparte si quisiera algo de sexo lo pediría no es de quién baja los novios ^^^ se sintió muy decepcionado de si mismo ante esos pensamientos.
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Imperio tenía él arma, los motivos y el momento perfecto. Pero aún así no parecía tener lo suficiente para que su situación se inclinará a su favor.

Poco a poco las fuerzas disminuían y desde que había aparecido frente a el azteca los rayos impedían que él número del ejercicio de Seth se incrementará.

- eh de reconocer que si no hubieras interrumpido el balance, yo no hubiera tenido está oportunidad... Los dioses en ese entonces prometieron darme una revancha no en ese momento ni en esa vida... Por fin les entiendo! - decía emocionado el de sangre Azteca - me había sentido estafado... En el olvidó... Arrumbado - los golpes cada vez más eran más fuertes, sus ojos se tornaron como los de un jaguar casando a su presa.

- pero agradezco a mis dioses, por darme está magnifica batalla, una que fue suspendida el día que pisaste mi tierra - sus dientes afilados cuál reptil.
Tiro con sus dedos jalando la cara del imperio atravez de la espalda.

- no puedes tener esa fuerza! - renegaba al aire Imperio español mientras ambas espadas salían volando.

Golpe tras golpe como si fuera un sacó de boxeo le tenía azteca a imperio, con una amplia sonrisa y un jugueteo sugerente con su lengua. Asta cierto punto se veía excitado, y no era nada alejado de la realidad.
La sangre brotaba de la cara y boca de imperio manchando a su pasó.
- me siento más que vivo!! - exclamó con euforia.

Molido a golpe de mano limpia imperio buscaba escabullirse, tomo una piedra del caminó.
Cuando se acercó imperio lo suficiente le golpeó en la cabeza, pero este solo ladeó su rostro, sangrando sus ojos se tornaron un más eléctricos y afilados. Sus sonrisa aumentó de tamaño dejándole ver de una forma espeluznante y sádica.

- que pasa? Tienes miedo?... Acaso se te acabaron los trucos? - pregunto con voz de ultratumba.
- nunca aceptaste tu hora imperio, ni la segunda oportunidad que se te dió. Ahora tu séquito se retira por tu ineptitud - se izó aun lado dejando ver  la retirada de las sombras.
- sigues siendo un débil, cobarde tal cual -

- puede que esté derrotado... - pronunció débil imperio Español

- puede? - enmarcó una ceja socarrón, con ironía en su voz. Se incorporó viéndole como se retorcía en el suelo.

- pero no me iré sólo! - pronunció y en un parpadear de ojos se le había colado por los pies. Primero tomo a España jalando le del cuello e incrustando uno de los dardos en él.

Pero su objetivo no era España si no México quien terminó en el suelo con una daga queriéndose incrustar en su torso.
Imperio sangrando del pecho con una daga de oro atravesando lo.

España y los demás estaban asustados.
Parecía que el tiempo se había detenido las gotas de lluvia ya no caían se oía el respirar de los demás pero nada cambiaba, nadie movía ni un músculo.
Asta que el cielo se empezaba a despejar.

México estaba tumbado en el suelo sosteniendo los brazos de imperio, azteca apuñalaba a imperio por la espalda perforando el el pecho pero también imperio en una extensión de él le había atravesado medio pecho a Azteca.

- te veré en el infierno infeliz de mierda - exclamó Imperio para disiparse en el aire.

Dejando a un Australia caer en los brazos de México.
Azteca calló rendido ante el suelo, con un agujero en el pecho.
España fue el primero en correr, al llegar abrazo tan fuerte a azteca que sin evitarlo lloro en frente de todos.

Rusia fue a ver cómo estaba México, quien al parecer aún no se encontraba del todo aterrizado.

Reino Unido preocupado quería acercarse y al mismo tiempo no, no quería enfrentar la posibilidad de que su hijo estuviera muerto. Argentina lo noto y lo tomo con delicadeza de la mano, agarrándolo firmé en señal de apoyo. Se ruborizó pero se sintió realmente aliviado con argentina a su lado.

Brazil miraba todo realmente incrédulo, de un momento a otro las sombras los truenos y la obscuridad del cielo se vieron esfumado como si nunca hubieran pasado.
Pero algo si pasaba y era que todos estaban contentos de terminar ese infierno. Uruguay le abrazaba y sin notarlo por la emoción le besó en los labios. El country verde se sorprendió pero correspondió el beso.

Realmente no era el único, Rusia y México se estaban besando, así como España y Azteca o como Chile y Alemania. También alguien quien no pensaban Siria y Venezuela.

México rompió el beso y fijo su vista a Azteca, quien inmediatamente lo miro estirándose para invitarlo a abrazarle.

México como niño pequeño corrió a los brazos de su madre con lágrimas en los ojos.

- mi pequeño! - decía azteca mientras le abrazaba con fuerza. - pero que desnutrido estás! - le regañó.

México soltó una sonrisa tonta y la apretó más fuerte a los que se sumaron Mex quien recuperaba a poco la conciencia y Mexí.

- está bien?... Explique me por qué tengo tres bebés? - se preguntaba emocionado mientras abrazaba a los tres mexicanos.