DEBITUS UT OMEGA | KTH&JJK

CAPÍTULO V

El omega entró al establecimiento recibido por el sonido de la campanilla de la puerta. Caminó hasta el mostrador para saludar a la persona tras ella.

—Hola Kookie ¿Qué te trae por- ¡¿Qué te pasó?!

—Hola, señor Park, y-yo... —chasqueó la lengua buscando las palabras para describir su apariencia—. Es un asunto personal. Mmm... ¿Esta Jimin?

Cambió de tema, necesitaba ver a su amigo de toda la vida. Necesitaba a la persona que lo entiende más que nadie en el mundo.

—Está adentro, pasa por favor— el omega asintió y tras dar una reverencia caminó hacia la puerta del fondo donde había unas escaleras siendo la entrada de la casa.

Subió. Se quitó los zapatos dejándolos en la entrada y empezó a escanear el lugar buscando a su objetivo, pero no lo encontró. Se dirigió al cuarto de su amigo, y nada.

—Jimin— llamó en voz alta, pero no recibió respuesta—. ¿Jimin dónde estás?

De la nada siente un peso sobre él, haciéndolo tambalear y caer al suelo. El omega mayor reía al ver como el castaño estaba en el piso boca abajo y con el entrecejo fruncido. Jungkook de inmediato se puso de pie y abrazó a Jimin con demasiada fuerza. El pelirrubio se asombró por la actitud del omega.

Este no era Jungkook, algo le sucedió.

— ¿Kook?— el castaño no lo soltaba—. Oye ¿Pasa algo?

Jungkook finalmente se desprendió del mayor, tenía los ojos cristalinos y las mejillas levemente rosadas.

— ¿Por qué llo- ¡¿Quién mierda te hizo eso?!— gritó histérico al ver el labio y la mejilla del menor con unos parches—. ¡Dime! Jeon Jungkook.

—Hyung, cálmate por favor— rogó.

— ¡Métete tu Hyung por la cola! ¿Cómo puedes pedirme eso? Estoy preocupado por ti ¡¿Y me dices que me calme?! No seas idiota— Jimin cerró de golpe la puerta de la habitación, y toma asiento en la cama con el menor a su lado.

—Si te calmas te contaré.

— ¡Estoy calmado! ¿No me ves calmado?

Jungkook suspiró. El pelirrubio al ver la actitud del contrario, se tranquilizó un poco con la esperanza que le contara.

No sabía si era buena opción. Jimin era capaz de matar a los betas y a aquel alfa que trató marcarlo. Pero no podía negarse. Es su mejor amigo desde los 8 años, sabe todo de él. Es el único omega que lo apoyó cuando más lo necesitaba. No se tenían secretos.

Jimin es su confidente.

— ¿Me prometes no enojarte?

—Ya estoy enojado ¿Qué más da?

Jungkook vuelve a suspirar.

—Esos betas me entregaron a ese alfa, trató de violarme y marcarme. Vi como les entregó una bolsa de monedas de oro y billetes— mencionó rápido, evitando darle vuelta al asunto, sabía que en cualquier momento su Hyung iba a explotar de rabia.

Pero nada. No pasó... Nada.

— ¿Jimin- shii?

El mayor lo miraba en silencio, su cara no mostraba algún gesto. Jungkook se inquietó por la actitud neutra del omega. Jimin suele reaccionar de mala manera, pero está vez... Nada. Era una piedra.

— ¿Hyung estás bi-

Vaya situación

Jimin abrió la puerta de su habitación brutalmente dando un golpetazo a las paredes. Caminó a grandes zancadas bufando y escupiendo más de mil lisuras por segundo. Jungkook desconocía aquella actitud tan impulsiva. Jimin era tranquilo. Tenía sus arranques de ira una vez en cuando, pero no como ahora.