*Meses antes*
España - Madrid
Viernes 8:30 am
La semana había pasado extremadamente lenta para Samuel quien corría por el sendero del parque, Lucrecia se había ido el miércoles pasado y con él se había ido la pequeña alegría que le proporcionaba la familia de su mejor amiga, y es que Luciano y Valentina no hacían más que llenar el hueco de su corazón que no sabía por qué estaba vacío.
Siguió corriendo, sin darse cuenta de que tropieza con una chica de cabello corto, ambos caen el césped, Samuel suelta una maldición al golpearse la espalda y la chica suelta un quejido audible cuando intenta estirar el tobillo.
-Lo siento - se disculpa Samuel mirando a la chica
- ¡Eres gilipollas tío! - exclama la chica tocándose el tobillo que rápidamente se tornó rojo - ¿pero es que no miras por dónde vas?
La chica levanta el rostro para seguir enfrentando a Samuel y en el momento en que sus ojos se encuentran se le traba la lengua, Samuel seguía mirándola culpable y las mejillas de la desconocida se tiñe de rojo intenso, al igual que su tobillo.
- Joder... yo...a... - tartamudea la chica sintiéndose desfallecer
- Realmente lo siento - dice Samuel poniéndose de pie y tendiéndole una mano
La chica sin poder creer el hombre que tenía frente a ella, aun completamente aturdida le acepta la ayuda y se pone de pie sintiendo la punzada atravesarle el tobillo.
- ¿Puedes caminar? - pregunta Samuel un poco alarmado por la cara de dolor que ha puesto la chica
- Si...si - responde la chica intentando alejarse del embriagante aroma del príncipe de España, pero falla y flaquea al intentar dar un paso hacia adelante - joder - se muerde internamente la mejilla
- Creo que es mejor que vayas a urgencias - dice Samuel pasando su brazo por la cintura de la chica
La desconocida lo mira sin ser capaz de alejarse de él y es que la situación le parecía tan surrealista que se preguntaba si estaba soñando despierta, Samuel se queda quieto esperando alguna respuesta, pero rápidamente se encuentra atrapado en la mirada brillante de la chica entre sus brazos, tenía el cabello corto, ojos castaños casi negros, pestañas largas como las suyas y las mejillas rojas a más no poder, la verdad es que era bastante atractiva.
- No... no creo que sea necesario - dice al fin la chica intentando alejar la mano de Samuel de su cintura - creo que puedo caminar - dice firme
- Si... está bien - responde Samuel, pero cuando la chica da el primer paso lejos de él suelta una maldición que hace que Samuel vuelva a tomarla por la cintura
- Vale que puedo sola - insiste la chica
- ¿Cuál es tu nombre? - pregunta Samuel mirando directamente a la chica
- Ari Ariadna - responde la pelinegra
- Bien Ari, esto ha sido mi culpa así que por favor déjame llevarte a urgencias - dice Samuel siendo lo más educado posible
- ¿Está seguro? - Ari lo mira perpleja - no quiero... causar problemas
- No es ningún problema... por favor - insiste Samuel - mi madre me mataría si se entera que deje a una mujer con el tobillo lastimado por mi culpa sola en medio del parque...
Como si fuera posible, las mejillas de Ari se tiñen aún más rojas, tanto que se preguntó si tenía fiebre o algo parecido, Samuel literalmente era un príncipe salido de un cuento de hadas, así que sin negarse más Ari acepta la ayuda, después de todo realmente no podía caminar, pero lo que no se esperaba era que Samuel la tomara en voladas y la llevara entre sus brazos hasta la camioneta en donde se encontraba su equipo de seguridad matutino.

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Realeza del siglo XXI
FanfictionCarla busca desesperadamente la manera de escapar del titulo del marquesado. Samuel pasa de ser el segundo en la linea de secesión, al príncipe heredero a la corona española. Lu, se aferra con todas sus fuerzas a su compromiso forzado con Guzmán d...