Capítulo 35

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- Julietha -
"Chocolate. Me gusta ese sabor"

Muevo el tenedor, jugando con la comida mientras los demás hablan alegremente en la mesa del jardín.

Estoy distraída, sumida en mis pensamientos y sobretodo callada. No tengo apetito, la resaca es menor y no estoy apta a participar en ninguna actividad de hoy, dudo que eso sea posible.

Laura y Miguel nos concedieron libertad por 24 horas luego de vernos con una cara de fatiga, a excepción de Aarón que ni siquiera ha tenido tiempo de comer por estar entrenando desde altas horas de la mañana, ya es de tarde pero la mayoría recién está desayunando, incluida yo.

Pincho un trozo de fresa con mi tenedor mas no me lo llevo a la boca. No tengo apetito, ayer después de la llamada mis ánimos decayeron notoriamente, ¿cómo simples palabras te pueden afectar a tal magnitud?

—¡Suficiente!—escucho el grito de Miguel hasta aquí.

Veo sobre mi hombro que el arquitecto suspira y bebe un poco de agua, vuelvo a mi posición inicial cuando voltea hacia mi dirección.

—Aarón, esos no son golpes limpios.—le reprocha.—Vas a ir a un concurso, no a pelearte con un maleante en una discoteca.

—Lo intentaré de nuevo. Estoy un poco distraído, perdón.—se disculpa el arquitecto.

Agradezco mi buen sentido auditivo, no sé cómo escucharía conversaciones que no me corresponden sin el.

—No. Ahora quiero que descanses, mañana te tomas el día libre para que te concentres en el concurso y en tus estudios, el lunes te quiero al mil por ciento, tienes que ganar.—lo alienta antes de recoger sus cosas, pasar a despedirse y luego irse por donde vino.

Aparto mi plato de ensalada de frutas ante la mirada explícita de los demás, no les presto atención. No quiero hablar sobre lo qué pasó en la playa.

—¿Te sientes bien?—pregunta Fernanda.

—Ehm...si, todo bien.—respondo tartamudeando pero trato de ser educada.

—No parece, enana, te ves distraída.—resalta Logan.

—Ya dije que estoy bien, Logan.—exclamé sin elevar mi voz, metiendo mis manos en mi sudadera gris.

Tengo escalofríos y me duele la cabeza. Quiero dormir, meterme en mi camita y no despertar nunca.

—¿Qué tal? ¿Listo para patearle el trasero a Rocki Rockero?—pregunta muy animado Jhonatan que tiene unas gafas de sol, mencionando al hombre con el que se enfrentará Aarón.

Chinos es el más activo de todos, mientras Adrián, Francisco y yo estamos muriendo lentamente y actuando como zombies recién salidos de su tumba, Logan, Fernanda, Jhonatan y Aarón están más despiertos que nunca, no más hiperactivos, simplemente agarran señal más rápido que nosotros.

Llega radiante con una camiseta negra sin mangas, sus nudillos envueltos en vendas, con algunas gotas de sudor en su frente y otras descendiendo por su cuello, por el mismo donde anoche mi boca estuvo, saboreando su piel y disfrutando de su cercanía.

Evito pensar en eso.

—¿Tienes una foto de tu contrincante?— Fernanda inclina su cabeza para ver a Aarón.

Te amo hasta el infinito. (INFINITO #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora