Derek Mitchells viene a mí como el mandito gorila que es. Con un metro noventa y cuatro, tiene la construcción de un luchador profesional, él es una fuerza intimidante para muchos, pero yo no estoy intimidado incluso cuando él me da una expresión feroz en su cara mientras me sonríe mostrando su protector bucal.
Es una mierda, que desde que todo el mundo sabe que soy gay, algunos jugadores crean que me voy a ver o bien atraído o intimidado hacia ellos. Es una jodida mierda, porque mientras fingía ser heterosexual no tenía que probarle nada a nadie, pateaba traseros en el campo y era normal, lo que todos esperaban de mí, ahora con mi homosexualidad al descubierto, algunos tipos simplemente no pueden soportar que un tipo gay les pate el culo en el campo.
Durante la última jugada, cuando él me abordo, me dio un puñetazo en el estómago y algunos de mis compañeros de equipo reclamaron que eso era una falta personal. Pero el árbitro no les hizo caso, algunos chicos solo me dieron palmaditas para demostrar su solidaridad.
Pero desde ese momento estoy viendo rojo en el campo, estoy cabreado.
Pero para ser sincero no estoy enojado con él específicamente. Estoy enojado con todos. Con Tristan por engañarme. Con Gerald y Jackie por morder mi culo a diario por todos esos malditos patrocinadores que perdí. Con Brandon y su forma de abandonarme después de haberme follado. Voy a mantener la calma.
No pierdas tú mierda, Krause. Me repito constantemente.
Pero voy a seguir a Derek Mitchells hasta que tenga una oportunidad de venganza. Y cuando él tiene la pelota, sé que esta es mi oportunidad perfecta para conseguir mi revancha.
Cuando él se acerca a mí corriendo con el balón bajo el brazo, me disparo con fuerza hacia él. En el último momento él arroja la pelota a uno de sus corredores, sé que debo detenerme, mi excusa de taclearlo se ha ido, pero no puedo detenerme, así que lo hago. Me arrojo sobre él tirándolo al suelo y aterrizando cómodamente mi codo en lo que creo que es su hígado.
Él maldice entre dientes mientras se hace un ovillo en el suelo retorciéndose de dolor. La única puta recompensa que voy a recibir por esto es que saquen mi culo del campo.
Cuando me levanto, escucho a los árbitros y jugadores de ambos equipos molestarme por lo imbécil que soy. Cuando levanto mi mirada, veo a Howard y Brandon en las gradas mirándome como si hubiera perdido mi puta mente.
Es raro que mi cólera me esté consumiendo de esta manera, pero he estado tan enfadado con Brandon por aquella noche. Eso es lo que me ha alimentado durante el último par de semanas durante los partidos, cosa que me ha ayudado a ganarlos. Sin embargo, sigo odiando a Brandon.
No quiero reconocer que él estaba en lo correcto antes, que no debimos haber jodido. Me ha afectado demasiado. Sobre todo sus acusaciones al azar que si bien algunas son ciertas, otras simplemente eran jodidas como la mierda.
¿Quién es él para juzgarme por lo que he hecho?
No debería sorprenderme que él piense que soy una puta. Aun así, si él piensa que soy tan jodidamente zorra, debería darme cuenta cuando un polvo realmente vale la pena, ¿no? Y eso no solo fue bueno. Fue el mejor puto sexo de mi vida. Esa mierda significo algo para mí, algo que no debería haber significado nada, pero lo hizo, y me maldigo por ello.
He estado intentando recordarme que Brandon tiene un pasado jodido. Estoy seguro que es debido a eso lo que lo hace renuente a entrar en cualquier cosa, y que su tipo de trabajo le exige que no lo haga. Pero estoy tan jodidamente cansado de que todo el mundo me diga cómo deben ser las cosas. A quien debo escoger. O incluso lo que debería sentir.
~***~
— ¿Qué mierda fue eso? —pregunta Gerald.
— Sí, me gustaría saber qué coño fue eso. —agrega Shannen.
Esta es la segunda reprimenda que recibo por la mierda con Derek en el campo. El entrenador tuvo otro ataque de histeria en el vestuario mientras me regañaba frente a todo el equipo. Ahora Brandon, Dennis y Howard están al otro lado de la habitación siendo testigos de mi segundo regaño. Estamos en la oficina del entrenador Jackie, esta está decorada con varios trofeos y placas enmarcadas de recortes de donde los mayores periódicos del país hablan sobre lo buenos que somos.
— ¿Qué mosco pudo haberte picado para taclear a Mitchells de esa manera? —pregunta Shannen. — Acabamos de sacarte de la mierda con Brandon golpeando un fan y ahora haces esto, Wyatt no puedo trabajar así.
— Lo siento, se me escapo de las manos.
— ¡Estoy harta de que las cosas se te escapen de las manos! —grita totalmente tensa, dejando en la habitación un silencio pesado.
Gerald está en silencio mientras observa la rabieta de Shannen. Creo que está disfrutando que, para variar, no es él que está montando una escena esta vez.
— Entiendes de lo que se tratan las relaciones públicas, ¿no? —Pregunta—. Se trata de una colaboración mutua. Trabajamos juntos para elaborar con mucho cuidado, una imagen que podamos llevar a la gente. Que podemos hacer que inviertan en ti. Pero no me ayudas, porque eres infiel y promiscuo. Tu guardaespaldas está loco, y pierdes tu mierda en el campo y consigues que todo el equipo sea penalizado por tu estupidez. ¿Ves lo que estoy diciendo?
— Si, —respondo amargamente. No hay razón para defenderme ahora de la acusación de infiel. Después de todo Shannen no sabe que fue Tristan quien mintió a la prensa, no sabe que fue él quién me engañó constantemente, no se lo dije antes porqué se que me habría obligado a desmentir a Tristan frente a los medios y eso era algo que no quería hacer.
— ¿Qué te está pasando últimamente, Wyatt? —pregunta Gerald, su tono no es enojado, sino lleno de preocupación. No estoy acostumbrado a que suene razonable, o como un padre que realmente se preocupa por mí, pero esto no va a compensar todas las demás veces que no ha estado ahí para mí.
— Lo siento mucho. Las cosas se me fueron totalmente de las manos. Derek estaba siendo un completo pendejo ahí afuera, así que necesitaba mostrarle que no iba a dejar que pasara sobre mí.
— Todos son unos imbéciles. —Dice Gerald—. Tú lo eres, todos lo son. La diferencia entre tú y todos los demás es que tú perdiste tu mierda esta noche. Ahora, dime que este será un único caso. Dime que solo fue cosa de esta noche y estará bien. Pero si tienes algo que sacar, sácalo de tu puto sistema porque no quiero más actuaciones como esta.
— ¿Por qué no le preguntas al maldito guardaespaldas? —le pregunto. La expresión de Brandon cambia totalmente a una de alerta, estoy seguro que él piensa que estoy a punto de decirle a Gerald que toda esta mierda es debido a que follamos y me dejo sintiéndome como una sucia puta barata, porqué él inmediatamente después de venirse en mi culo, me dejo solo en la habitación. Disfruto de su expresión de horror, quiero que él piense que eso es lo que voy a hacer, quiero que él piense que voy a delatarlo ahora mismo. — Alguien ahí afuera está planeando como matarme, así que creo que tengo derecho de estar un poco loco y distraído ahora mismo, ¿no crees?
Salgo de la habitación sin esperar respuesta. Estoy cansado de todos ellos.
ESTÁS LEYENDO
RENDICIÓN
RomanceRENDICIÓN: Acción o resultado de rendir o rendirse; someterse al domino o a la voluntad de alguien.