Conspiraciones flotantes

111 9 1
                                    

La música sumba en mis oídos sumada a la cacofonia de voces que inundan el lugar.

Una clara vibra energética puede sentirse flotar por todos lados la cual en comparación a mi aura genera un alto contraste que pondría a redundar cualquier cosa que pase por mi cabeza.

Después de todo Logan, logro arrastrarme con sigo fuera de la mansión y traerme a una de las mejores discotecas de San Juan, aun cuando nisiquiera me explico cómo fue que dió con el lugar siendo mi amigo prácticamente nuevo en la. Ciudad.

Soy conciente que Logan ya había estado antes en Puerto Rico, sin embargo visitar de vez en cuando no lo convierte en el candidato perfecto para ir por allí con tal confianza.

Aún así asumiré por el bienestar de nuestra amistad la respuesta más obvia.

Alguien de confianza tubo que haberlo puesto al tanto de como moverse por aquí, y por ello el bailarín se comporta como si estuviese en una fiesta realizada en la casa de su mejor amigo.

Siento mis pies pesados, razón por la cual en numerosas ocasiones me he visto en la necesidad de rechazar cualquier invitación de baile, así como también me he abstenido de beber mucho alcohol por lo que puedo afirmar con seguridad que solo he tomado una cerveza con la excusa de ser yo quien cuide de mi acompañante.

—Erees muy aguafiestas ¿sabes? —la voz de Logan sale un poco ronca y con sierta burla adornando cada letra mientras se deja caer a mi lado en un sofá de cuero. —dijiste que me llevarías de fiesta para divertirnos y soy yo quien te arrastra a esto. — sonrió.

Aunque el peli negro tenga una alta resistencia al alcohol, lo cierto es que ha tomado lo suficiente como para que se le vaya un poco la cubeta, y a raíz de ello comienza a alargar algunas palabras acentuando sobre todo aquellas sílabas dónde resalta la letra "r" — ¿porrrrque no te diviertes conmigo?

—Por que quiero que te diviertas tu, necesitas despejarte yo conduciré— afirmo dando por sentado que soy la persona más cuerda en la conversación e instantaneame llevo mi mano hacia el bolsillo izquierdo de sus jeans para sacar las llaves de ipso-facto. Cuando el chico rebelde intenta evitarlo al darse cuenta de lo que pretendo hace un ademán para arrevatarme las llaves pero aún así no lo logra gracias a mis reflejos y su tardía reacción.

—Esta bien....—hipa — tu ganas Smith— por un segundo se queda pensando y cuando creo que no dirá nada continua —pero si no vas a emborracharte conmigo al menos bailemos toda la noche.

Logan se levanta con confianza y sonriéndome con sus perfectos dientes blancos me tiende una de sus manos esperando que yo la resiva con gusto.

Lo miro y en mi rostro se abre paso una expresiva sonrisa en respuesta que lo incita a tirar de mi y ambos caminamos hacia la pista de baile mientras lo sigo.

Cuando llegamos nuestros pies se claven en el suelo y comenzamos a bailar sin frenesí, bailar siempre será una liberación para mi, para mi y para Logan también, creo que es la razón por la que somos tan parecidos, de cierta forma
ambos sabemos cuándo darnos espacio y cuando estar allí para apoyarnos siempre, es la persona más leal que conozco, de hecho es la única forma de  fidelidad que he visto al bailarín rendir tributo... la amistad.

pasan los minutos y las horas hasta que mis pies deciden que es suficiente y vuelvo a nuestra mesa con mi mejor amigo siguiendo mis talones.

Ambos nos sentamos y por algunos minutos nos concentramos en nuestros celulares hasta que levanto mi vista y noto a mi amigo un poco pensativo o nostálgico, con sus ojos puestos en la pantalla parece estar viendo alguna conversación antigua así que tomo la iniciativa y palmeo su brazo antes de indicarle que me siga.

● LUAR: Luz de luna ●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora