Capítulo 45

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No puedo dormir

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No puedo dormir.

Este día ha sido muy confuso, todo lo que ha sucedido en los últimos días es casi demasiado para mí.

A mi lado Wyatt esta profundamente dormido. Su pecho sube y baja lentamente al ritmo de sus respiraciones. Luce tan pacifico y es una tentación totalmente enorme el no molestarlo mientras duerme. La visión de él dormido es totalmente adorable.

Elijo no molestarlo y en cambio busco algo de ropa y me visto rápidamente. Me muevo y colocó un suave beso en la cabeza de Wyatt antes de salir de la habitación y dirigirme al bar del hotel.

Cuando llego ahí, lo primero que puedo observar es a Gerald sentado en un taburete en la barra, bebiendo en un vaso lo que parece ser un escocés. Es su bebida habitual. Las luces rojas que centellan en la barra y rebotan en su cara, hacen que su apariencia luzca igual que cuando se encuentra furioso con su hijo.

Sin embargo, no lo he visto enojado en muchos días. Probablemente se deba a que no ha estado hablando con Wyatt últimamente.

El vaso de Gerald tintinea mientras lo coloca contra el mármol negro de la barra.

No he hablado con él desde que Wyatt me conto acerca de que su padre se entero sobre nuestra relación. Y aunque estoy seguro que estuvo furioso por eso en algún momento, puedo decir que eso debe ser la menor de sus preocupaciones.

Me deslizo en el taburete junto a él. Él se vuelve hacia a mí, mirando al extraño que ha osado sentarse a su lado, y cuando descubre que soy yo, su mirada se tiñe con desprecio.

Pido un trago al barista que se acerca y mientras lo prepara, Gerald y yo nos sentamos en un silencio incomodo. Ninguno de los dos tiene prisa por ser el primero en iniciar una conversación.

— Sé lo que estas pensando. —dice finalmente, su mano se mueve para tomar un par de manís de un cuenco frente a nosotros y sacude el exceso de sal con su pulgar antes de llevárselo a la boca. — Piensas que solo soy otro imbécil de mente cerrada que cree que es malo ser como eres.

Lo miro por un largo momento antes de responder.

— Puedes decir la palabra "gay", ya sabes. Eso haría que suene un poco más normal y no como si estuviéramos hablando de una catástrofe colosal que simplemente evitar la palabra por completo.

— No puedo cambiar mi manera de pensar y estar simplemente bien con eso. No fui criado de esa manera. Nací y crecí en Texas, y no en Austin, si es que entiendes lo que quiero decir.

Doy un trago a mi bebida antes de asentir.

— Entiendo el contexto, sí.

— Pero si piensas por un segundo que no amo a mi hijo, entonces vete a la mierda.

— Sé que te preocupas por Wyatt. —digo simplemente, porque en el tiempo que he estado en este lugar; "amar" no es un término que elegiría para lo que siente Gerald por su hijo. Él ha sido un padre muy duro y rápido en juzgar con Wyatt.

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