CAPÍTULO XX-IV

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Jungkook suspira.

Hace dos horas luego del almuerzo, recibió un mensaje de su mayor pidiéndole que midiera el vidrio del escritorio de su oficina. Ahora, espera quizás incómodo al alfa fuera de la vidriera.

Tras percibir un olor familiar, gira con dirección al proveniente, no pudiendo evitar sonreír al ver a Taehyung correr hacia él con su típica camiseta blanca Celine y unos jeans olgados, resaltando en especial su cabello alborotado.

—Llegas tarde— le regaña cruzando los brazos al tener a un agitado Taehyung frente a él.

—Perdón Kook, Hoseok me dejó hace tres cuadras ¿Esperaste mucho?

El omega negó con la cabeza.

—Llegué hace unos minutos.

El alfa asiente con una sonrisa detrás de su barbijo blanco. Mira ligeramente hacia abajo, Jungkook era casi de su altura, pero a lo lejos es como si fuese más bajo que él.

—¿Por qué no esperaste adentro?

El omega desvía la mirada hacia la vidriería.

—El vendedor es un alfa.

Oh

Taehyung mira a la misma dirección, y sí, el vendedor era un alfa. La pesadilla de Jungkook.

Regresa con el omega, quien mordía su labio inferior y cabizbajo por puro instinto, Taehyung lo mira fijo pensando alguna idea para disminuir su temor.

—¿Qué tal si hacemos algo?— atrae la atención del omega, quien levanta la cabeza y ladea confundido— Solo si tú deseas, no voy a obligarte.

Y Jungkook asiente intrigado.

—Te impregnaré con mi olor, así podrás estar seguro que él no te hará nada ¿Aceptas?

Quizás no tuvo que decirlo tan directo, porque vió como su menor frunció las cejas.

Jungkook debatía consigo mismo, algo incómodo tal vez. No puede refutar, Taehyung tenía razón, podía impregnarse de su olor y entrar sin preocuparse de que ese alfa lo "ataque", pero a la vez sería raro oler a un alfa sin tener alguna marca o tener alguna relación.

—Me verían raro— murmura con la vista a la puerta del establecimiento, Taehyung ladea la cabeza— Oler a alfa sin tener alguna relación de por medio es raro.

—Nosotros si tenemos una relación.

Logra captar aquellos lindos ojos hacia él, con cierto desconcierto.

—Ah es cierto, somos amigos.

Y Taehyung casi quería golpearse la frente con una pared por la respuesta.

Asiente ante el omega con una sonrisa bonita, y abre los brazos a su dirección. Jungkook lo mira sin ningún gesto en su rostro, esperando alguna indicación.

—Ven— lo llama, sin decir nada se acerca.

De inmediato es recibido por un abrazo, aferrándose con las manos en la espalda ajena. Por instinto, olfatea el cuello del alfa sorbiendo toda esa menta fresca. Y Taehyung no quedando atrás, también olfateando el cuello del omega a través del barbijo, percibiendo poco ese dulce vainilla, logrando erizarle la piel tras frotar su nariz en él.

Jungkook con pesadez se apartó, y podía decirse que Taehyung también, soltando un profundo suspiro. Mira al alfa sonreírle -aunque solo puede ver sus ojos achicarse- y de la nada siente el tacto ajeno sobre su mano, sujetándole fuerte sin dejar de sonreír.

Siente su lobo inquieto, su corazón latia mil por minuto, y si Taehyung no apartaba la vista de él, estaba seguro que iba a salir corriendo.

Sus ojos cayeron en su mano sujeta con la del alfa, pero especialmente miraba la de él. Era grande, con dedos largos, piel tersa y uñas bonitas.

DEBITUS UT OMEGA | KTH&JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora