El Camino del Destino ~ KookMin. (Omegaverse)

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Jungkook a menudo se preguntaba como su vida había cambiado en un pestañeo. Jamás imaginó que su alma destinada estuviera tan cerca pero a la vez tan lejos de él y ahora todo parecía como un gran sueño.

Está mas que agradecido con la vida por haberle puesto a Jimin en su camino. Creía que jamás conocería a un chico tan especial y lleno de tantas virtudes como las que posee él.

Pero entre todas esas cosas no podía creer que sus días de gimnasio y boxeo como lo eran los sábados (hoy) habían cambiado tanto.

Justo ahora está sentado en una silla tomando el sol justo en el patio trasero donde los Park mientras viste una pijama de vaquitas que a penas le queda, desprendiendo un olor a bebé y bebiendo limonada mientras sus uñas son esmaltadas de color rosa pastel.

Ya todos podemos imaginar como terminó en esa situación pero él jamás se negaría a las cariñitos de su omega y ellos pucheros acompañados de ojitos tiernos.

Él es un hombre de 37 años, rudo, dominante con un cuerpo grande y musculoso lleno de odio o al menos eso creía el alfa. Pero ante los ojos de los empleados y para Jimin justo ahora se ve muy tiny.

Volviendo a su debilidad por los pedidos del castaño no pudo negarse cuando expresó su deseo por pintarle las uñas y aunque intentó escoger otro color más "oscuro" como él fue imposible por que su niño bonito terminó haciendo lo que se le pegara la gana.

Jimin se veía tan feliz y emocionado que terminó cediendo pero se soprendió cuando el omega sacó un gran estuche con una gran variedad de productos para las uñas. Desde esmaltes hasta pegatinas que justo ahora esta pegando en una de sus uñas.

-¿Te gusta pintar uñas?

El alfa le miró fijamente sintiendo ternura por su expresión de concentración. Definitivamente lo mataría un día de estos por un ataque de ternura.

-Sip. Siempre se las pintaba a mamá y algunas veces lo hacía para mi.

Asintió para volver a beber su limonada. Desde hace un momento estaba pensando en la manera de decirle que tendrá un viaje a Japón aunque de verdad no quisiera irse por que su omega ha estado muy sensible pensó que tal vez sería peor por su estado.

-Uhmm.... Yo tengo que ir a Japón por dos semanas. Fue algo improvisto.

Los ojos avellanas del menor se posaron sobre los suyos. Detuvo su tarea pero luego siguió como nada.

-Esta bien.

Por un momento el alfa se esperó un berrinche o algo así pero eso no sucedió.

-¿No vas a decir nada?

Jimin se incorporó en su lugar dejando el esmalte rosa a un lado para mirar fijamente al mayor.

-¿Qué se supone que debería de decir? Es tu trabajo Jungkook jamás te voy a impedir que no vayas o algo así. Lo mejor que puedo hacer es comprenderte.

Sacó otro esmalte de un rosa más pálido para pintar las suyas. Quería que combinara con las del alfa.
Jungkook no podía creer lo que dijo... El castaño es tan bueno algo así como un ángel y aunque realmente la "comprensión" en una relación es algo normal no mucha gente la práctica y él lo sabe por experiencia propia.
El pelinegro a lo largo de su vida había amado a personas que fueron parte importante de su día a día pero que a la vez lo habían lastimado mucho.
Hasta el punto en que acciones tan simples como estas parecían algo de lo más magnífico para él.

-Gracias por tu compresión Jimin.

El omega solo asintió demasiado concentrado en su tarea.
No se daba cuenta que las pequeñas acciones que hace o las dulces palabras que le dedicaba a Jungkook provocaban grandes estragos en él como fuegos artificiales y que se siente amado de la manera más hermosa.