2 Much (Justin Bieber)

Capítulo 12

Desperté con un fuerte dolor en la cabeza, me encontraba en mi casa, no sé como había llegado.

Me levanté con pereza y fui al baño. Me vi en el espejo, traía el cabello destrozado y el maquillaje se había corrido.

¿Qué pasó anoche?

Quise meterme a la ducha, pero no tuve valor así que decidí seguir durmiendo.

Al salir del baño vi a Andrew sentado en mi cama.

-¿Andrew?- dije asustada.

-Hola Kendra- sonrió como si nada.

-¿Desde cuando estás aquí?

-Desde hace mucho, tu mamá cocina rico.

-¿Dormiste aquí?

-No, qué dices. Volví en la mañana.

-¿Mañana?

-Son las doce del mediodía Kendra, vaya que dormiste mucho.

-¿Doce?- me fijé el reloj de la mesa de noche- No, no, no- empecé a buscar ropa en el armario.

-¿Qué sucede?

-El trabajo. Debía reemplazar a David hoy.

-¿A qué hora empieza el turno?

-A las doce y media- entré al baño- ¿Podrías llevarme, por favor?- grité.

-Claro.

Después de unos minutos había salido y estaba alistandome para ir.

-¿Dime que no pasó nada anoche?- hablé mientras me peinaba.

-Lamento no decirte eso, pero si que pasaron cosas- habló de lo más divertido.

-No- me tapé la cara- ¿qué hice?

-Primero bailaste con un chico toda la noche, no te separaste de él para nada- pensó- luego estuvimos hablando de tu pequeñísimo secreto acerca de Bieber.

No puede ser Andrew lo sabía, cómo pude decírselo.

Al alcohol corría por tus venas Kendra

-Te lo tenías muy guardado- rió- y por último bailaste con él unas cuantas canciones- se calló- bueno, solo bailaste una canción con él y sí que lo aprovechaste. Quién diría que se tienen ganas- se hizo la burla.

-¿Ganas?

-Si, se nota desde lejos.

-Si no te hubieras detenido, de seguro no hubieras amanecido en tu casa- siguió riendo.

-No hice nada malo, solo bailé y ya.

-Si, como digas- me ignoró- pero bueno, tu sigue negándose. De lo que si deberías preocuparte es de tu mamá.

-¿Ella me vio llegar anoche?

-Así es, estaba muy molesta.

-No me digas que...

-Si, se vienen días de castigo.

-Ay no- me tapé la cara- ¿se encuentra abajo?

-Para tu buena suerte no, llevó a Lis a su partido.

-Mas bien, vamonos antes que venga y me llevé la regañada más grande de mi vida.

-Pero de todas formas ella te regalará en la noche- se levantó de la cama.

-Lo sé, pero siento que se le pasará un poco hasta esa hora.

-Si tu lo dices- negó con la cabeza.