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Jimin no sabía nada de lo que sucede dentro de su cuerpo. En su cabeza la idea de tener un hijo se había desechado por completo sobre su diagnóstico.

Algunas veces pensaba en eso y era algo melancólico pero con el tiempo lo supo sobrellevar de alguna u otra manera.

Su accidente sucedió muy rápido y el viaje a Canadá también. La rutina en la que vivía fue cambiada por un país que no conoce y un sufrimiento infinito pero ahora lo tiene aquí.
Jungkook está a su lado comiendo pizza como si fuera el mejor manjar del mundo, entonces se preguntó si el tiempo había pasado rápido o lento.

Siente que tal vez fue ayer cuando vino hasta aquí pero las noches de insomnio y lágrimas le hacen sentir que fue hace mucho tiempo.
Aún no le había dicho al alfa su deseo por volver a Corea, realmente ahora no sabe lo que le va a reparar el futuro pero si es al lado de Jungkook está dispuesto a hacer de todo.

Dejó su trozo de pizza a un lado llamando la atención de su esposo.

-¿Qué pasa?

Tragó dándole un sorbo a su gaseosa mientras espera una respuesta.

-No es nada. Sigue comiendo parece que lo estás disfrutando mucho.

Kook no era el único, SeokJin se chupa los dedos ante tremendo sabor y su abuelo no se queda atrás.
Todos están sentados en la mesa disfrutando de la pizza que decidieron comprar para no tener que preparar la cena pero aunque Jimin fue el de la idea y nadie se quejó ante su antojo pero ahora parecía el que menos deseaba comer.

-Iré a la habitación. Con permiso.

Se levantó de su silla recogiendo el plato donde estaba comiendo para lavarlos junto con el vaso.
Jungkook nunca lo vio de esa manera así que se preocupó enseguida y cuando quiso levantarse SeokJin lo detuvo.

-No te preocupes Kook. Él actúa de esa manera casi todos los días así que no hay gran problema, probablemente va a dormir o algo así.
De vez en cuando quiere comer algo pero a los pocos minutos ya le causa asco.

Parpadeó varias veces recordando nuevamente por qué se encuentra aquí. Lo olvidó por un momento.

-Ahora que lo mencionan, ¿por qué piensan que está...? ¿No lo sabe verdad?

La preocupación se hizo notoria en su voz.
No es una buena idea que Jimin sepa sobre su condición. Hasta que no se haga las pruebas de embarazo prefiere tenerlo en silencio.

Es evidente que Jimin no sabe nada de su condición y piensa que es muy normal.

-Gracias por dejar que me quede aquí. Cuando vayan a Corea dejaré que visiten nuestro hogar.

Los abuelitos de SeokJin sonrieron cuando Jungkook dijo eso.

-Gracias Kook. Es un placer y siéntase cómodo esta también es su casa.

Sonrió agradeciendo antes de irse a su respectiva habitación donde encontró a Jimin acostado sobre la cama con los ojos cerrados.

Pero en cuánto puso un pie dentro de la habitación sintió algo extraño en su pecho.

-¿Estás dormido?

Se agachó hasta su maleta buscando algo que compró especialmente para Jimin.

-No.... Solo me siento un poco mal....

Otra vez tenía esas náuseas insoportables pero le da coraje que justo tenga que darle cuando Kook esté aquí.

-Mira.

Abrió sus ojos para mirar un hermoso osito de color rosa con un corazón en la pancita.
El corazón se le derritió ante la ternura y miró a su alfa.

El Camino del Destino ~ KookMin. (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora