DEBITUS UT OMEGA | KTH&JJK

CAPÍTULO XL-I

No puede moverse.

Abre los ojos de apoco tras sentir la luz de la mañana chocar contra su rostro. Podría decirse que Jeon Jungkook ha dormido extremadamente bien, y eso no es una atenuación, porque de hecho lo fue.

El agarre en su cintura es la causa. Baja la cabeza, encontrando los brazos del alfa aferrado a él, como si tuviera miedo de dejarlo ir.

No, definitivamente no se iría. Está en su hogar, simplemente no puede.

Un cosquilleo le provoca encogerse, el aliento del alfa contra su oreja lo obliga a darse la vuelta y encontrar su bonito rostro dormido.

Las cejas pobladas y el adorable lunar de su nariz es la principal atracción, y sus labios, joder, son delgados pero muy lindos y...

Besables

Jungkook quiere tocarlo. Las manos le pican por las ganas de pasar sus dedos por aquellos finos labios.

¿Por qué no? Nada le impide. Solo quiere sentir de alguna manera la suave piel que anoche acunó sobre su boca y le robó hasta el último aliento.

Por Dios. Anoche fue...

No lo duda, lleva una mano a los labios del alfa, y acaricia suavemente: el inferior, el superior, y toda la comisura. Y rayos, casi chilla del susto cuando su mano fue detenida por la del otro.

—¿Tan temprano y ya extrañas mis labios?

Diosa Luna

A Jungkook casi se le olvida cómo respirar cuando escuchó la voz de Taehyung más ronca de lo normal cuando despierta, es más, fueron pocas veces escucharlo, porque desde que comenzó sus clases despierta antes y lo deja dormir.

Kim Taehyung y su pésimo hábito de despertar tarde.

—Algo así— responde con una pequeña sonrisa en sus labios, mientras Taehyung lo mira con cariño, acariciándole el dorso de la mano con su pulgar.

—¿Dormiste bien? ¿Alguna molestia? ¿Te sentiste incómodo? O-

—Dormí bien, bastante bien. Solo-— se adelanta al escuchar su tono preocupado—. Siento un poco de dolor— murmura bajito, desviando la mirada.

Taehyung le mira encogerse sobre su pecho. Sabe que Jungkook aún está procesando lo de la noche anterior. Es una nueva experiencia en su vida, o más bien, es una nueva experiencia para ambos, acaban de dar el siguiente paso.

Oh

El omega se endereza, chilla bajito al sentir dolor en su cadera, retrayendo las piernas como si aquello lo calmara. Pensó que no dolería, porque ¿No es obvio? Es un omega. Su cuerpo está adecuado para un alfa, y él en especial para Taehyung.

Dios...

Siente al alfa enderezarse a su lado y su mirada sobre él. Como si le leyera la mente la mano ajena se posa sobre su espalda baja, comenzando a masajear.

Dios, como por arte de magia el dolor disminuyó, se siente mejor. Aún recuerda aquella vez cuando lo encontró vomitando en el baño y le dio un masaje en la espalda por el dolor del esfuerzo.

Taehyung no solo tiene manos bonitas, sino que son una maravilla tocándolo.

En todos los aspectos...

—¿Mejor?— él le pregunta, a lo que asiente complacido, recostándose sobre su hombro desnudo—. Abajo hay analgésicos, toma uno ¿Vale? Debe ser fastidioso.

—Un poco, pero estoy bien, Hyung. Tus manos son mejores que cualquier otro analgésico.

Taehyung lo mira con una ceja alzada y una sonrisa de lado.