- Aarón -
Decisiones equivocadas-No. Solo para nosotros, por favor.- respondo amablemente.
Natalie ya está enterada que regresé de Seattle, me comí a gritos con ella por teléfono apenas llegué. No quiero ni verla, los rumores de sus infidelidades se están haciendo mas grandes, necesito hacer algo con esa relación lo antes posible, esto no es sano ni para mí ni para ella. Ya nos jodio bastante, ya absorbí toda su oscuridad, ahora solo quiero que se mantenga lejos de mi.
¿Qué pasó con la chica de cabello negro que me enamoró? No la reconozco, aún recuerdo como si fuera ayer cuando cruzo la puerta de mi casa y me la presentaron como mi nueva hermana, la pobre estaba tan asustada que no podía ni hablar, me rehusó a comprender de qué manera el placer carnal puede ser más fuerte que la lealtad y el respeto; todos tenemos una línea fina que separa lo aceptable y lo que rebasa nuestros límites, alcanzamos un punto donde hasta la más mínima falla nos harta.
Hoy es lunes, empieza el conteo final para concluir el semestre; una semana para entregar mi proyecto final, las clases son cada vez mas ligeras estos días; nos suspendieron asignaturas para dedicarnos cien por ciento al trabajo, me esperan madrugadas sin dormir, me faltan cortar algunas piezas en la universidad y comenzar a armar la maqueta, no podía avanzar absolutamente nada porque no contaba con la aprobación de mi tutor, recién la acabo de recibir hoy, ahora que ya obtuve el visto bueno necesito ponerme manos a la obra.
Miles de cosas me rondan en la cabeza, una de ellas, la que posee más espacio que las otras, tiene nombre y apellido. Julietha Navarro, la pelirroja que era rubia cuando me topé con ella y cuando su hermano nos mostró una foto para conocerla, un cambio que la hace ver mas hermosa de lo que ya es, no cuento con la fuerza necesaria para sacarla de mis pensamientos. La idea de que se apareciera con esa sola camiseta puesta me hacía perder la cordura y tener una descarga de celos que no he sentido antes.
Sin querer le pago con la misma moneda a Natalie, pienso en otra persona que no es ella, siendo sincero conmigo mismo si me he llegado a acostar con otras chicas que no han sido ella, era tan inmaduro que solo quería venganza, buscaba que sufriera lo que yo sufría con cada infidelidad, pero no conseguía nada ni una maldita réplica de su parte, mis principios y modales no me permitían seguir haciéndolo, a partir de que empecé la universidad a la única persona que toco es a Natalie Jones, sin embargo cuando tratas bien a alguien, peor te tratan a ti.
No estoy escuchando nada de la conversión que se está llevando a cabo en esta merienda o almuerzo a las tres de la tarde, hace dos horas llegué a la casa, tuve que obligarme a ponerle seguro a la puerta para no ir a colmarle la paciencia a la pelirroja y poder centrarme en detallar los dibujos y planos en mi habitación.
La tensión que desprende Julietha es tan palpable que es imposible no notarla, está así desde que mencionaron a Natalie (ya ni ganas me dan de decirle novia), ni siquiera sabe quién es, no la conoce y daría lo que fuera para que nunca se cruzarán, Julietha por más que esté destrozada por dentro aún sigue teniendo ese brillo en su mirada, es una persona muy inocente en todos los sentidos de la palabra, mientras que Natalie es una chica llena de odio y resentimiento que le encanta herir a los demás para sentirse bien consigo misma.
La señora Rosita, nuestra ama de llaves, bendecida con el talento de preparar los mejores platillos; coloca una fuente de ensalada de pasta fría al centro del comedor, es una comida ligera, dentro de 4 o 5 horas volveremos a comer así que nadie tiene por qué quejarse.
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Te amo hasta el infinito. (INFINITO #1)
أدب المراهقينSu pasado dejó su alma custodiada por demonios, y solo una persona consiguió domarlos. Ella no cree en el amor, se niega a sentir y su autoestima va de mal en peor. Él quiere volver a enamorarse, la sinceridad es un don peligroso en sus manos y su a...