CAPÍTULO LX-II

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Deja de llorar. Eres molesto— dice el niño sujetando una piedra embarrada de sangre—. ¡Ya deja de llorar! ¡Cállate!

—L-La... la mataste... ¡La mataste! ¡¿Por qué?! ¡Eres malo, Jae Hyung, eres malo!

—Es para tí. Es mi símbolo de cortejo. ¡Debe gustarte!

—N-No me gusta... no... No me gusta. Es horrible...

¿En qué momento a Jungkook se le ocurrió seguir a YoungJae al pequeño granero de la Casa Kim?

No, más bien, Choi YoungJae es quien lo obligó tras sujetarlo del brazo y llevarlo a rastras hasta dicho lugar sin importarle el lloriqueo del pequeño.

¿Y cómo no se le ocurrió huir? Pues la curiosidad de un pequeño niño es el factor para quedarse quieto y observar el accionar ajeno.

Pero Dios ¿A quién se le ocurre tomar una gallina de un corral y reventarle la cabeza con una piedra? Y todo por un "símbolo de cortejo".

—Todo lo que te doy no te gusta. Siempre me dejas de lado por V Hyung. ¿Qué tiene él que yo no tenga? ¡Dímelo, Jungkookie!— ordena un pequeño YoungJae lanzando la piedra a un lado y patea el animal muerto quitándolo del camino hasta llegar a Jungkook, quién retrocede unos pasos hasta que su espalda choca contra la pared de madera.

—V Hyung es bueno conmigo... é-él no me hace llorar... tú sí— solloza desviando la mirada hasta la gallina al costado de un costal de paja, por lo que aprieta sus llorosos ojos cuando ve la sangre desparramada—. Estás loco, Hyung. Estás loco.

—Yo no estoy loco. Tú eres el débil que llora por todo. Eres un llorón. Llorón llorón llorón llorón...

Y de repente YoungJae es empujado abruptamente hasta caer sobre la paja, soltando una queja cuando su espalda es raspada por unas pequeñas ramas de la misma.

¿Pero quién es la persona que cometió aquella acción?

—¡Deja en paz a Jungkookie, rata asquerosa!— grita aquel niño de precioso cabello negro y rizado, plantando la mirada en YoungJae, más la preocupación por cómo está el menor de los tres es su motivo principal—. ¿Estás bien? ¿Te pegó?

Jungkook niega repetidas veces, y solloza otra vez.

—TaeTae, Jae Hyung mató a Cornelia.

El mencionado recorre el lugar, hasta recaer su vista en la gallina en el suelo. Ni siquiera había un rastro de la cabeza, solo podía ver el pescuezo de este gotear sangre; el resto era puré.

—Ese es mi cortejo para Jungkookie, búscate el tuyo, V idiota— atina YoungJae poniéndose de pie, mientras sacude sus finos shorts con tirantes, pero de nada sirvió porque Taehyung de nuevo lo empuja a la paja con un poco más de fuerza.

—Te lavaría la boca con lejía como dice mi papá Jin, pero a tí te romperé los dientes por hacer llorar a Jungkookie y por insultarme.

Y de repente YoungJae se vió envuelto por los golpes de un pequeño Taehyung hasta el punto que el granero se volvió un completo caos con los animales chillar despavoridos y un pequeño Jungkook queriendo separar a los mayores. Lastimosamente su fuerza a comparación de los otros es nula, por lo que opta por correr fuera del lugar y llamar a gritos a unos sirvientes, siendo Jisoo junto con Wonwoo quienes calmaron la pelea.

Luego de unos minutos, Taehyung queja sentado en la gran cama de los aposentos de sus padres. Seokjin con un pequeño trozo de algodón con agua oxigenada limpia el labio abierto de su hijo, frunciendo las cejas cuando este no deja de moverse y quejarse por su brusco movimiento.

DEBITUS UT OMEGA | KTH&JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora