BODY┃LEE MINHO.

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'Volveré dentro de dos meses...'

_____ seguía pensando en Bang Chan, a pesar de que ya no estaba más en el departamento. Seguía pensando en la conversación que tuvieron el día anterior, en las 'precauciones' que Minho iba a tomar su algo se salía de control estando en casa.

El sonido de la ducha se alcanzaba a escuchar estando en el sofá mientras que la menor hacía la lista de cosas que debía comprar dentro de poco. Moría de hambre, y wolf pedía a aullidos que le dieran alguna croqueta de comida para saciar su apetito.

Se levantó del sofá y fue en busca de su abrigo, quería salir cuanto antes. No quería que Minho la acompañara, prefería ir sola antes que estar cerca de él. Y no tenia simple explicación, más evitar esa sensación de tensión que se formaba al estar juntos. Aunque fuera todo lo contrario, en la cabeza de _____ usaba esa excusa para no hablarle.

Wolf la seguía, pero no iba a dejar que fuera con ella. Antes de dirigirse a la salida, las pisadas de Minho se hicieron presentes, poniéndole los pelos de punta y provocando un severo temblor en todos los cuerpos.

— ¿Vas a salir? —Preguntó mientras pasaba una toalla por su cabello húmedo. Tenía puesta una camisa blanca de mangas cortas y un jean azul oscuro.

_____ moduló palabras antes de girarse del todo a mirarlo, asintió suavemente tratando de parar los saltos de Wolf, quien ya presentía que ella se iría a alguna parte pero si el.

— ¿A donde? —Preguntó guardando sus mando en los bolsillos de sus pantalones.

— ¿Importa acaso?

— Todo lo que hagas me importa —Respondió sin mucha dificultad. Mientras que ______ soltó un suspiro y acomodaba su abrigo.

Su rostro estaba ardiendo, a pesar de que no era el tipo de chica que se sonrojaba con facilidad.

— Voy a comprar —Volvió a voltearse, hasta que la voz de Minho la detuvo.

— Ok, te acompaño.

Era exactamente lo que no quería.

— No, gracias —Trató de convencerlo mientras lo veía acercarse para tomar una chaqueta del colgador que había cerca de la puerta principal —Iré sola.

Esa pequeña sonrisa que le mostró le provocó una mueca, sabiendo de sobra que lo hacía forzadamente para hacerle pensar que estaría bien.

— No te pregunté si querías o no, te acompañaré de todas formas.

____ puso cara la cara en blanco y lo miró de mala manera, aún apreciando como se arreglaba la chaqueta sobre sus hombros y tomaba las llaves antes que ella.

. . .

Dio un salto.

Dos saltos.

Tres saltos.

Maldijo viendo lo alto que estaba que estaba el cereal que ella quería. Soltó un gruñido de impotencia al ser tan baja, volvió a intentarlo pero fue en vano, necesitaba una escalera o algo en donde sostenerse para alcanzar la maldita caja.

Se sostuvo con firmeza, parándose sobre otra de esas superficies sobresalientes y se estiró lo posible para llegar al cereal. Sus dedos alcanzaron a tocarlo pero no moverlo, se colocó de puntitas y esta vez logró moverlo un poco, estaba al borde. Casi caía...

— ¿Que crees que haces? —Una risa burlona se le escapó a Minho. Ver a la menor tratar de tomar una caja de cereal en el medio del supermercado era mil veces mejor que ir al circo.

____ se le quedó viendo mientras que se estiraba un poco más para tomar la caja, cuando por fin cayó ella logró tomarlo con su mano derecha, soltándose y cayendo de pie.

— Podrías conseguir trabajo en un circo.

Minho apoyó sus brazos sobre el escritorio, mientras que la menor depositaba la caja de cereal a un lado de la bolsa de comida de perros. La castaña sonrió y asintió, fingiendo honra ante su comentario.

— Si, podría a llegar a ser una muy buena domadora de leones —Pasó su mano por su pelo tirándolo hacia atrás para llevar todo a la caja registradora e irse.