CAPÍTULO XXX-VIII

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Taehyung corre por los pasillos de la clínica.

En plena madrugada recibió una llamada, avisándole que encontraron a Jungkook desmayado en el baño por una hemorragia, no le dieron ninguna explicación, solo ordenaron su presencia tras ser su alfa a cargo.

No le importó como estaba, en pijama se atrevió a llegar al lugar con el único pensamiento en su cabeza, el que su omega esté bien.

Abre bruscamente la puerta de la nueva habitación, encontrando al omega en el borde de la cama soltando pequeños gimoteos y temblando, con la misma enfermera omega que lo atendió al principio y al lado de ella el doctor Donghae.

Jungkook alza la cabeza hacia la puerta, y los ojos se le aguan nuevamente. El corazón de Taehyung se estrujó al verlo pálido, con ojeras, y tan sensible. No lo pensó, corrió hacia él, envolviéndolo al instante en un abrazo, y acunarlo contra su pecho.

Dios. Se siente tan culpable, no debíó irse. Esta tan arrepentido. Dejó solo a su omega fiado con la seguridad de la clínica, y ahora maldice a diestra y siniestra la maldita seguridad.

—Shh... Aquí estoy, amor, aquí estoy— intenta calmarlo, aunque es inútil porque Jungkook lloraba sin intención de parar, y no le quedó opción que soltar sus feromonas. Mira apenas a los mayores frente a él, quienes se muestran angustiados por el omega—. ¿Qué pasó?— les exige con voz firme, sobresaltándolos levemente, y DongHae señala hacia la puerta, indicándole salir.

Se aparta un poquito del otro, dándole un tierno beso en la frente, pero el omega niega soltarlo, no quiere dejarlo ir. Tiene miedo, está abrumado. Taehyung no sabe qué pasó, y teme sugestionar ideas que puedan ser incorrectas.

—Solo serán unos segundos, amor, solo segundos ¿Vale?— le dice suavemente, Jungkook no dice nada, solo se aparta despacio y mira sus dedos juguetear sobre su regazo.

El alfa se levanta y sigue detrás al doctor Donghae hasta el pasillo principal. Cruza los brazos y se mantiene en posición dominante sin inmutarse a nada. Esta furioso y alarmado. Dejó a su omega en sus manos y aquí el resultado.

—¿Qué mierda sucedió?

—Su Majestad, por favor... no hable de esa forma.

—¿Cómo quiere que hable? Me llaman a las dos de la madrugada ¿Y qué me encuentro? A mi omega en lágrimas. Explíqueme de una vez que carajos pasó— masculla intentando intimidar al hombre, este se encoge en su sitio y aspira.

—Lo... encontramos en una escena horrible. Estaba en la esquina de la ducha, mojado y desangrándose tras arrancarse la vía. Derramó mucha sangre, Majestad, como medio litro— explica nervioso, y se encoge más cuando el dorado de los ojos ajenos no tardaron en aparecer.

—¿Por qué...? ¿Por qué hizo eso?

—No lo sabemos, no nos dirigió la palabra, solo mencionó "Él". No dio detalles.

Taehyung abre los ojos.

¿Él? ¿Quién mierda es "él"? No se referirá a...

Oh no.

—V, es muy probable que él padezca de anemia, necesitamos chequearlo y-

—No dejaré ni un segundo más a Jungkook aquí. Exijo el alta— espeta sin remordimiento.

—Pero Majestad, necesitamos mantenerlo bajo revisión, él es un omega ra-

—Jungkook no es su maldita rata de laboratorio— masculla amargo—. No le harán pruebas ni nada. No se lo estoy pidiendo, se lo estoy ordenando. Me llevo a mi omega a casa.

DEBITUS UT OMEGA | KTH&JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora