41

25 3 0
                                    

Mientras ambos dioses pelaban si merecía regresar o no Austria oía vagamente una voz que le llamaba.

Calmó su llanto, para poder reconocer al propietario de dicha voz.
Levantándose de su lugar busco un lugar para oír mejor. Pero en todos lados se podía oír de la misma forma o más lejos.

Miró a los dioses que seguían en su pelea, quiso preguntarles pero no le harían caso en los más mínimo así que se alejó un poco de ellos notando que aumentaba un poco el volumen de lo que oía.

Con formé se alejaba del lugar podía recuperar un audio más nítido que el anterior, ahora podría jurará que le reprochaba por el tono que usaban pero aún era algo distorsionado.

Cruzo las montañas buscando entender el audio, una larga caminata fue dada asta llegar al río de perros, en ese momento podría jurar que era alguno de sus queridos mexicanos, también reconocía la voz de Yucatán, Oaxaca, asta Sonora, Sinaloa, Estado de México y ciudad de México.

Cada palabra cada sonido que provenía de alguno de ellos iluminaba el ríos, como pequeños faros que tocaba la superficie de agua.

^^^ y si intento cruzar ^^^ ésa idea se planteo en su cabeza.
Puso un pié sobre del agua y lo bajó poco a poco asta que parecía no romper la tención de la superficie del agua.
Confiado dejó caer su peso en un pasó cayendo por completo en el agua. Era más espesa que el agua normal necesitaba mucha fuerza para mantenerte a flote.

Un perro paso cerca de el, llevando a una persona al lomo pero no le izó casó alguno. Estaba perdiendo toda esperanza de poder regresar cuando otro perro que se dirigía al lado contrario que le ayudo, no solo a no ahogarse si no a cruzar de nuevo al umbral.

Estaba a pocos sentimientos del un umbral de agua, pero en ese lugar fue dónde pudo entender los sonidos del otro lado. Estaban llorando, llorando su perdida, Yucatán; Oaxaca y Mex se les oía en completo desconsuelo, tal parece eran ellos los que por querían dejarlo ir.

Tocó el umbral, pero este no le dejó pasar, se volvía una burbuja que se estiraba aunque caminaba pero no podía trasladarla.

Gritó de desesperación, lloraba haciendo una rabieta pegando al suelo, quería regresar a lado de sus seres queridos.
^^^Por qué no podía?^^^ se cuestionó más se una vez en su cabeza ^^^acaso hice algo malo para no merecer una segunda oportunidad?^^^
Terminó poniéndose en posición fetal abrazando su piernas.

- no puedes pasar por tu propia cuenta - le dijeron con molestía a lado del umbral.

Sin mucho interés volteó a ver quién le hablaba, era una persona con rasgos muy femeninos pero con una cuerpo bien trabajado.
Austria no dijo nada sólo volvió a guardar su cabeza en tres sus brazos.

- que dejaste atrás que tanto vale la pena regresar? - cuestionó este ser.

- un hijo que no conocí, una familia que había recuperado y grandes amigos de los cuales no pude despedirme - le contesto sin levantar la cabeza - y no pude aclarar le a la persona que amó, que ese niño era de él, para que por lo menos cuidará de él en mi ausencia... Ni siquiera conocí la cara de mi bebé - la voz se le quebraba conforme hablaba.

- suena algo importante - le comento ese ser - donde está tu bandera? - le pregunto.

- mi bandera? - estaba asombrado, solo un country puede reconocer a otro country, si no los ven como simples humanos - como sabes de mi bandera? - levantó la mirada y viéndole más de cerca se percató que era otro country pero no era ninguno conocido - tu eres el que no tienes bandera - afirmó el austriaco.

- tu tampoco la tienes, pero al menos yo tengo lo que me caracteriza de mi tierra y tú estás blanco... Acaso... Fuiste invadido y conquistado? - pregunto

tres México?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora