Capítulo 45._ La Cita

11.9K 929 620
                                    

Rímel, base de maquillaje, polvos y mas polvos, rubor, labial rosa palo, sombras tenues en los ojos y no sé cuantas cosas más son las que Cloe usa en mi, me ha tenido por más de una hora sentaba frente al tocador y ha planchado mi cabello por no se cuanto tiempo más, incluso me ha hecho algunas ondas al final de este y demás cosas, por cierto, también ha elegido mi atuendo, mayas color café oscuro y un vestido de mangas cortas recto color naranja, botines color camello y tiene listo un suéter del mismo color de las mallas para cuando me vaya, le dije que me veía como un ropero, derecha y sin ninguna forma pero ya que me he visto mejor creo que si me veo bien.

—¡Listo! —Dice emocionada acomodando mi cabello—. Estas impresionante, preciosa, bella, glamurosa.

—Gracias, aunque me sienta como si fuese a ir a una gala o algo parecido he de admitir que eres una excelente estilista.

—¡Ay por favor! Jamás te dejaría ir a una gala vestida así, no seas ridícula. —Se burla—. Ya quiero saber a donde irán, todavía no me creo que Zero te haya invitado a tener una cita. —Cambia drásticamente de tema regresándome los nervios nuevamente.

No he dejado de pensar en ello desde la noche anterior luego de colgar la llamada, una cita para hoy a las 11 am. Ni siquiera comí mucho por si vamos a comer no deseo despreciar nada, Cloe adapto mi atuendo ppr cualquier situación que pudiese presentarse, si muy caliente por si hacia calor, ni tan fresca por si hacia frio, casual y elegante pero no tanto ¡Dios! Incluso Chase se sorprendió con la noticia y me sugirió uno que otro tip, todos sexuales porque él es así, un libertino igual que Zero.

El sonido de alguien tocando la puerta nos toma por sorpresa a ambas, corremos de un lado a otro sin saber que hacer y hablamos cosas inentendibles por lo bajo, yo busco mi suéter y ella levanta el tiradero que hizo con mi ropa.

—¿A caso hay ratones ahí dentro? —Es su voz, es él.

—¡En seguida voy! —Grito.

Ambas nos tranquilizamos, Cloe se sienta en su cama lista para fingir que esta recién levantada sin haberse gastado casi dos horas arreglándome para que luzca bonita.

Una vez que termino de dar todas esas vueltas innecesarias por los nervios, me limpio las manos ligeramente húmedas por el sudor de los nervios en mi vestido y abro la puerta para encontrarme con la más perfecta imagen ante mis ojos, un Zero de cabello desaliñado algo húmedo, siento que esta mas largo que de costumbre pues siempre lo lleva peinado de múltiples formas y hasta hoy lo lleva así de alborotado, rebelde y sedoso.

Él lleva un pantalón color negro y una playera blanca que puedo ver por el espacio en su pecho que no cubre su chaqueta gris oxford, mismo color que el de sus tenis. Le doy una vista rápida para luego solo perderme en sus hermoso ojos grises que no me cansó de admirar.

Zero me mira con sorpresa, podría decir que admirado o al menos eso me gustaría creer, sus ojos los tiene muy vivos y su boca entreabierta, me mira de pies  cabeza sin una sola piza de vergüenza, veo como sus labios rojos y carnosos se mueven pero nada sale de su boca.

—¡Estoy lista! —Hablo con rapidez antes de que él lo haga y antes de que se note mi nerviosismo.

—Vaya, tú estas tan, tan… ¡Naranja!

—¡Agh! —Gruñe Cloe a mi espaldas y siento como si la mandíbula se me desencajara ¿Naranja? ¿Es en serio?

—¿Nos vamos? —Pregunta antes de que diga nada y antes de que me arrepienta de ir con él siendo tan tonto.

—Regreso pronto. —Le digo a Cloe tomando el suéter que me he dejado en la cama y el pequeño bolso de tira larga donde no cabe nada mas que mi cartera pues ni siquiera me he cargado el celular para no tener interrupciones. 

Ahora, es verdad. (Parte 2 VERDADES)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora