PRONGSLET AND THE CERYNEIAN GUARDIAN ⟶ Harry Potter [ESPAÑOL]

Chapter Five

Este hermoso fanart de los hermanos Potter fue hecho por cendriia

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Milo estaba en su cama, y los ronquidos de Cedric en la cama al lado de la suya hacían eco en su habitación. Habían pasado un buen día en el Callejón Diagon con Elspeth, quien le permitió a los chicos andar libremente y comprando todo lo que quisieran. Cedric solo quería comprar algo pequeño y barato, no sintiéndose muy cómodo con que ella le comprara cosas. Milo, por el otro lado, sentía que estaba leyendo mucho la situación, creyendo que Elspeth intentaba malcriar a los chicos, probablemente deseando que alguno de ellos fuera Silas en esos momentos. Pero eso no era lo que mantenía a Milo despierto esa noche.

Su madre había estado trabajando hasta tarde y, para cuando llegaba a casa, se veía exhausta. Por supuesto, quería sentarse y hablar con Milo sobre lo que le había mencionado en su carta, pero Milo sabía que necesitaba dormir. Así que guió a su madre a su habitación antes de ir a la suya. Le había prometido que hablarían en la mañana.

Sin embargo, Milo estaba despierto porque tan pronto el reloj había dado la media noche, su hermano menor había cumplido trece años y Milo no estaba ahí en persona para desearle un feliz cumpleaños a Harry. Él, por supuesto, ya había planeado en enviarle una carta de cumpleaños junto a un paquete lleno de cosas que había elegido para Harry y para su sorpresa, Hedwig se apareció en la casa McGonagall. Aparentemente, la joven lechuza no quería que Harry no recibiera nada en su cumpleaños. Al enviarla, Milo no estaba seguro de si su hermano lo recibiría, porque Harry se encontraba una vez más encerrado en la casa de los Dursleys, viviendo bajo sus reglas. Aunque a Milo no le gustara y aunque Minerva quisiera intervenir y ayudar, no podían. Dumbledore había sido claro en que Harry debía, bajo todas las circunstancias, llamar a Privet Drive su hogar.

No entendía las razones de Dumbledore, ni tampoco recibió una explicación. Se esperaba que Milo aceptara que era el destino de su hermano el vivir con tan despreciables personas los veranos. No tenía sentido y Dumbledore parecía querer mantenerlo de esa forma, porque su madre tampoco tenía una idea de por qué Harry debía quedarse ahí o al menos, eso era lo que decía. A Milo no le importaba quién sabía qué y cuándo lo supieron, solo quería que su hermano fuera feliz y obviamente, Harry no podía ser feliz pasando su cumpleaños número trece con los Dursleys.

No debería ser así, para nada. Los hermanos debían pasar sus cumpleaños juntos, saliendo en los veranos, y siendo aun más cercanos de lo que eran. Pero de nuevo, Milo debía preguntarse lo diferente que sería todo si las cosas hubieran sucedido diferente. ¿Sería tan cercano con Minerva? ¿Cedric y él estarían donde estaban? ¿Habría sido seleccionado en Hufflepuff? Milo no estaba seguro y mientras su mente continuaba divagando, se encontraba más y más despierto.

Pasando las manos por su rostro, se había distraído tanto que no notó cuando los ronquidos de Cedric se detuvieron. Pero casi pega un grito cuando la mano de Cedric tocó su cara, sin embargo, para que Minerva no se despertara, cubrió la boca de Milo al mismo tiempo que encendía la lámpara en la mesa de noche del chico.