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Madrid, las encinas, 2019

Martes 08:20

Lu descansa su cabeza en el hombro de su novio, mientras que él le acariciaba su cintura por encima del uniforme, le encantaba estar así con Guzmán, tan tranquilos, después de la noche vivida, Guzmán no había querido despegase de Lu, ella era lo único que lo mantenía cuerdo, ella era lo único que le podía mantener distraído del regreso de Marina.

- Que hay pareja - los saluda Ander

- Buenos días, cariño - Lu besa la mejilla de su amigo

- ¿Cómo estás? - le pregunta Ander a su amigo - ¿Qué tal está Marina?

- La verdad es que no pudimos hablar mucho... - le cuenta Guzmán - pero mira - saca su teléfono y abre la galería - es mi sobrino - le enseña la foto que anoche le hizo al hijo de su hermana - se llama Guzmán... bueno Felipe Guzmán

- Joder - Ander reacciona a la foto - es idéntico a Marina... felicidades supongo - se encoje de hombros

- Gracias ¿Tú no tienes nada que decir? - pregunta Ander molestando a Lu

- Mmm prefiero por el momento retener mis pensamientos – responde Lucrecia

El auto negro frena en frente de la entrada escolar, Samuel sale del auto robándose las miradas de sus admiradoras, se acomoda su mochila en el hombro y camina hasta el otro lado del auto para abrir la puerta, en donde Carla baja de manera lenta.

- Pero que.... - Lu se quedó con la palabra en la boca cuando ve como Samuel le pasa un mechón de cabello por detrás de la oreja a su amiga

- ¿Y eso cuando pasó? - Ander los mira con una sonrisa en los labios - ¿se acuerdan cuando pensábamos que estos dos tenían algo? – recuerda divertido – aunque a mi no me engañan de seguro si pasó algo que no nos han contado

- Tal vez ahora si lo tengan - inquiere Guzmán - después de todo Carla no es una tía que sepa estar sola

Ander y Lucrecia lo miran sorprendidos, Guzmán no era un hombre de hablar mal de las mujeres, Lucrecia se aleja de su novio, le golpea el pecho, y emprende camino para entrar al salón de clases en donde sí o sí le sacaría información a su amiga.

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Ya había pasado gran parte del día, era hora del almuerzo, y ya que ni Carla ni Lucrecia almorzaban era el momento exacto para que Lucrecia pudiera sacarla información de los acercamientos entre ella y Samuel.

- ¿Me dirás que está pasando entre Samuel y tú? - pregunta Lu tomando a su amiga del brazo mientras caminan hacia los jardines de la escuela

- No pasa nada Lu...

- Ya - la corta - anoche se robaron las miradas de todos y hoy en la mañana desapareces para volver a ser vista saliendo del auto de Samu así que a mí no me mientas

- Joder Lu - Carla suspira - ven - se aferra al brazo de su amiga

Ambas se alejaron lo que más pudieron de quienes las pudieran oír, Carla sabía que no sacaba nada con ocultarle la verdad a su amiga, ya que ella de una u otra manera se enteraría de la verdad, y era mejor que se enterara por ella que por alguien más, así que rápidamente le conto todo, aunque ahora diciendo el pequeño trato que tenía con Samuel, se dio cuenta de dos cosas, uno; sonaba como una completa estupidez y dos; se dio cuenta de la cantidad de cosas que habían pasado en tan pocas horas.

- Joder Carla - Lu se deja caer en la banca de manera - es una locura

- Lo sé - Carla se sienta a su lado

- Suena como algo que va a salir mal - dice Lu mirando a su amiga - ¿estás segura de esto? no quiero que ninguno de los dos salga lastimado...

- No saldremos lastimados Lu. o al menos yo no - contesta la rubia cruzándose de brazos mientras Lu pone los ojos en blanco

- Eres una tonta - la acusa la morena - esto va a salir mal... estoy segura - suspira

- Mejor volvamos - Carla se pone de pie decidida a no escuchar a Lu, porque sabe que probablemente su amiga tenga razón - no querrás llegar tarde a la última clase

-Tienes razón - Lu imita la acción de su amiga y camina a su lado para volver al edificio

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Ya en clases, los chicos tomaban apuntes, algunos garabateaban en las hojas de sus cuadernos o en la mesa simplemente, cuando el sonido de todos los teléfonos de los estudiantes empezó a llenar el aula, avisando una notificación masiva. Y los estudiantes como tiburones hambrientos se apresuraron a revisar que era lo que estaba causando revuelo, los cuchicheos y susurros empezaron a hacerse presente. Samuel quien era uno de los que se encontraba rayando su hoja de cuaderno sin sentido quedó helado cuando leyó lo que estaba causando tanto furor.

"¿Será que nuestro joven príncipe ya ha encontrado al amor de su vida? no lo voy a negar hacen una pareja hermosa, pero ¿si recordamos que gracias a ella hemos conocido a uno de los jóvenes acusados de casi homicidio más joven del país, quien además se encuentra prófugo? ¿si recodamos que la futura Marquesa de Caleruega fue acusada por supuestamente esconder al traidor Leopoldo Benavent? Es posible al príncipe Samuel no le importe el pasado de la mujer que es su amiga de infancia, pero nosotros no olvidamos y nunca olvidaremos"

Samuel leyó más de una vez el tweet de quien se hacía llamar por "Lord R", el profesor intentaba acallar a sus alumnos pero le era muy difícil teniendo a los protagonistas del chisme en el salón, Carla intentaba mantener la compostura, pero le era un tanto difícil, volvió a leer el tweet y admiro las fotografías adjuntas, una era de ellos bailando la noche anterior, otra de ellos saliendo tomados de la mano esa misma mañana de la escuela y la última era de ellos dos en la cabaña mientras desayunaban.

El timbre sonó y Carla agradeció al cielo, rápidamente tomo sus pertenencias, tratando de huir de la mirada de todos, la verdad es que nunca le había importado ser el centro de atención, pero que aún la acusaran de esconder al que pudo ser el asesino de Marina era su talón de Aquiles.

Samuel la vio salir del salón y sin importarle tomar sus cosas, salió rápidamente detrás de ella, corrió para alcanzarla, hasta que pudo tomarla del brazo.

- Carla - su nombre salió de manera tranquila de los labios de Samuel

Carla se giró para mirarlo a los ojos, sabiendo que nuevamente eran el centro de atención, y la verdad era que ella solo quería ir a su casa y tratar de olvidar este mal rato, pero sin embargo dijo.

- Te juro que yo nunca supe donde se había ido Polo...

- Lo sé - Samuel la acerca a su cuerpo - no sé de quién será el tweet, pero no tiene idea de lo que está diciendo

- Solo dice lo que muchos piensan - dice Carla lamentándose de esa verdad, Samuel la sujeta por la cintura y acerca su rostro al de ella

- No es lo que yo pienso - susurra cerca de sus labios

Carla cierra los ojos, puesto que a pesar de todo el escándalo que estaban viviendo en ese momento, se encontraba entre sus brazos, ansiando el tacto de sus labios de la misma manera que lo hizo a los catorce años.














































¡¡Aquí el capítulo de hoy!! Es algo cortito, pero se vendrán cosas muuuuuy intensas, así que prepárense.
Un beso y no leemos el sábado con un nuevo capítulo.
Chinchin.
🥂🥂

Realeza del siglo XXIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora