HELL 👹 Light Yagami

12 👹 intelligentia

Rato más tarde...

Light llevaba ya unos cuantos minutos siguiendo a Naomi, tratando de sonsacarle su verdadero nombre para poder matarla. Se dio cuenta de que era demasiado inteligente.

-Espere, señorita Maki - pidió Light. - No conseguirá hablar con L, es imposible.

-Es posible que él acceda a reunirse conmigo... - murmuró ella. - Entonces no era más que una voz que sonaba por el ordenador, pero... hace unos años, estando en los Estados Unidos, hubo un caso en el que trabajé a sus órdenes.

-Oh, ¿cómo? - Preguntó Light, sorprendido. - ¿Que usted ha trabajado con L?

-De hecho... hasta hace apenas 3 meses yo también era un agente del FBI - comentó Naomi.

"Joder, ¿dónde está Rinka cuando la necesito?", pensó Light, echándole la culpa a la chica. "Se supone que esto es mío, pero no me vendría mal que colaborara de vez en cuando."

Apartamento de Misa Amane

Rinka estaba dibujando en su cuaderno mientras su gato miraba por la ventana.

-¿Ocurre algo interesante? - Preguntó ella, haciendo una burbuja con el chicle que tenía.

El gato la miró unos segundos, pero luego siguió interesado en mirar por la ventana.

De pronto, Misa abrió la puerta.

-¡Rinka! - Exclamó ella.

La chica suspiró. Odiaba cuando Misa gritaba.

-¿Ahora qué quieres? - Preguntó.

-Acabo de volver de una sesión de modelaje y me han dado bastante dinero - sonrió Misa. - Como hermana mayor tuya que soy, te voy a dar un aguinaldo.

La rubia le entregó un sobre. Ella lo abrió y miró el dinero que había.

-Vaya... gracias, Misa - murmuró. - Ya puedes irte.

La chica le dio un beso en la frente y se fue de la habitación. El gato bajó del mueble donde estaba y se acercó a su dueña.

-Esto sí que te interesa, eh - murmuró Rinka. - Ni lo pienses, este dinero es para comprarme lápices nuevos.

Mientras tanto...

-Ya me extrañaba a mí tanta agudeza y resolución en una persona de a pie - sonrió Light. - Y eso por no hablar de su prudencia que es impresionante. Tengo mucho que aprender de usted.

Ryuk comenzó a reír.

-Me encanta cuando mientes tan descaradamente - comentó el Shinigami.

-En este caso en particular, decidí que incluso los policías del cuartel de investigaciones podrían ser sospechosos - dijo Misora. - Por eso no bajo la guardia con nadie, sin embargo sí confío en L. Pensaba que si me acercaba a la jefatura y deja bien clara mi identidad, tendría la posibilidad de reunirme con él directamente.

-Por supuesto, pero... ¿entonces por qué me cuenta a mí algo que solo le iba a decir a L? - Preguntó Light.

-Justo cuando estaba en pleno enfado por no poder hablar con nadie, vas y apareces tú y sueltas que eres el hijo del jefe - respondió Naomi. - Seré franca contigo. Es porque hay algo en ti que me recuerda mucho a L.

Light se quedó unos segundos en silencio.

-¿Por qué no investigamos juntos? - Propuso él. - ¿No le apetece pasar a formar parte del equipo de investigación? Evidentemente, no se lo propondría a cualquiera, pero usted es diferente. Nos hace mucha falta gente así, sería una pena que quedará relegada al papel de una mera informadora. Su historial como agente del FBI la convierte en alguien más valioso que la mayoría de nuestros agentes y, por si fuera poco, L confía en usted. Lo único que hace falta para poder entrar en el grupo de investigación es un documento de identificación, la recomendación de otro miembro y la aprobación de L, por supuesto.

-¿Me propones participar en la investigación? - Preguntó sorprendida.

-Haberla conocido ha sido cosa del destino, de eso estoy seguro. Yo personalmente la recomendaré - contestó Light. Misora se quedó mirándole sorprendida y él sonrió. - Lo siento, perdone, me he dejado llevar por el entusiasmo.

-No te disculpes - respondió ella.

-Por más que le ofrezca la posibilidad de participar en su tiempo libre, estoy seguro de que tiene muchos compromisos - murmuró el chico. - Además, supongo que vivirá en América.

-Pues... la verdad es que pensaba irme a vivir allí en primavera después de la boda, pero ahora que mi novio ha muerto todavía no he decidido qué es lo que voy a hacer - contestó Misora.

"Bien llegados a este punto solo falta un empujoncito", pensó Light.

-Pero usted aún es muy joven y guapa, participar en un caso tan peligroso podría... - comenzó a decir, hasta que la mujer lo interrumpió.

-Yo ya no tengo nada que perder y quiero atrapar a Kira cueste lo que cueste. Es lo que más deseo en el mundo, te lo aseguro. Por favor, permíteme colaborar - pidió Misora.

Ryuk comenzó a reír.

-Me alegro - sonrió Light. - Entonces... ¿puede mostrarme algún tipo de identificación?

-Es que... - murmuró Misora.

-¿Sí? - Preguntó Light.

-Verás, es que el nombre que te he dado antes no era el verdadero - confesó. - Yo... lo siento.

-Ah, no pasa nada - contestó él. - En realidad, ocultar su nombre es una muestra más de su prudencia. A mí ni se me habría ocurrido. Créame, dice mucho en su favor, tengo que reconocerlo.

-¿Te sirve mi permiso de conducir, por ejemplo? - Preguntó ella.

-Claro - asintió Light.

Misora sacó su cartera y se lo entregó.

"He llegado a tiempo", pensó Light, mirando el carné.

Sacó la hoja de cuaderno que había arrancado antes de salir de casa y comenzó a escribir.

Naomi Misora.
Suicidio.
A partir de las 13:25 del 1 de enero de 2007 solo piensa en suicidarse sin causar molestias y de modo que su cadáver sea prácticamente ilocalizable. Muere en el plazo de 48 horas.

Light miró su reloj, no era la primera vez que lo hacía.

-Perdona, ¿puedo saber porque estás todo el rato pendiente del reloj? - Preguntó al agente.

-Esto... bueno... es porque... yo soy Kira - confesó Light.

Misora abrió los ojos sorprendida y asustada. Light y ella se miraron durante unos segundos, hasta que ella se dio la vuelta y comenzó a andar.

-¿Ocurre algo? - Preguntó él.

-Tengo que hacer una cosa... - murmuró Misora.

-Ah, a lo mejor mi padre ya ha encendido el teléfono - dijo Light. - ¿De verdad no quiere hablar con él?

-No tengo nada que decirle - murmuró ella.

Light sonrió con maldad.

-Adiós, señorita Naomi Misora - se despidió.