CAPÍTULO XXX-IX

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—Jungkook ¿Llevas todo?

—Si, Hyung...

El alfa inclina la cabeza tras escuchar aquel tono desanimado. Jungkook está apunto de iniciar su primer día de clases en una nueva universidad y el temor de que lo discriminen esta torturándolo. Solo espera que todo esté bien.

—Hey— lo llama despacio, observa con devoción la carita del omega. Se veía realmente guapo. Días antes fueron a una peluquería, y ahora Jungkook trae el cabello largo, un poco más oscuro y con ondas—. Estarás seguro, Hyunjin-ah será tu sombra. No te despegues de él, solo haz eso.

La inseguridad ronda en Jungkook, es un nuevo lugar y tiene una nueva oportunidad. Se siente desencajado.

Es normal

Apreta los puños en los cintos de su nueva mochila, y mordisquea sus labios ansiosos ante la espera del beta.

—No apagues el GPS, debo rastrearte— informa el mayor envolviéndolo en un abrazo, impregnando su olor.

Cuando Jungkook le comentó que aquel alfa se llevó su celular, no dudó ni un segundo en comprarle uno. Y felizmente pudieron bloquear el número anterior y transferir los archivos de ese dispositivo al nuevo. Jungkook puede estar tranquilo al mantener todas sus fotos y recuerdos con Jimin, Jihyo, de Yeontan y el vídeo de Taehyung bailando.

Se negaba a perderlos...

Mira hacia a la puerta, esta se abre dejando a la vista los dos betas quienes reverencian con una sonrisa en sus rostros, más Jungkook inclina levemente la cabeza sin quitar la atención en ellos, pues estaban vestidos igual, aunque Hyunjin no llevaba el pin de un escudo dorado en su pecho.

—Esperamos no haberlos interrumpido en algo— pronuncia el menor de todos, observando como Taehyung seguía abrazando al omega, y enseguida se apartan despacio a lo que niegan.

—Solo interrúmpelos, ellos tienen mucho tiempo para ello.

—Lo dices porque estás solo, Hyung— refuta Taehyung.

—Oh... Kim Taehyung quiere ver a su querida amiga la pistola eléctrica. Ella está gustosa de verte— el mencionado atina divertido llevando hacia atras la tela de su saco y muestra el arma en su cinturón.

—No, gracias.

—Bien— dice simplemente, sube la manga de su saco y mira el reloj en su muñeca—. Ustedes dos vayan adelantándose, en media hora empieza tus clases y debes buscar tu facultad.

Jungkook asiente, vuelve a Taehyung y le da un pequeño beso en la mejilla, y sonríe cuando ve aquellas cejas pobladas ser fruncidas.

—Nos vemos más tarde, Tae— menciona alejándose hasta la puerta mientras se coloca unas zapatillas.

—Nos vemos más tarde, Kook— le responde viendo como Hyunjin cierra la puerta luego de Jungkook.

Taehyung suspira. Desde el despertar lo único que ha podido rondar por su cabeza es el bienestar de su omega. Jungkook se ha recuperado exitosamente, hasta aumentó de masa corporal gracias a que su lado dominante fue balanceándose y no le ocasionó más malestares. Y no hay que dejar de lado que Taehyung es un factor primordial en esto, al ser su pareja destinada sus feromonas fueron un componente esencial.

Vaya

Camina hacia el segundo piso seguido de Hoseok, y entran a su oficina. Taehyung toma asiento detrás del escritorio mientras el otro en la silla delante de este. 

Hay algo raro. Jung Hoseok sabe perfectamente que hay algo invadiendo la tranquilidad del alfa, solo hace falta ver sus gestos y movimientos para deducir. Quizás esté preocupado por cierto omega, o estresado por la preparación del aniversario de bodas de sus padres. Pero, sobre todo, es por aquel alfa acosador.

DEBITUS UT OMEGA | KTH&JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora