Capítulo 23

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Cena: Parte dos

-¿Qué haces aquí?- preguntó sorprendido.

-Yo...yo- tomé aire- Tu mamá me invitó a cenar y antes  que preguntes cómo lo hizo o por qué me conoce, te contaré como sucedió todo esto.
Iris, tu mamá, vino en la tarde y te llevó el almuerzo, me dijo que le hablaste de mi y...

Se aclaró la garganta- Sigue- ordenó.

Uy pero que mandón.

-También dijo que podia venir a cenar cuando quiera.

-Y tú elegiste justamente este día- bufó.

-No, claro que no ¿crees que soy tan estúpida como para venir a tu casa, sabiendo como están las  cosas entre nosotros?

-Pues si, la verdad no sorprende.

Vaya, no me esperaba esa respuesta.

-Ya vi cómo eres, haces todo para molestarme.

-¿Molestarte?

-Ya vete Kendra por favor.

-No, no voy a irme solo porque tú me lo pides.

-Ves como tengo la razón, disfrutas molestarme.

Claro que no era así, pero si le decía que no o le daba argumentos valedereos, no me me creeria de todas formas.

A estas alturas ya me daba igual lo que piense.

-¿Acabaste?

-¿Qué?- dijo confundido.

-Mira, no me interesa lo que pienses o lo que puedas decir a los demás en contra de mi. Qué más puedo perder, mi vida a sido un caos todo este tiempo, no me afectaría si dices cualquier cosa sobre mi.

Mentira, si me afectaría, me afectaría mucho y más viniendo de él, pero no quería demostrar debilidad.

-¿Y crees que mi vida si ha sido fácil este tiempo?

Me encogí de hombros e hice como si no me importara, estaba cansada de recibir malas conductas de su parte. Ahora era mi turno.

-No me interesa Bieber- me acerqué a él para poder intimidando, mala idea, el único quien intimidada en esta habitación era él- No todo se trata de ti.

-Pues claro que si- habló indignado- te metiste con mi familia, te metiste en asuntos que no te correspondían ¿Crees que será fácil perdonarte?- acortó más los pasos entre nosotros.

Perdónarme, él pensaba perdonarme, era una buena señal ¿No?

Estábamos demasiado cerca, él miró mi mi rostro con detenimiento, me sentía muy pequeña al lado de él.

Por mi parte yo hice lo mismo, tenía un rostro tallado por los Dioses, observé sus labios y Justin al darse cuenta de aquello se lamió los labios e inconscientemente yo imité esa acción.

Me miró fijamente con esos maravillosos ojos color miel, estaba totalmente embobada.

Dió un paso más, hasta acortar todo espacio que podría haber, pasó su brazo lentamente por mi cintura e hizo que me apegara a él.

¿A caso esta era la típica escena de una película donde los protagonistas discutían y lo solucionaban con un beso?

-No entiendo por qué eres así Kendra- susurró.

-Así cómo- me acerqué más, estábamos solo a unos milímetros.

Posó su otro brazo en mi cintura y yo puse los míos sobre si cuello. Ambos nos acercamos más, estábamos con ganas de besarnos.

-¿Interrumpo algo?- la mamá de Justin tocó la puerta y entró de golpe.

Me separé rápidamente de él y este se rascó la cabeza.

-No mamá- Justin se aclaró la garganta.

-He estado llamándolos desde hace rato, vamos, bajen. Luego podrán charlar todo lo que quieran.

¿Charlar? Íbamos a besarnos

Los dos nos miramos com complicidad y nos dirigimos hacia el comedor.

La mesa estaba puesta y cada uno se sentó en un respectivo lugar, la mamá de Justin comenzó a servir la cena. Cuando los platos estaban listos, nos predispusimos a comer.

Al principio el ambiente estaba en silencio.

-Y dime kendra- Iris sonrió- por qué este niño- miró a Justin- no te trajo. Me dijiste que se lo dirías.

Porque su hijo ya no trabaja conmigo

-Ah, pues- tragué saliva- Ju Justin...

-Lo olvidé- Justin me salvó- Ya sabes ma, mi cabeza esta en todos lados- sonrió.

-Sí- completementé- ademas le dije que yo salgo más tarde y no hubo forma de ponernos de acuerdo.

-Oh, ya veo. No hay problema- dijo no muy convencida y siguió comiendo

Algunos minutos despúes empezamos a hablar de mi, de mi familia, mis metas, sueños y cosas así, sentí que querían conocerme más, lo digo más por Arthur e Iris, sentí que a Justin no le importaba lo que decía.

Posteriormente empezaron a hablar de Justin, contaron algunas anécdotas de cuando el era niño y los pasatiempos que tenía, fue asi que me enteré que a Justin le gustó siempre tocar instruenntos, desde niño mostraba amor por la musica.

La verdad que fue una sorpresa escuchar aquello, no sabía que Justin sentía ese amor por la música.

Ahora entiendo por qué estaba tocando el piano hace rato y a su vez cantando aquella hermosa letra.

La cena estuvo muy rica, entre plática y plática el tiempo había pasado muy rápido y ya era hora de irme a casa.

Nos levantamos de la mesa y fuimos con rumbo a la puerta.

-Gracias, todo estuvo delicioso- sonreí- espero volverlos a ver en otra oportunidad- salí de su casa- Hasta luego señor Arthur, hasta luego señora Iris- hice una pausa- hasta luego Justin.

-No, es tarde ¿no piensas irte sola verdad?- habló Iris

-No tengo otra opción- me rasqué la cabeza.

-Que Justin te lleve.

-Sí, puedes usar mi coche- intervino Arthur.

Pensé que Justin se negaría o mostraría disgusto, pero no fue así.

-Claro- su papá le entregó las llaves.

Me despedí nuevamente de ellos y nos dirigimos al coche. Entre al lugar de copiloto y él al lado del conductor.

-Mi casa se encuentra en...

-Conzoco el camino.

Luego de decir eso no volvimos a dirigirnos la palabra, el trayecto fue tranquilo, ninguno de los dos habló de la escena que protagonizamos en su casa, era extraño pensar en eso.

¿A caso yo también le gustaba?

Después de cierto tiempo habíamos llegado a mi casa.

-Gracias- me quité el cinturón de seguridad y bajé del automóvil.

Antes que pueda cerrar la puerta se despidió.

-Descansa.

-Tu también- sonreí como boba y se fue.

No lograba entender a Justin, como pasó de ser molesto a ser amable, cómo pasamos de discutir a casi besarnos.

Justin era un enigma.




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Holaaaa ¿Cómo les está pareciendo la historia? Me gustaría leerlas :)

Gracias por todo su apoyo ♡







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