Chapter Twenty-Seven

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Con el plan de pasar Halloween juntos con su hermano menor, y la idea de que podría ayudar a Sirius a limpiar su nombre para vivir como un hombre libre, sin mencionar que había recuperado a Cedric, Milo creía que todo finalmente estaba tomando su lugar. Había tachado casi todo lo que alguna vez quería hacer y todo parecía ir como debía. Al sentarse en la mesa de Hufflepuff, se unió a la conversación que sus amigos estaban teniendo sobre la próxima temporada de quidditch. Aparentemente, Oliver Wood se enteró de que el equipo de Hufflepuff inició sus prácticas para la temporada primero que los otros y ahora el capitán de Gryffindor estaba reservando la cancha en cada oportunidad que tenía para asegurarse de que los Gryffindors se pusieran al día. Por supuesto, los Hufflepuff no podían negar que habían hecho a su oponente estar bastante paranoico.

Una vez sus estómagos estuvieron llenos, todos se estaban sintiendo cansados, en especial Milo. Los eventos de ese día lo agotaron y estaba seguro de que su mente iba a crear un intenso estado de sueño cuando cerrara sus ojos. Caminó mucho más lento que sus amigos de vuelta a la Sala Común de Hufflepuff, pero a mitad de camino, Cedric se detuvo en frente de él. Milo casi chocó con la espalda del chico e iba a preguntar qué sucedía, hasta que se dio cuenta de que Cedric le estaba ofreciendo cargarlo en su espalda de vuelta a la sala común. En circunstancias normales, Milo se habría negado educadamente y dicho que podría hacerlo, pero apenas y podía mantener sus ojos abiertos de pie en medio del pasillo.

Se permitió aceptar la oferta de Cedric, subiendo a la espalda del chico que era más alto que él y sosteniéndose. Heidi y Max estaban a cada lado de los dos, ambas sonrientes e intercambiando miradas a sus espaldas. Milo puso su barbilla sobre el hombro de Cedric y antes de que siquiera pudieran llegar a la esquina para girar, ya estaba profundamente dormido.

—No toma mucho para que Milo caiga exhausto, ¿o sí? —rió Heidi, caminando los tres.

—Ha tenido un largo día, Heidi —le dijo Cedric—, creo que todos podemos decir que hemos tenido un largo día. Yo también estoy agotado.


Realmente estaba exhausto mentalmente de los eventos del día, en especial considerando que no tuvo el mejor inicio teniendo que lidiar con el vociferador de su padre, condenándolo por sus "penosos" actos. Pero muchas cosas buenas sucedieron y era suficiente para cancelar lo malo, al menos por ese día. Cedric estaba seguro de que no era lo último que sabría de sus padres. Podía afirmar que, en cuanto su padre se calmara un poco, se pondría en contacto intentando que Cedric se arrepintiera de sus elecciones y cambiara su estilo de vida. Por ahora, Amos sólo estaba molesto y seguiría desquitándose en Cedric en cada forma en la que pudiera hacerlo.

Pero Cedric solo quería escuchar de su madre porque, aunque pensó que su madre estuvo insinuando que estaba al tanto de que algo sucedía, nunca mencionó lo que pensaba de ello. Nunca dijo directamente algo en contra de ello, no como su padre. Le dio a Cedric un poco de esperanza de poder acudir a su madre, o de que ella se acercaría. No quería que todo terminara tan mal con su padre expresando lo decepcionado que estaba y que ningún hijo suyo estaría envuelto en tal cosa. Lo que claramente significaba que no consideraba a Cedric como su hijo por el momento.

PRONGSLET AND THE CERYNEIAN GUARDIAN ⟶ Harry Potter [ESPAÑOL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora