DEBITUS UT OMEGA | KTH&JJK

CAPÍTULO X-III

—Hoseok deja de fastidiarme.

—Ash, ya cállate.

El pelinegro baja de la limusina al pie de las escaleras de la entrada de la Casa Real, Hoseok detrás de la puerta rueda sus ojos cansado del incumplimiento de las reglas impuestas al alfa en cuestion al codigo de vestimenta. 

Taehyung remeda la cara del beta recibiendo un leve golpe en el hombro, haciendo que quejara.

Sube los escalones mirando a sus costados confundido por la ausencia de jardineros. Antes de abrir las enormes puertas suspira por la "esperada" reunión.

Detesta esto.

No quiere tener aquella cita, pero se ve obligado a tragar sus quejas solo por complacer a la Reina Madre.

Abre dejando ver la enorme araña de cristal en el techo, frente a él unos grandes jarrones con jasmines que supone fueron recogidos del invernadero real, y el piso tan pulido que hasta el mismo reflejo se podía apreciar.

Entra mirando su alrededor en busca de sus padres o de algún sirviente que le guíe, pero nada. Él mismo camina buscando a los reyes y al objetivo que era la princesa Jennie.

—¿Hola? —pregunta recibiendo su mismo eco como respuesta— ¿Papás?

Camina con dirección al comedor principal. Al llegar asoma su cabeza en la entrada, pero nada. No había nadie.

—Si así iba a ser, mejor me hubiese quedado en casa— pasa una mano por su cabello, peinándolo hacia atrás—. Con Jungkook...— sonríe ante la mención.

—Veo que está perdido, Su Alteza.

Taehyung gira al escuchar aquella voz. Busca con la mirada la dueña, y al fin, ahí estaba detrás de él.

Kim Jennie, una omega dominante de clase alta, deslumbrantemente bella, con una mirada seductora, y unos mejillas pomposas muy adorales.

Podría decirse que era un masita de persona, pero su lado atrevido quedó a la vista al presentarse con un conjunto celeste marca Channel. Aquello dejaba en claro lo dispuesta y contradictoria de estereotipos al decir que las omegas y las alfas debían utilizar conjuntos femeninos.

A la mierda los estereotipos.

Aquel terno y pantalones celestes, eran el claro ejemplo que la ropa no tiene género.

Y Jennie remarcaba aquello.

—Princesa Jennie.

Taehyung se acerca a la fémina e inclina ante ella tomando su mano besando el dorso de esta en un saludo cordial, pero se ve interrumpido al percibir su aroma.

Fresas.

¿Por qué se le hace familiar? ¿Donde lo ha olido antes?

La princesa aparta su mano al ver el cejo fruncido del alfa, pero solo sonríe para no verse nerviosa.

—Es un honor vuestra presencia, gracias por aceptar este encuentro— dice el pelinegro sonriendo de labios, debía mostrarse respetuoso ya que es uno de las reglas de etiqueta el sonreír, pero muchas veces le valía.

—El honor es vuestro, príncipe.—sonrió de regreso, viéndose coqueta al juguetear con su cabello oscuro.

—Vaya, ahí están.

Ambos jóvenes voltean al ver al Rey Omega caminar hacia ellos, deslumbrando alegría con la gran sonrisa en su rostro.

Taehyung abraza a su padre devolviendole el gesto, mientras que la fémina reverencia. SeokJin le devuelve el saludo.