BODY┃LEE MINHO.

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Pasó después de estar segura del lugar que la rodeaba. Hero en sus brazos se movía inquieta, olfateando todo a su alcance al momento de estar en el suelo.

____ observó la decoración de la casa, abrazándose así misma por el frío que había en ese lugar. Escuchó la puerta cerrarse detrás suya, luego vio como Minho caminaba por su costado con dirección recta hacia las habitaciones de la casa.

— Bang Chan no vendrá hasta mañana —Habló en un tono fuerte para que lograra escucharlo.

Y Jiwoo seguro trabaja...
Pensó suspirando desganada. Cruzó sus brazos y empezó a caminar a la sala con Hero consiguiéndole de cerca. Cada paso que daba, Hero la seguía detrás moviendo la cola feliz de tenerla a su lado.

Con cierta pena, ____ no dejaba de comparar el comportamiento de Hero con el de su difunta mascota. Eran tan distintos, pero a su vez parecidos. Era algo inexplicable para ella, algo difícil de expresar en palabras.

Soltó su suave suspiro y se sentó en el sofá, dejando recostar su espalda contra el respaldo del mismo asiento. El canino mientras, se recostó a su lado después de dar un salto y proporcionar fuerza en sus patas traseras para poder subir del todo y no caer en el intento.

_____ solo la observó con pequeño brillo en sus ojos.

Acarició su pelaje blanquecino por unos segundos antes de dejar caer su cuello hacia atrás. Viendo el techo con algo en mente que la atormentaba.

Solo tenia que esperar a que Minho se durmiera.

La idea no sería tan difícil si a cada rato sus párpados caían para darle la bienvenida al mundo de la sueños. El sueño le estaba ganando poco a poco, pero lo que estaba planeando era más importante que dos minutos de descanso.

Era eso, o tener que olvidarse de la posibilidad de encontrar a su hermano.

. . .

El frío golpeaba su cara. Con lo rápido que había corrido hace un par de minutos, había logrado provocar un sudor frío que llegaba a ponerle los pelos de punta.

Mordió tan fuerte su labio inferior que causó una herida, mientras observaba su alrededor en busca de algún policía que podría llegar a hacerle perder por completo su plan de escape.

Su pie de movía frenético contra las baldosas, signo de ansiedad que le daba al estar en esa situación.

Quería volver a casa.

A su casa.

A Corea.

Sin percatarse de las lágrimas que desbordaban sus mejillas, entregó el boleto al ver como la mujer de avanzada edad de quitaba de la fila rápidamente luego de ser atendida. El encargado de darle paso libre al avión la miró con el ceño un poco fruncido, sintiendo cierta curiosidad por esas lágrimas que corrían por sus mejillas.

Sin embargo. No quiso preguntar nada.

— Que tenga buen viaje.

____ trató de sonreírle en forma de agradecimiento. Pero lo único que logró fue hacerle una mueca.

Acomodó su mochila en su hombro, sintiendo la parte interior moverse un poco. Escuchó lloriqueos provenientes de Hero, obviamente muriendo por querer asomar su cabeza por el cierre de la mochila en la que su dueña la llevaba. Por eso mismo apresuró el paso para subir al avión y tomar un asiento, queriendo hacer todo más sencillo y más cómodo para la pequeña mascota que lo acompañaba.

— Shh, esta bien —Al tomar asiento junto a la ventana, deslizó el cierre del costado para darle espacio al cachorro. Tomó su torso y la levantó con cuidado, haciéndole tomar asiento en sus piernas para luego taparla con su suéter. Una manera de no llamar la atención e impedir que alguien la delatara.

Hero se quedó tranquila el resto del viaje, mientras _____ solo sorbía su nariz y veía el paisaje que el amanecer le daba.

El sol estaba saliendo.

Unas horas antes no había podido aguantar sus ganas de dormir un poco, y a penas despertó en el sofá, decidió emprender viaje al aeropuerto con Hero.

Esa era su idea desde el principio.

Si Jeongin no la dejaba irse, ¿como podría encontrar a su hermano?

Podría haberse quedad. Podría haberlo hecho, pero sentía que una parte, muy profunda en el pecho, le gritaba que debía volver al lugar en donde todo empezó.

A su hogar. Donde una noche, su hermano Seungmin, le había prometido salir a buscar dinero para luego volver y sacarla de esa horrible casa.

La noche en la que el y ella hicieron el pacto de verse en una semana.

Pero eso nunca pasó.

Y _____ de cierta forma estaba perdiendo cualquier tipo de esperanza.

Sentía que había perdido una parte de ella... Y esa parte tenía el nombre de su hermano.