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Corrí a abrazar a mi hermano.
El me dio demasiadas vueltas.

Josh: No puede ser ¡Hermanita!, Wow mírate dios mío estás tan hermosa.
Yo: Gracias...

Le sonreí.

El puso su mano en mi cabeza midiendome a su pecho.

Josh: Oye estás más alta.
Yo: Ah pasado un año.
Josh: Si... Waoh, te extrañe tanto.

Yo solo le sonreí.
Maldito mentiroso.

El fue a saludar a mi padre y después a todos los demás.
Vi a Angela acercarse a mi.

Angela: Hola cariño, ¿Cómo has estado?.

Angela, ella me caía muy bien, era muy linda, tierna y comprensible, incluso creo que la quería más que a mí hermano. Ella me entendía tanto más que ninguna otra persona en el mundo.

Yo: Todo a estado perfectamente bien... Me alegra que estés aquí.

Ella me abrazo.

Angela: Te extrañe horrible, espero que tengas cosas nuevas que contarme.

Si, créeme tengo mucho que decir. Pero cosas que tal vez no debería de hablar.

Yo: Por ahora... Digamos que algunas cosas.
Angela: Mmm... Bueno, no sé de qué se traten pero quiero escuchar cada detalle, tenemos muchos días.

Ella me acarició la mejilla y se fue a saludar a los demás.

Voltie y vi a mi hermano hablando con papá.

Me acerque y después vi como Josh se dio cuenta que Sebastian estaba ahí.

Josh: ¿Sebastian?, ¿Seb?, ¿Eres tú?.

Sebastian le dio una sonrisa a mi hermano.

Sebastian: Pero si es el pequeño defensa, ¿Cómo has estado Josh?.

Yo fruncí el ceño viéndolos curiosa.

Yo: ¿Defensa?.
Josh: A si, es que cuando tenía como unos 7 o 8 años Seb me enseñó a jugar fútbol americano y me llevaba a todos los partidos, ya que mis padres estaban ocupados cuidando a la T/N bebé.

Me rei.

Yo: Lamento haberte quitado el tiempo con tus padres.

El me devolvio la sonrisa y me abrazo por la espalda.

Josh: Si, seb fue un gran maestro de defensa.
Papá: Claro, te enseño todo lo que sabe.

Seb se rió nervioso pero horado.

Sebastian: Ja, bueno ahora pase con tu hermana.
Josh: ¿Enserio? ¿Apoco tu juegas fútbol americano?.
Yo: ¿¡Que!?, No, la última vez que lo intente me ibas a sacar el ojo.
Josh: Tenías unos 13 hermanita, hay que intentarlo de nuevo.
Yo: Jaja, no gracias, yo los observaré desde la banca.

Los tres se rieron.

Josh: ¿Entonces que le enseñas?.
Sebastian: No de hecho... Va a terapia conmigo.

Josh me voltio a ver seriamente.

Josh: ¿Enserio?, ¿Desde cuándo?.
Yo: Tiene como unos 6 o 7 meses...

El me miró con preocupación.

Josh: ¿Porque nunca me lo contaron?.
Yo: Nunca contestaste el teléfono...
Papá: Hija...

Ya se, no debía reclamarle nada hasta que fuera el momento oportuno, pero de verdad quería gritarle en la cara que odiaba esa idea de que se hubiera alejado de mi vida por mucho tiempo.

Mi Psicólogo. (Sebastian Stan y tú). 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora