Entró en la pequeña habitación, encontrándose con una arreglada An Haneul que lo esperaba cabizbaja.
—Creí que aún estarías dormida —mencionó dirigiéndose al sofá.
—¿A dónde fuiste a noche?, desperté y ya no estabas —susurró sin verle.
—No podía dormir, salí a caminar por la ciudad. Es hermosa de noche, jamás me había detenido a ver el cielo desde un ángulo distinto al de mi ventana.
—Es malo que no duermas, hoy tienes algunas reuniones, ¿verdad?
—Sí, pero estaré bien.
—¿Extrañas a alguien? —preguntó temerosa.
—Sí, a mi madre y a mis amigos —sonrió inocente por su corazón que cada vez parecía más fuerte, menos frágil—. Aunque estoy feliz, no creí poder decir que tengo amigos.
—¿Extrañas a uno en especial? —El amor que sentía por Seok Jin era honesto y pese al dolor latente en su pecho, le interesaba todo motivo de felicidad por parte de ese joven, al que le encontraba cicatrices constantemente ocultas entre sus mangas o que faltaba por varios lapsos a la escuela por "accidentes" graves.
—Pues siendo honesto: extraño mucho a Kim Nam Joon. —Notó la iluminación en su semblante e impulsivamente apretó la tela de su pantalón, conteniendo sus lágrimas. Él no se percató, se había recargado totalmente en el respaldo con sus brazos sobre su nuca, mirando al techo. — Compartimos mucho antes de mi viaje, creo que me acostumbré a su presencia. Es una persona muy especial.
—¿Especial?, ¿crees que también lo sería para mí? —dijo en una voz apenas perceptible.
—Es complicado. Siento que cada uno de nosotros podemos ser ordinarios y especiales, no depende de uno, sino de la vida a la que llegas —trató de explicar lo más claro de su ideología—, para ti Nam puede ser ordinario, para mí una persona especial, pero él sigue siendo el mismo. Simplemente llegó a mi vida para cumplir un papel distinto al que tiene que cumplir en la tuya. Cada persona es ordinariamente especial dependiendo de los ojos que lo ven. Dependiendo del corazón que cuidan, rozan e incluso destruyen, también al que ni llegan a tocar.
—Llevan poco de conocerse y se llevan muy bien, siento envidia. —Puso sus manos en su regazo. —Sé que no soy especial para ti, pero tú has golpeado mi corazón tan fuerte, supongo que solo me alejaré hasta que lo destruyas.
—¿No hay un punto medio?, quizá pueda cuidarlo de una manera distinta. —Agachó la cabeza mirando sus pies. — Es que no puedo prometerte lo que quieres.
—¿Qué es lo que quiero? —Caminó hasta él y se sentó a su lado, tomó sus manos. — S-s-solo quiero que seas feliz, claro que me encantaría ser capaz de ser yo el motivo, pero creo que mi corazón terminaría destruido de igual manera. —Se alejó para salir de la habitación. — No podría verte triste a mi lado. Piénsalo Jin, estoy dispuesta a intentarlo y mira que la apuesta es alta: puedo perder mi corazón.
Lo dejó con los pensamientos al borde y las emociones alborotadas. La joven le estaba dando una oportunidad más de ser honesto no solo con ella, sino con él mismo.
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La musa secreta [NamJin]
FanficKim Seok Jin, hijo de un militar homófobico del cual sólo recibió golpizas por sus rasgos finos, su amor por el rosa y ademanes femeninos, tiene que hacerse cargo de una disquera que su familia maneja, mientras su padre vuelve al campo de batalla p...