2 Much (Justin Bieber)

Capítulo 48

Justin y yo salimos del coliseo agarrados de la mano, para luego encontrarnos con nuestros amigos. Logramos verlos desde lejos y fuimos directamente donde ellos.

—Felicidades chicos— abracé a Ethan y Andrew— jugaron muy bien.

—Muchas gracias— dijeron al unísono.

—Y bieeen— habló Carla— me enteré por ahí que habrá una fiesta luego de todo esto. Dijeron que es para festejar a nuestros amados leones— hizo una vos rara.

—Yo creo que sí, supongo que compensaremos la salida que me dijiste con esta fiesta— hablé.

—No Kendra, eres muy aburrida. Esta fiesta es muy aparte de nuestra salida.

—No Carla, sabes sobre las cosas que tengo pendiente. O es esto o no será nada.

—Agh, bueno— habló con fastidio— Será mejor que estemos preparándonos.

—Sí— habló Chloe— supongo que nos cambiaremos de ropa y luego nos encontraremos aquí nuevamente.

—No, claro que no. No podemos perder tiempo, que los chicos vayan a a las duchas y listo, nosotras estamos bien.

—Okay— Chloe hizo una mueca.

—Bueno— Justin entró a la conversación— ¿les parece si nos vemos aquí dentro una hora? Iré a ducharme, tal vez Kendra y yo comamos algo y tambien haremos una par de cosas más — agarró mi cintura con suavidad y me dio un beso corto.

—No coman pan en frente de los pobres—Andrew se quejó— pero me parece bien que sigan alimentándose fuera de nosostros porque iugh— fingió— una arcada— así que tienen su permiso.

—Gracias mi estimado amigo— ambos estrecharon su manos.

—Bien yo iré con Ethan— aumentó Carla.

—Yo debo ir con un amigo, nos vemos luego— Chloe se alejó sin decir más.

—Y Andrew se queda solo— hizo un puchero.

—Claro que no Andrew, irás con nosotros a comer— habló Ethan abrazandolo y se alejaron.

—Solo nosotros dos Justin— elevó una ceja.

—¿Qué es lo que debemos hacer?— cuestioné— porque yo no sé nada.

—Fue una pequeña mentirilla. El ambiente estaba poniéndose tenso y fue lo único que se me ocurrio— puso su brazo sobre mi hombro y caminamos hacia las duchas— Tu nueva amiga es muy mandona.

—¿Carla?

—Sí

—No, tal vez malinterpretaste las cosas, solo quería divertirse, ya sabes. Es muy buena persona.

—Mmm, no lo sé Kendra, no me gustó la forma en la que te habló.

—Tranquilo Justin, no pasa nada.

—Bueno— hizo una pausa— Hablando de otro tema, quería agradecerte el lindo detalle que tuviste conmigo.

—¿Yo?

Rió— Sí, tú— hizo que me diera la vuelta, observó mi camista y luego me abrazó por detrás.

—Bieber— susurró en mi oído— número seis— una coriente eléctrica pasó por todo mi cuerpo.

Reí— Creí que nunca lo notarías.

—¿Cómo no notarlo? Es simplemente glorioso, gracias. La verdad significa mucho para mí.

—De nada, lo hice con mucho amor y una máquina de cerigrafía casera.

—Tengo una idea.

Llegamos a las duchas.