Alas de diamantes

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— Y lo siento... siento que desde que te vi de nuevo lo unico que queria era volver a sentirme como antes. Como si esto solo fuese un mal sueño por que desde que me fui de gira anhelaba que no tenerte fuese una pesadilla y que al despertar de ella estarías... estarías a mi lado en la cama pero no era así. Aunque era lo que más deseaba en el mundo no podía hacerse realidad.

—No tienes idea de cuantas veces dormí llorando después de llamarte y escuchar el buzón de vos.

— Pero las imagino, créeme que esa imagen me tortura y ahora quiero enmendar mi error pero llegas en un momento en que no puedo controlarlo Mueriel,  por primera vez no tengo el control.

—Tal vez necesitemos dejarlo ir.—voltea a verme y veo una lagrima deslizar por su mejilla, joder.

— lo siento pero me niego a dejarte ir de nuevo.

—Lenny, esto no es sano.

— ¿por que dices eso?

— ¡por que hace unos días escapaste de aquel departamento para irte con ella! —Mis ojos se abren en señal de sorpresa

— No me fui con ella Muriel solo...

—solo te has enojado por una estupidez y fuiste a buscarla para darme celos sin ninguna razón.

Mantengo el silencio cuando a pesar de intentar pronunciar una respuesta coherente no lo consigo, no tengo argumentos para debatir sus palabras y mantengo mi boca cerrada mientras la miro con vergüenza esperando una excusa de mi parte.

— ¿sabes que? Mejor no me respondas.— la veo levantarse y pasar de mi en dirección contraria al muelle.

Narra Muriel.

Mis pies descalzos me guian a tropezones fuera del muelle y escucho los pasos de Lenny pisar fuertemente la madera tratando de llegar a mi.

Lo ignoro y caminando mas de prisa llego donde deja mis zapatos y cojo los calcetines para ponermelos dejando de sentir la arena en la planta de mis pies.

— esta bien lo acepto se que lo que hice estuvo mal, fue un impulso.

— ¡hay por dios! Lenny no me digas que ahora te arrepientes.

Levanto uno de mis pies y me pongo el zapato para hacer lo mismo con el siguiente, me amarró las agujetas ante el silencio que se propaga y cuando miro a Lenny a los ojo con seriedad una chispa de enojo recorre sus pupilas haciendo que me detenga abruptamente.

— ¡¿que es lo que quieres que me aleje de ti? Bien, lo haré si es lo que tanto deseas pero espero no tener que soportar tus miradas acusandome después cuando te des cuenta que me necesitas!

Lo miro con asombro y la furia emana de mi sistema cuando de un segundo a otro y sin verlo venir mi mano se levanta tomando impulso hacia atrás muy dispuesta a abofetearlo.

Al ver mi reacción Lenny se sobresalta y cierra sus ojos esperando el impacto de mi mano en su mejilla el cual no llega.

A centímetros de distancia detengo mi acción recuperando la cordura y bajo mi mano apretandonlas en puños a mi costado.

Nunca he abofeteado a Lenny, y estoy muy segura que tampoco lo haré, en primer lugar por que lo respeto aunque aveces en situaciones como estas logre sacarme de mis casilla.

Me llevo el cabello hacia atrás en medio de un profundo suspiro y levantó la vista notando como Lenny permanece con la vista en el suelo y la cabeza aún ladeada.

—no tengo por qué soportar esto Lenny — pronuncio en voz baja y buscando su mirada la cual sube a mis ojos con serenidad. — ¡no soy una maldita marioneta que puedes tirar cuando no te sede cuerda! — mi tono de voz se eleva.

● LUAR: Luz de luna ●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora