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Él es un buen mentiroso.
Una vez que he salido de él, me desplomó junto a Wyatt y él se arrastra encima de mí como si fuésemos la pareja más enamorada del mundo. Como si esto no fuera solo un polvo más para él.
El sudor gotea por mi cabeza y cae sobre el colchón. La subida de endorfinas está bajando, y ahora me siento como una mierda. Cuando lo estaba jodiendo se sentía increíble, pero ahora me siento sucio. Me odio, no solo a mí, sino a ambos por llevar todo esto hasta el final. ¿Cómo podía reusarme a esto cuando toda lógica dentro de mí me estaba gritando que yo no solo quería esto, sino que lo necesitaba? Simplemente no podía ignorar la química entre nosotros.
Wyatt me mira, con una sonrisa en su rostro. Se ve tan arrogante como jodidamente siempre. Probablemente sabe que esto ha sido una jodida increíble. Aunque fácilmente este es el sexo más caliente que he tenido, estoy seguro que palidece en comparación con sus vacaciones exóticas llenas de sexo en Hawái.
Él apoya una mano en mi pecho y me besa antes de decir;
— Eso fue muy caliente.
Me remuevo en la cama incomodó y salgo de debajo de él, recogiendo el condón usado de la mesilla de noche.
— Sí. —le digo mientras me dirijo al baño donde tiro el condón por el inodoro y busco mi ropa.
— ¿Por qué mierda te estás cambiando? —pregunta siguiéndome al baño totalmente desnudo y orgulloso.
Me deslizo en mi ropa interior y mis vaqueros esperando salir de aquí pronto.
— Debería conseguirte el hielo y la comida.
— Cállate —Él sonríe ampliamente, puedo verlo por el espejo del baño, pero en cambio evito el contacto visual—. ¿Estás hablando en serio, no? ¡Vamos! No te tienes que ir. —se acerca y envuelve sus brazos alrededor de mis hombros, mirándome seductoramente. Las comisuras de sus labios se levantan mientras sonríe nuevamente. — Podríamos tener otra ronda. —susurra ofreciendo un beso, pero giro mi cara antes de que sus labios toquen los míos.
— Gracias, pero creo que lo que hicimos ha sido suficiente. —Me alejo de su agarre—. Sabes que esto fue una idea de mierda que nunca debió suceder.
— No tenemos que decírselo a nadie.
Ahora siento que está jugando conmigo. Eso es lo que ha hecho desde el principio. ¿Eso es realmente lo que estaba buscando? ¿Hacer que bajara la guardia para poder convertirme en su perra?
— ¿Todavía necesitas ese hielo? —pregunto, insistiendo en ser responsable por la tarea a la que realmente he venido aquí.
Su rostro cambia de confusión a furia en un instante.
— ¿Por qué estas siendo un idiota? ¿En serio? ¿Vas a fingir que lo que hicimos no fue caliente?
— Voy a hacer mi mejor esfuerzo, sí.
— Que te jodan.
— Tengo un trabajo que hacer Wyatt, esto fue un error.
— ¿Y qué mierda importa el trabajo? ¿No podemos tener sexo solo porque se siente bien?
— ¿Por qué no me sorprende que pienses de esta forma? Piensas que solo porque se siente bien debemos hacerlo, ¿pero sabes qué? No todo el mundo funciona así. No todo el mundo puede tener lo que quiera ni hacer lo que quiera. No todo el mundo es un tipo rico y privilegiado que puede actuar como si el mundo fuera jodidamente suyo.
— No me conoces. —responde con los dientes apretados.
— Sé todo lo que necesito saber. Sé que mañana esta experiencia no significara más que otra muesca en el cabecero de tu cama. Solo voy a ser otro tipo con el que has jodido.
— ¡Jodidamente sal de mi habitación! —dice arrojándome mi camiseta. Estoy sorprendido por su furia repentina, pero sé que esto es lo mejor para los dos en este momento, así que hago mi camino a la puerta y salgo de su habitación, tirando de mi camisa hacia abajo cuando camino por el pasillo.
